Versión estenográfica de la entrevista al senador Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, al término de la ceremonia de expedición del testimonio notarial que asienta la propiedad, a favor del Senado de la República, del inmueble ubicado en avenida Paseo de la Reforma no. 135.
REPORTERA: Presidente, no sé si tenga las cifras, ¿al final cuánto costó todo esto para los mexicanos?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Es difícil calcularlo, porque las inversiones no se dieron en un solo momento, sino son inversiones que se dieron a lo largo del tiempo.
Desde los trabajos preparatorios, como decía el senador Emilio Gamboa, desde 1994; la adquisición progresiva de algunos inmuebles, las donaciones que recibimos por parte de la Ciudad de México, de una parte de la superficie y por supuesto la inversión en la obra.
Es muy difícil calcular el monto total de la obra. Lo que sí podemos afirmar es que nos vamos a ahorrar importantes recursos a partir del finiquito del fideicomiso, pero sobre todo de lo que recuperamos de la pretensión original que tenía la empresa contratista. Ahí hay un ahorro de prácticamente 153 millones de pesos, más 18 millones de pesos que nos ahorramos anualmente por el pago de predial y lo que vamos a recuperar de todo el tiempo en el que hemos tenido el edificio y que se han pagado los impuestos.
Y también por supuesto el control administrativo que a partir de este momento tenemos sobre el inmueble y que, en consecuencia, nos va a abaratar los costos de administración y mantenimiento.
REPORTERA: ¿Pero sí se fue de todas maneras la obra a un costo mucho más elevado de lo que originalmente se planeó?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: La obra, como todas las obras, tienen distintos momentos en los cuales se van cambiando las estimaciones. Sufrió varias modificaciones el proyecto, se encontraron algunas dificultades en la construcción.
No podemos dar una cifra sobre cuál es el valor real de toda la obra porque, insisto, las inversiones se dieron a lo largo del tiempo. Lo que sí podemos afirmar es que con el acto del día de hoy estamos ahorrando una importante cantidad de recursos y hemos dejado una reserva de prácticamente 500 millones de pesos, para poder desarrollar el resto de los componentes inmobiliarios del Senado de la República.
REPORTERO: Senador, me indican que fue un litigio largo, este.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Fue un litigio muy largo que se resolvió a partir de una serie de estrategias y actos jurídicos.
Como ustedes saben, el conflicto llevaba ya varios años, desde que se recibió materialmente el inmueble, hasta el día de hoy.
REPORTERO: ¿Contra quién fue?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Son distintas partes, porque son fundamentalmente los proveedores y sobre todo una relación que se fue construyendo con la fiduciaria, con BANOBRAS, precisamente para resolver todos los aspectos relacionados con la recepción formal y material de este inmueble.
REPORTERO: ¿O sea que sí hubo la posibilidad de que no se hubiera ganado el Senado?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Pudo haber sido un largo litigio, muy costo e incluso que pudiera haber tenido un desenlace difícil para el Senado de la República en términos económicos.
Se evitaron contingencias jurídicas, se logró una buena solución. Hoy tenemos la propiedad del inmueble del Senado de la República y hemos ahorrado importantes cantidades de recursos.
También hemos dejado ya una estrategia para recuperar alguna parte de los recursos que se han invertido en estos inmuebles y que no tuvieron alguna justificación. En consecuencia, podemos asegurar que en el corto plazo vamos a recuperar a favor del Estado Mexicano, algunos recursos.
REPORTERA: Senador, cambiando de tema, sobre el asunto de la CNTE, el PRD hoy por ejemplo, en su plenaria se reunió con un grupo de integrantes de esta Coordinadora.
Ayer el ingeniero hizo una propuesta o señala, más bien, que felicita al PRD por abrir esta puerta en el ámbito legislativo para que la CNTE a lo mejor tenga la posibilidad de presentar una iniciativa ciudadana.
Habla de una especie de contrarreforma a la reforma educativa, lo cual fue rechazado tajantemente por el senador Gamboa y el Jefe del Ejecutivo.
¿Ustedes como PAN, cómo lo están viendo? ¿Cómo una posibilidad, una contrarreforma posible? ¿No?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Nosotros no vamos a dar marcha atrás a la decisión fundamental que implica la reforma educativa, de quitarle el control de las plazas a los sindicatos y devolvérselo al Estado mexicano.
Nosotros no vamos a regresar a los viejos modelos en los cuales las plazas se vendían, se regalaban o se heredaban.
Tampoco vamos a regresar a los tiempos en los cuales la calidad no era un argumento para medir el funcionamiento del Servicio Educativo Mexicano.
Nosotros no vamos a ir a una reforma que tenga esos propósitos.
Por supuesto que en el ámbito de nuestras responsabilidades públicas, tenemos la obligación de escuchar, de analizar, de revisar las iniciativas que se presenten, pero las iniciativas en todo caso deben ir en el orden del mejoramiento de la prestación del servicio educativo, no para regresar a los tiempos anteriores donde el futuro de los niños y jóvenes mexicanos estaba en manos de líderes sindicales.
REPORTERA: Pero tiene evaluación, que es lo que ellos están reclamando.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: No hay una alternativa específica a la evaluación. Lo que ellos están diciendo es que no quieren evaluación.
Lo que ellos están diciendo es que si un profesor falta tres días a su trabajo porque está en una manifestación en una calle no debe tener consecuencias.
Si una persona, cualquier persona en su empleo falta tres días consecutivos al empleo, lo corren. Pero no quieren algunas personas que haya consecuencias a la falta, al incumplimiento de las obligaciones mínimas.
REPORTERA: Cedieron entonces ustedes un poco a la postura que tiene el gobierno de que primero regresen a clases y que quiten los bloqueos para que haya un diálogo.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: No, lo hemos dicho con toda claridad. La negociación debe tener límites y condiciones.
Y los primeros límites y condiciones son en objetivos, no la abrogación de la reforma educativa. Y en las condiciones del diálogo no podemos dialogar con personas que están afectando los derechos de miles de niños y jóvenes que no tienen acceso al derecho a la educación.
REPORTERA: ¿O sea, regreso a clases para que se continúe el diálogo?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Regreso a clases, suspensión de los paros y las expresiones de protestas como condición de posibilidad para que haya un diálogo útil con el Gobierno de la República.
Y mientras eso no suceda, tampoco tienen legitimidad para pedir al Congreso de la Unión que revise la iniciativa.
REPORTERA: ¿Y no es un callejón sin salida, senador?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Bueno, hay vías en democracia de solucionar los conflictos.
Yo no creo que la única forma de expresar una inquietud, una inconformidad con una política pública sea dejando a miles de niños sin educación, sea afectando derechos.
REPORTERA: ¿Pero sin ninguna de las partes se mueve? Porque la CNTE no parece…
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Está muy claro que la bola, la pelota está en la cancha de la CNTE. Si la CNTE quiere una mesa de diálogo, una mesa de negociación con el gobierno, que regresen a clases y que suspendan las expresiones de protesta que están afectando derechos.
Ahí está una clara oferta, que desmovilicen temporalmente su movimiento para ganar una mesa de negociación y, en función de eso, construir soluciones.
Pero si la única condición para poder sentarse a negociar es que primero abroguemos la reforma educativa, o bien, no se le aplique las consecuencias de la reforma educativa, simplemente esa posición no tiene ningún… (inaudible)
