Versión estenográfica de la declaratoria de inicio de la consulta democrática nacional del Senado de la República, en el marco de la reunión de la Comisión Especial para el Diagnóstico y Reflexión sobre el Texto que conforma la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muy buenas tardes tengan todos ustedes, bienvenidos al Senado de la República.
A nombre del Senado, quiero dar la más cordial bienvenida al gobernador Gabino Cué Monteagudo, presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores. Muchas gracias, gobernador, por acompañarnos.
De la misma manera al licenciado Felipe Solís Acero, que participa en esta ceremonia en representación del Secretario de Gobernación. Transmita el saludo del Senado de la República al señor secretario Miguel Osorio Chong.
Al diputado Ramón Bañales Arámbula, en representación del diputado presidente de la Cámara de Diputados, licenciado Jesús Zambrano Grijalva.
Saludamos por supuesto al maestro Jaime Valls Esponda, secretario general ejecutivo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, ANUIES, con la que hoy suscribiremos un importantísimo convenio de colaboración.
A la doctora Patricia Galeana Herrera, secretaria técnica del Comité para la Conmemoración del Centenario de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Bienvenida, doctora.
Está por incorporarse con nosotros el senador Enrique Burgos García, representante del Senado de la República ante el Comité para la Conmemoración del Centenario de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, al cual saludamos.
Lo mismo al senador Miguel Romo, vicecoordinador de la fracción parlamentaria del PRI.
Y por supuesto a nuestro anfitrión, el senador Raúl Cervantes Andrade, presidente de la Comisión Especial para el Diagnóstico y Reflexión del texto que conforma la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Quiero dar, a nombre del Senado de la República, la bienvenida a los magistrados, presidentes de colegios, presidentes de instituciones, académicos investigadores y a todos los que el día de hoy nos acompañan. Sean ustedes bienvenidos al Senado de la República.
Agradecemos su presencia en calidad de testimonio de este convenio de colaboración, que se enmarca en el centenario de nuestra Constitución, pero sobre todo en el plan de actividades que el Senado de la República se ha propuesto durante este año, hacia el 5 de febrero de 2017.
Le damos el uso de la palabra al senador Raúl Cervantes Andrade, presidente de la Comisión Especial de los festejos del Centenario.
Por favor, adelante senador Raúl.
SENADOR RAÚL CERVANTES ANDRADE: Gracias, señor presidente. Gracias a todos y a todas por estar aquí.
El Senado de la República comparte con ustedes el día de hoy el inicio de esta consulta nacional democrática. La reflexión que hizo el presidente del Senado de la República y el presidente de la Junta de Coordinación Política, y después de estos dos órganos, el máximo órgano del Senado de la República, que es el Pleno; mandatarme a esta Comisión Especial para hacer un diagnóstico, una reflexión sobre el contenido de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos.
En este ejercicio tenemos que reflexionar, primero, en qué significa tener un sistema constitucional. En 1789 Jefferson le escribe a Madison una reflexión sobre el significado de las bases del sistema constitucional norteamericano, que sin duda son las bases también del sistema constitucional universal. Le hace la reflexión diciéndole que el planeta, la tierra es de los seres vivos, pero que sólo lo teníamos en usufructo.
Si viéramos esa figura en 1789 y hoy lo que se entiende en el Siglo XXI de la justicia intergeneracional, el que fundamenta el desarrollo sustentable para las futuras generaciones y la obligación de los seres humanos que vivimos en la actualidad; entenderíamos lo que significa la evolución de los conceptos constitucionales.
Poniendo ese ejemplo, un primer problema que enfrenta la teoría constitucional es entender, comprender el contenido y la interpretación de los contenidos constitucionales desde una perspectiva y óntica; desde una perspectiva de fundamento de normas, principios y reglas que le den solución y límite al desarrollo del Estado, pero que también le den un desarrollo democrático las libertades.
Los constitucionalistas enfrentan un dilema cuando hay un acercamiento a este problemario, el primero: ¿cómo puedes reconocer la voluntad fundante en el caso mexicano del Constituyente que inició en el 16 y termina con un producto en febrero del 17?
Y los enormes problemas que tienen las sociedades contemporáneas, con múltiples visiones y a veces hasta con disensos ideológicos, económicos y sociales.
Si este dilema que se enfrenta cuando se analizan los temas constitucionales, comprendemos que deberíamos de tener un sistema de contenido, un sistema de interpretación que le dé cause a los problemas actuales, sin violentar los principios fundantes del sistema constitucional.
México y nuestra Constitución, ha sido muy analizada por las múltiples modificaciones constitucionales. Hay estudios que se dan por número de palabras, por número de reformas. México ha sido un sistema constitucional que ha atendido los problemas de su sociedad.
Los problemas que tenemos en México deberían de solucionarse viendo una teoría constitucional como un diálogo intergeneracional, como un diálogo único que inició en el 16 y que viene a nuestros días; que en ese diálogo sobre los conceptos y las figuras y los principios, es de lo que va a versar esta consulta.
Las teorías constitucionales y la mejor forma de generar sistemas, es generar una conciencia general de repensar estos fundamentos que iniciaron el 16 y que tienden a atender problemas de las sociedades modernas tan complejas que vivimos en el Siglo XXI.
¿Qué significa para las mexicanas y los mexicanos o cualquier persona que esté dentro del territorio nacional, el sistema de derechos humanos que hemos generado constitucional y convencionalmente hablando?
El principio identificador del derecho humano es un problema de la dignidad humana, ¿cómo atendemos adecuadamente el trato en dignidad humana? Lo que significa que los mexicanos y mexicanas en sus casas, en sus trabajos, en las cárceles, en los centros migratorios, en cualquier parte del territorio, sea respetado su tema de dignidad humana.
Hoy, el Senado de la República ha generado figuras de Parlamento Abierto, desde la Legislatura anterior e impulsada con la sociedad actual en esta Legislatura. He propuesto el concepto de cocreación del derecho, entendiendo claramente que las teorías que hablan de la cocreación, son las teorías de la interpretación ex post de la vida de la norma. Sin duda, esto sería innegable que en las sociedades actuales se necesita y es funcional.
Pero la invitación es la cocreación ex ante en el proceso de la creación de la norma, y ahí es en donde se inscribe el Senado de la República en este Parlamento Abierto en la colaboración de la construcción de dictámenes, reflexiones, foros, audiencias públicas y, en este caso, consulta nacional.
No estamos sólo haciendo un homenaje a los 100 años de la Constitución. Queremos generar un insumo adecuado de reflexión a los académicos, a los expertos, a la sociedad civil organizada y a los ciudadanos que participen o no en ella; en su reflexión directa.
La mayoría de los mexicanos viven en el sistema constitucional, respetan el sistema constitucional, pero pocas veces tienen el diálogo con un poder que lo invite a hacer su reflexión directa de qué significa ser mexicanos en este sistema constitucional; y cuáles son las enormes aspiraciones que tienen los mexicanos de solucionarse a través de una democracia constitucional.
En esta evolución, se mandató a esta Comisión a hacer una reflexión si estábamos en el constitucionalismo del Siglo XXI. Si, como en otras teorías, es que estamos en el neoconstitucionalismo, o si estábamos atendiendo a la constitucionalización del derecho.
En suma, si está respondiendo el sistema en esta unicidad y propuesta de diálogo permanente en la construcción de las figuras constitucionales.
No sólo sirve a 100 años el estar atendiendo y honrando lo que significó una lucha armada que llevó a un constituyente en el 16 a tener una Constitución social que puso en pauta a nivel mundial sobre este significado, sino la perspectiva y la prospectiva de lo que significa hoy en el Siglo XXI el Sistema Constitucional Mexicano, y si atiende, está atendiendo o debe de atender los problemas de forma adecuada.
Es retomar el diálogo, es retomar el debate de lo que se quiso, se ha querido y se quiere en el futuro sobre los sistemas constitucionales en México.
La ANUIES, a la cual agradezco a través del maestro Valls, ha participado con nosotros en poder ayudarnos a tener una metodología adecuada, con varios especialistas de diferentes partes de la República; y sirva esto como símbolo de que la consulta es a todo el país.
Que la consulta desde la estructura del poder, es la los poderes federales pero también a los niveles de gobierno, y por eso agradezco mucho al gobernador Cué, presidente de la CONAGO, su presencia. Porque necesitamos entender la visión estatal, la municipal, la federal, la de los órganos autónomos, pero también la de los académicos, la sociedad en su conjunto, y la sociedad en general.
Siempre he pensado, reflexionado y convencido que todo problema de una sociedad empieza en la Constitución y termina en la Constitución.
Reflexionemos, construyamos y evolucionemos en paz.
Muchas gracias.
PRESENTADORA: Muchas gracias al senador Cervantes Andrade por su mensaje.
Escuchemos ahora el discurso sobre la relevancia de la consulta democrática nacional en el marco de la Conmemoración del Centenario de la Constitución, en voz del senador Enrique Burgos García.
SENADOR ENRIQUE BURGOS GARCÍA: Muchas gracias. Bienvenidos.
Señor presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, senador Roberto Gil, con su anuencia.
Muy distinguida Mesa de Honor; muy distinguidos asistentes, amigas, amigos:
Efectivamente, como se ha planteado aquí en la voz del señor presidente del Senado y del senador Cervantes, presidente de esta Comisión Especial de Consulta, el propósito es señalar muy significadamente el Centenario de la Constitución Mexicana con un acto profundo de reflexión.
Qué mejor homenaje a la Constitución que nos rige, que una puntual reflexión, un análisis en la figura abierta de cara a la sociedad de lo que es, de lo que significa una Constitución.
Derivado de una lucha armada y de un pendiente que había dejado la Constitución del 57, particularmente el tema de lo social; la Constitución de 1917 se tradujo en un ejercicio de rectificación política y de reivindicación social. Ese fue el gran acontecimiento y lo sigue siendo.
Es obvio que el escenario de 1917 no corresponde al de 2016 o el del año siguiente, 2017, en su centenario. Naturalmente la evolución, las circunstancias y las sociedades han cambiado y se han transformado, pero tuvo el acierto el constituyente de Querétaro de prever su propia reformabilidad, a través de un esquema que permite ajustarse a la realidad.
Sin embargo, es oportuno tomar el pulso a la sociedad para evitar lo que decía Monroe, no queremos ni aceptaríamos un gobierno de los cementerios, queremos un gobierno, un Estado, una sociedad de nuestro tiempo; una sociedad, un gobierno y un Estado contemporáneo.
El mejor acierto de una sociedad es darse a sí misma su Constitución. El más importante de todos, porque así se constituye el Estado mexicano, con nuestros paradigmas y nuestras particularidades. Esa es la circunstancia específica de nuestra Constitución de 1917.
Hay quienes afirman que con más de 250 decretos de reforma o más de 600 reformas a artículos constitucionales ha perdido su esencia. Son puntos de vista, son esencias.
Nos contrastan a veces con otra forma de evolución constitucional, como la de los Estados Unidos de Norteamérica, sin duda pioneros en muchas cosas; pioneros en una Constitución rígida, escrita en un sistema presidencial también no parlamentario, por supuesto, pero también es cierto, como dicen algunos autores, que allá la constitución se reforma todos los lunes cuando la Suprema Corte interpreta la constitución.
Aquí es de otro modo. Sin embargo, es insistente el interés de la sociedad que el Senado de la República trata de retomar con toda nitidez, para que sin perder los elementos esenciales del Estado Mexicano, para que sin perder las decisiones fundamentales, los principios fundamentales que dan ese matiz único al Estado Mexicano, hagamos este ejercicio.
Al final de cuentas queremos vigencia plena de un Estado de Derecho; el Estado sin el Derecho sería solamente una expresión de fuerza; el Derecho sin el Estado una expresión de normatividad, pero carente de efectividad. La suma conceptual es Estado más Derecho, es la suma conceptual que evita el desbordamiento del poder.
A eso les ha convocado el Senado de la República y en eso esperamos y agradecemos por anticipado el esfuerzo que conduce específicamente el senador Raúl Cervantes en esta comisión.
Bienvenidos todos y muchas gracias.
PRESENTADORA: Muchas gracias al senador Burgos, representante del Senado de la República ante el Comité para la Conmemoración de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
A continuación vamos a dar paso a la firma del Convenio de Colaboración entre el Senado de la República y la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, ANUIES.
Firmarán este documento los senadores Roberto Gil Zuarth, Raúl Cervantes Andrade y Enrique Burgos. Y por parte de la ANUIES, su Secretario General Ejecutivo, el maestro Jaime Valls Esponda.
(FIRMA DEL CONVENIO)
Este convenio será suscrito en su calidad de testigos de honor por el doctor Roberto Villers Aispuro, Director General Académico de la ANUIES, el doctor Guillermo Hernández Duque, Director General de Vinculación Estratégica de ANUIES; doctor Salvador Vega y León, rector general de la Universidad Autónoma Metropolitana; doctor José Olvera García, rector de la Universidad Autónoma del Estado de México.
Y con este ánimo queda formalizado el Convenio de Colaboración entre el Senado de la República y la ANUIES.
Procedemos ahora a la fotografía conmemorativa de este evento.
Continuamos ahora con el mensaje sobre la importancia de la colaboración de la ANUIES con este órgano legislativo, en el marco de la consulta democrática nacional, en voz del Secretario General Ejecutivo de la ANUIES, maestro Jaime Valls Esponda.
MAESTRO JAIME VALLS ESPONDA: Muchas gracias.
Apreciado senador, amigo y paisano, Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, gracias por abrir los espacios del Senado a las instituciones de educación superior.
Estimado senador Raúl Cervantes Andrade, presidente de la Comisión Especial para el Diagnóstico y Reflexión sobre el Texto que Conforma la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Agradezco a nombre de las instituciones que integran a nuestra asociación su confianza en nuestra organización para apoyar los trabajos de la Comisión Especial que dignamente preside.
Distinguido senador Enrique Burgos García, representante del Senado de la República en esta comisión.
Señor gobernador Gabino Cué, presidente de la CONAGO.
Distinguidos miembros del presídium.
Distinguidos senadores y senadoras integrantes de la Comisión especial que hoy nos reúne.
Apreciados amigos titulares y representantes de las instituciones de educación superior que nos acompañan.
Señoras y señores magistrados.
Distinguidas profesoras y profesores integrantes del Comité de Especialistas para el Diagnóstico y Reflexión sobre el Texto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Señoras y señores:
El Centenario de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, además de ser un motivo de celebración, es también una invitación a reflexionar sobre los valores de nuestra Carta Magna y consultar qué tanto las mexicanas y los mexicanos conocemos acerca de los principios, valores y derechos que de ella emanan.
La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior se siente muy honrada y acepta con gusto la invitación que nos hiciera el honorable Congreso de la Unión, a través de la Cámara de Senadores, para trabajar de manera conjunta en el diagnóstico y reflexión sobre el texto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Por ello hemos convocado en principio a ocho académicos constitucionalistas del más elevado nivel académico que representan a universidades públicas y particulares, así como centros públicos de investigación de las diferentes regiones del país, a sumarse a esta labor e integrar el Comité de Especialistas que se encargará de definir y proponer los lineamientos de los diversos instrumentos mediante los cuales se realizará la consulta democrática nacional.
A ellos y a las instituciones que representan agradezco especialmente su apoyo y compromiso en esta actividad y les deseo éxito en los trabajaos para la elaboración del diagnóstico final sobre el texto constitucional.
Y ante el convenio que acabamos de suscribir, la ANUIES manifiesta su compromiso con esta tarea cívica nacional a la que el Senado de la República nos convoca. Las instituciones que conforman a la ANUIES participarán elaborando ensayos sobre los valores y principios de la Constitución, y se constituirán en centros de acopio de la consulta directa de quienes no puedan participar por medios electrónicos.
Por su parte, el comité de especialistas ha establecido ya en reuniones previas, la propuesta de la convocatoria que hoy se emite y ha hecho el compromiso de apoyar con el diseño de instrumentos de consulta, y la formulación del diagnóstico y del libro blanco de dicha consulta.
Mención aparte merece la realización de cinco foros regionales, que estaremos organizando en los meses de septiembre y octubre con el Senado y las instituciones de las cuales provienen los integrantes del comité especial; además del Foro Nacional con el que cerraremos la consulta, que tendrá lugar justo en donde se realizara la constituyente de 1917, en el estado de Querétaro.
En estos foros se promoverá la participación de diversos actores sociales, académicos, legisladores y funcionarios de los tres órdenes de gobierno, para debatir libremente sobre los antecedentes históricos, las realidades actuales y la prospectiva de nuestra Carta Magna.
Todos esos instrumentos arrojarán información valiosa para lograr una reflexión colectiva, nacional, sobre los valores y los principios que han hecho de México una nación de derechos y libertades; una nación ejemplar del Estado de Derecho en el concierto de los países.
Para finalizar, quiero dejar constancia de nuestro reconocimiento al Senado de la República y a esta Comisión Especial, por permitirnos participar en este grandioso proyecto y por ser un aliado permanente de la Educación Superior de nuestro país.
Muchas gracias, señoras y señores.
PRESENTADORA: Muchas gracias al maestro Jaime Valls Esponda, por su mensaje.
A continuación se llevará a cabo el nombramiento de los integrantes del Comité de Especialistas para el Diagnóstico y Reflexión sobre el texto que conformará la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Invitamos a los senadores Roberto Gil y Raúl Cervantes; así como al maestro Jaime Valls, sean tan amables de otorgar dichos nombramientos a los siguientes integrantes del Comité, a quienes invitamos sean tan amables de subir al presídium para recibir este nombramiento.
Iniciamos con el doctor Sergio Arnoldo Morán Navarro, profesor investigador de la Universidad Autónoma de Nayarit.
Solicitamos la presencia de la maestra María Nieto Castillo, profesora investigadora de la Universidad Autónoma de Querétaro.
Solicitamos la presencia del doctor José Antonio Caballero Juárez, profesor investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas, CIDE.
Solicitamos la presencia del doctor Pedro Rubén Torres Estrada, profesor investigador del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey.
Solicitamos la presencia de la doctora María del Pilar Olmeda García, profesora investigadora de la Universidad Autónoma de Baja California.
Solicitamos la presencia del doctor Carlos Natarén Nandayapa, Profesor Investigador de la Universidad Autónoma de Chiapas.
También tiene nombramiento, aunque no está presente en este momento, el doctor José María Cerna de la Garza, Profesor Investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Muchas felicidades a los nuevos integrantes del Comité de Especialistas para el Diagnóstico y Reflexión sobre el Texto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Muchas gracias al presídium.
Antes de continuar, nos solicitan que todos los académicos suban al presídium para realizar nuevamente una foto conmemorativa de este importante acontecimiento.
¿Prefieren al final? Muy bien.
Continuamos con las palabras del presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth, quien dará su mensaje y realizará la declaratoria de inicio de la Consulta Democrática Nacional.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muchas gracias.
Quiero reconocer al maestro Jaime Valls la disposición de suscribir este convenio con el Senado de la República, con la Comisión Especial encargada de la reflexión sobre el significado de nuestro texto constitucional de cara al Centenario, de la representación del Senado ante el Comité Organizador de los festejos, por este ejercicio que va a ser crucial en este año de conmemoraciones.
Cuando discutíamos con el senador Raúl Cervantes, con el senador Enrique Burgos, con el senador Emilio Gamboa, sobre cuáles deberían ser las actividades que el Senado de la República realizará este año, rápidamente llegamos a una conclusión de que no debían ser las típicas y tradicionales conmemoraciones: ediciones de libros, realizaciones de foros, algún evento cultural o un par de eventos académicos. Que teníamos que ir al fondo, lo que está en juego en este año previo al centenario de nuestra Constitución.
Y lo que está en juego es renovar nuestro contrato social; renovar nuestro pacto constitucional.
Y no me refiero a la creación de una nueva Constitución ni a la reorganización de la Constitución o una reforma integral, que eso es parte de las reflexiones a las que estamos convocados, sino a la renovación de nuestro patriotismo constitucional. El entendimiento de la función social, política de la Constitución, de sus contenidos como instrumento de pacificación, de ordenación de nuestra convivencia, de definición de los linderos del poder, pero también de los espacios en los cuales el individuo puede recrear su propia libertad.
Y llegamos a la conclusión de que era la mejor manera de celebrar el Centenario de la Constitución.
Nuestra Constitución ha pasado de ser una norma, la Norma fundamental que reflejaba las decisiones políticas fundamentales, muchas de ellas de carácter programática sin eficacia directa, a convertirse en una norma aplicable, no solamente en el Tribunal Constitucional en la Suprema Corte de Justicia de la Nación sino que puede ser invocada para la resolución de cualquier caso en cualquier momento y de cualquier tipo.
De una norma que era el parámetro de validez de normas de segundo orden en la cascada de aplicación normativa, o bien en la cascada inversa de revisión de las condiciones de validez, a ser el parámetro, la regla a través de la cual se resuelven todos los conflictos de nuestra sociedad.
Hemos hecho reformas cruciales a la Constitución que han cambiado de manera diametral su fisionomía. Las más destacadas:
La reforma en materia de derechos humanos que abre nuestro orden jurídico a las convenciones internacionales en materia de derechos humanos, que también abre el orden jurídico nacional al patrimonio ético que significan los derechos humanos que tienen alcance universal. La reforma en materia de amparo; las reformas en materia económica.
Un sinnúmero de reformas que han transformado de manera radical no solamente el contenido de la Constitución sino también nuestro constitucionalismo; el entendimiento de nuestra Constitución y la forma en la que aplicamos y razonamos a base de principios la Constitución.
Y no podíamos dejar de preguntarle a la gente, a los ciudadanos qué entienden por nuestra Constitución; cuáles son las condiciones de legitimación social de nuestra Constitución, dónde están las principales comprensiones de la ciudadanía en general con respecto a la utilidad, a la función y a la misión del texto constitucional y de las normas que la aplican, desde la ley hasta las sentencias de cualquier juez del orden común.
Y preguntar, que es el motivo de la consulta, fuerza a una reflexión, y esa es la cuestión de fondo.
A través de la red logística que nos aporta la ANUIES, pero también del enorme caudal de experiencia metodológica, construiremos esa pregunta o esa serie de preguntas a la sociedad sobre lo que significa nuestra Constitución en el Siglo XXI, lo que implica para su vida cotidiana y hacia dónde debemos mover nuestros pactos constitucionales.
Un pacto constitucional que se mueve todos los días, que se renueva todos los días en una sentencia del Tribunal Electoral o una sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, o cuando un juez del orden común inaplica una norma en razón o por razones de constitucionalidad.
Es un pacto que amplía los alcances de nuestro texto, que define los alcances de las libertades, que da contenido al principio de autonomía, al principio de dignidad, que define las interacciones entre derechos pero que también racionaliza el ejercicio del poder público. Porque en buena medida lo que la Constitución hace es ordenar nuestra vida en comunidad y en sociedad.
Por eso destaco este ejercicio, esta consulta democrática nacional sobre el texto constitucional.
Es un ejercicio reflexivo, pero también es un ejercicio para alentar la comprensión de nuestros ciudadanos sobre lo que significa la Constitución en el Siglo XXI.
Lo que significa para los mexicanos tener una Constitución abierta a nuevos contenidos en constante aplicación dinámica que no solamente cambia a través de la reforma constitucional sino que también cambia a través de la interpretación constitucional.
México ha recorrido un largo trayecto para confeccionar sus instituciones.
Somos una democracia, pero también somos un país que ha tenido condiciones de estabilidad institucional verdaderamente envidiables. Y a veces se nos olvida que hemos pasado casi 100 años de vida institucional ininterrumpida, con distintos momentos de tensión, con distintos cambios sociales y políticos, con distintas discusiones sociales, pero la institucionalidad mexicana se ha mantenido estable a lo largo del tiempo. Y esa es una buena noticia para nuestro país.
Creo que, en parte, ese largo periodo de estabilidad institucional se debe a que hay en la fibra de nuestra sociedad un patriotismo constitucional fuerte. La obediencia y el sometimiento voluntario a la Constitución y a las leyes, el encausar nuestros conflictos a través de las instituciones y de resolverlos por y a través de las mismas.
Y eso es justamente lo que queremos recrear con esta Consulta Nacional Democrática: el sentido de pertenencia, el sentido de vinculatoriedad, el sentido de aprecio social, el sentido de eficacia de la Constitución.
¿Cuál sería el resultado encomiable de este ejercicio? Que todas las personas de nuestro país, los ciudadanos, tengan buenas y fuertes razones para cumplir la Constitución y hacerla cumplir.
Porque el mandato de cumplir y hacer cumplir la Constitución no es solamente para quienes tenemos responsabilidades públicas; es la principal obligación ética de quienes vivimos en esta comunidad política.
Y de eso se trata en buena medida la misión, la función de estos trabajos conmemorativos: renovar el aprecio social, la legitimación social y las condiciones de cumplimiento de nuestra Constitución.
Es muy difícil declarar el fin de la mutación constitucional tan vigorosa que hemos tenido en nuestro país.
Hoy mismo estamos discutiendo distintas reformas que en algún momento tocará la Constitución, mando único, en fin; porque hemos aprendido como sociedad que la construcción de las instituciones empieza fundamentalmente en la pirámide del edificio institucional, y es justamente en nuestra Constitución. Principio y fin, como decía el senador Raúl Cervantes.
Este año, en el que habremos de conmemorar el Centenario del a Constitución, es también un momento para revisar muchos de los contenidos de la Constitución, para seguir avanzando en una dinámica de cambio jurídico, de cambio normativo que es, a su vez, reflejo de un cambio político.
No nos detengamos en la creatividad política institucional. Hagamos de la Constitución nuestro documento básico, el contrato social que define nuestras obligaciones y nuestros derechos, y las responsabilidades del Estado y de los gobiernos.
Hagamos que la Constitución sea vivida y sentida por los ciudadanos todos los días.
Que la sienta aquella persona que va a realizar un trámite al sector salud, que va a atenderse en alguna clínica, que va y pide a alguna autoridad que se le haga justicia, que se acerca a un policía para poder sortear una situación de peligro o de riesgo.
Que cada vez que un ciudadano interactúa con el Estado en cualquiera de sus dimensiones, sienta a la Constitución, porque esa autoridad está ahí en razón de una regla constitucional; pero también actúa en función de las directrices, de los parámetros y de las reglas constitucionales.
Que un ciudadano se sienta protegido y amparado por la Constitución, no solamente porque puede pedirle a alguien que lo ampare cuando una actuación sea indebida; sino porque se siente también con la certeza de que ahí están definidas las obligaciones y las responsabilidades de los gobiernos y del Estado en su conjunto.
De eso se trata este ejercicio, de eso se trata esta consulta nacional: la oportunidad que tenemos como sociedad de reanimar nuestro sentido de pertenencia a la comunidad; pero también de reanimar nuestro patriotismo constitucional.
Me toca la difícil misión de declarar formalmente inaugurados los trabajos de esta Consulta Nacional Democrática, y si me permiten lo haremos a continuación:
Siendo las 13:00 horas del martes 26 de abril de 2016, a nombre del Senado de la República y con la presencia de todos ustedes, damos por formalmente inaugurados los trabajos de esta Consulta Nacional Democrática sobre la Constitución Mexicana.
Que sea para bien del país, que sea por el fortalecimiento de nuestras instituciones y por la plena vigencia de los derechos de todos los ciudadanos.
Muchísimas gracias y enhorabuena.
PRESENTADORA: Muchas gracias al Presidente del Senado por su mensaje.
Procedemos ahora a la firma de la convocatoria de la Consulta Democrática Nacional sobre la Constitución Mexicana, por parte de los senadores Roberto Gil, Raúl Cervantes y Enrique Burgos.
Así también, signarán este documento la secretaria y los secretarios de la Comisión Especial que el día de hoy nos convoca, la senadora Cristina Díaz, y los senadores Héctor David Flores y José de Jesús Santana, quienes se encuentran frente al presídium y lo harán en su momento.
En este momento les presentaremos el spot oficial que ha preparado el Senado de la República para difundir esta consulta.
(PROYECCIÓN DE SPOT)
Agradecemos la presencia del senador Emilio Gamboa Patrón, presidente de la Junta de Coordinación Política.
Es así como queda formalizado el convenio de colaboración y la puesta en marcha de la convocatoria de la Consulta Democrática Nacional sobre la Constitución Mexicana.
La Comisión Especial para el diagnóstico y reflexión sobre el texto que conforma la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, agradece su interés y asistencia.
Por su atención gracias y muy buenas tardes.
