- Presentan reservas en la discusión en lo particular del dictamen.
Al presentar las reservas a la minuta que propone cambios a los decretos por los que se expiden la Ley de Petróleos Mexicanos y la Ley de la Comisión Federal de Electricidad, la senadora del PRD, Dolores Padierna Luna, calificó de falacia el propósito de convertir en empresas productivas del Estado a Pemex y CFE, y afirmó que tampoco les da autonomía.
Argumentó que Pemex cerró 2013 con utilidades de un billón 330 mil millones, mientras que CFE tiene un volumen de ventas superior a los 318 mil millones de pesos. Sin embargo, la ley quiere colocar a Pemex en indefensión y por lo tanto en proceso de extinción.
En el tema autonomía presupuestal de Pemex y CFE, la legisladora subrayó que Pemex se queda con los proyectos menos rentables y los privados con los yacimiento de mayor rentabilidad; el régimen fiscal de Pemex es depredatorio y confiscatorio, mientras que el de las petroleras privadas, será benigno y con mayores ventajas.
Se busca desplazar y eliminar a Pemex, a través de las licitaciones y contará con una competencia en condiciones desfavorables, además que se vuelve propiedad del Ejecutivo Federal; serán las secretarías de Hacienda y Energía las que decidan por Pemex. No se tiene, por lo tanto, ninguna autonomía de gestión, precisó Padierna Luna.
A nombre del PT, el senador Manuel Bartlett Díaz señaló que en México se vive en un régimen dominado por una oligarquía, donde los grandes capitales siguen consolidando sus pérdidas y ganancias para no pagar impuestos y en este contexto los ingresos que genera Pemex han sido la solución para solventar la falta de recursos.
Así, la autonomía de Petróleos Mexicanos es una mentira, toda vez que la empresa está absolutamente controlada, tiene un presupuesto limitado y debe solicitar las inversiones que quiera realizar.
El senador Mario Delgado Carrillo, del PRD, consideró que en esta reforma no hay autonomía para Pemex, ya que el techo presupuestal lo fija la Secretaría de Hacienda.
Asimismo, manifestó que se deja a la empresa sin capacidad de gestión porque no se ha creado un sector energético fuerte que permita consolidar a Petróleos Mexicanos.
El senador Zoé Robledo Aburto, del PRD, explicó que el propósito de la reserva es incorporar tres aspectos fundamentales para fortalecer la transparencia en los tratos entre Pemex y CFE con empresas privadas: la primera es que el testigo social, sea persona física o moral, participe de principio a fin en el procedimiento de contratación; dos, que se presente un testimonio final ante la Secretaría de Energía.
El tercero y más importante, que en caso de detectarse irregularidades se informe a la Auditoría Superior de la Federación (ASF), independientemente de que así se haga con la Auditoría Interna de la Secretaría de Energía y el Consejo de Administración.
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