Senado de la República

Los legisladores y las comisiones del Senado de la República deberán informar, en un plazo no mayor a 30 días, a la Mesa Directiva de las reuniones u otras actividades que realicen con cabilderos en la promoción de los intereses de estos últimos.
Así lo propuso el senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Zoé Robledo Aburto, al presentar una iniciativa con proyecto de decreto que busca reformar el numeral 2 y adicionar el número 3 al artículo 298 del Reglamento del Senado.
El legislador dijo que el proyecto busca que cada comisión integre un archivo con los documentos que les entreguen los llamados cabilderos, relativos a iniciativas, minutas, proyectos y, en general, cualquier acto o resolución emitida por el Senado.
Por instrucciones del Presidente de la Mesa Directiva, dicha información deberá publicarse en la Gaceta y en la página de Internet del Senado, para que pueda ser objeto de consulta pública.
En tribuna, durante su exposición de motivos, Robledo Aburto, remarcó que lo mínimo que se le puede entregar a los ciudadanos son cuentas claras y transparentes sobre este tipo de actividades.
“Cumplir el reglamento del Senado en materia de cabildeo es un reflejo de la democracia, uno que ofrece un cauce institucional a estas demandas ciudadanas”, comentó.
Subrayó que la actividad legislativa implica responsabilidad y compromiso de cada uno de los legisladores, así como de las comisiones, para representar correctamente a todos los ciudadanos y no solamente a grupos específicos.
Consideró que hablar de cabildeo es hablar de intereses encontrados, de saber encontrar los lazos que pueden unir ideas en conflictos para llegar a un acuerdo entre diversos sectores de la política.
Recalcó que el cabildeo es una actividad natural en todo congreso o parlamento en el mundo, además de que es parte importante del procedimiento legislativo, en el que siempre existirá la negación de intereses y la definición de alianzas entre diversos grupos representados y afectados por un proyecto de ley.
Por ello, sostuvo Robledo Aburto, el cabildeo debe tener reglas, no puede ser un campo de batalla de armados contra indefensos, la verdadera democracia debe hacerse con el diálogo, la transparencia, la razón y la persuasión para con ciertos intereses.
Dicha actividad, agregó, debe realizarse a través de mecanismos institucionales que permitan la transparencia y  preserven el interés público, no el particular. Es así que a través del acceso a la información, indicó, se pueden combatir las prácticas desleales que deforman el proceso legislativo.
La iniciativa fue turnada a las comisiones unidas de Reglamentos y Prácticas Parlamentarias y de Estudios Legislativos.
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