COMUNICADO-1184
• Tercer dictamen permite a ejecutivos de transnacionales ser miembros del Consejo de Administración de Pemex
Al posicionarse en contra del tercer dictamen de leyes secundarias en materia energética, el senador Rabindranath Salazar Solorio, del PRD, señaló que lejos de consolidar a Petróleos Mexicanos (Pemex) como una empresa del Estado con autonomía presupuestal, se le deja en una incertidumbre normativa y se continúa con la lógica del pasado.
En vez de determinar en primer lugar las necesidades de reinversión de Pemex para mejorar su operación, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público decide cuánto dinero necesita y, con base en ello, ordena a la paraestatal.
El proyecto no establece como requisito para ser parte del Consejo de Administración de Pemex el ser ciudadano mexicano, ni no tener o haber tenido vínculo con alguna empresa competidora de Pemex, lo cual abre las puertas a los ejecutivos de las empresas transnacionales. Más aún, exenta a los consejeros de sus responsabilidades administrativas como servidores públicos, en franca violación al artículo 128 constitucional.
Existen aspectos abusivos, como el hecho de que al “híbrido jurídico” de empresa productiva se le dota de este carácter a fin de convencer a los ciudadanos de que competirá con privados y extranjeros con las mismas características. Pese a ello, no se salvaguardan los derechos de los trabajadores ni se establece el reparto de utilidades entre los mismos, lo cual constituye un acto de discriminación contra la clase trabajadora.
Antes de iniciar su posicionamiento, el senador hizo constar que el actual procedimiento viola el numeral 147, apartado 2, del reglamento del Senado. Aseguró que su partido no convalida lo que consideró como un método ilegal, sino que busca que la gente conozca los argumentos y tenga elementos de juicio suficientes sobre el tema energético.
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