Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muy buenos días tengan todas y todos ustedes. Agradecemos su presencia en este encuentro el día de hoy.


Agradecemos a cada uno de los senadores y de las senadoras, al presidente del Senado de la República, al senador Roberto Gil.
Esta mañana nos acompaña la señora Lilian Tintori, bienvenida Lilian a este Senado de la República.
Y la señora Antonieta Mendoza de López, esposa y madre de un preso político, de Leopoldo López; uno de tantos presos políticos que hay hoy en Venezuela.
Es para nosotros un honor tenerlas aquí, compartirles que desde el Senado de la República hemos estado muy atentos a la situación por la que atraviesa Venezuela.
Hemos estado también haciendo señalamientos en las comisiones, en el Pleno del Senado, diversos pronunciamientos que más adelante les voy a compartir y que además les estoy dejando un libro denominado “Acciones por la libertad y democracia en Venezuela”, para que ustedes puedan llevarse cada uno de los documentos que nosotros hemos impulsado a favor de los derechos humanos, a favor de la democracia y de las libertades en Venezuela.
Si les parece, cedería el uso de la palabra a la señora Lilian Tintori, para que exponga la situación por la que atraviesan en Venezuela.
Bienvenida.
SEÑORA LILIAN TINTORI: Gracias, senadora Mariana, amiga.
Miren, no saben la emoción que sentimos de estar aquí, porque no es venir a un Senado y hablar que en esta posición debería estar Leopoldo López aquí sentado, no yo. Leopoldo es el político, Leopoldo es el que va a hacer política con todos ustedes, son de la misma generación.
Hablo con cada uno de los líderes y me recuerdo de Leopoldo con esa fuerza, con ese ánimo. Estoy segura que muy pronto Leopoldo va a estar aquí sentado con ustedes y van a seguir construyendo y van a seguir avanzando en las democracias y en las libertades.
En los ideales de su política, “todos los derechos para todas las personas”, esa es la frase que caracteriza la lucha de mi esposo Leopoldo López, que está preso, aislado en solitario, en una cárcel militar hace dos años, cumple dos años el 18 de febrero, el jueves que viene.
Le estaba preguntando al presidente si tenía que leer todas estas tarjetas, me autorizó a no leerlas. Quiero agradecer a todos los que están en esta mesa sentados, a todos los senadores, estoy muy impresionada de este libro.
Muchos me han preguntado, periodistas, que si la reunión de ayer, por qué pasa tanto tiempo. No, miren todo lo que ha hecho el Senado mexicano por Venezuela, todo este libro, han sido constantes, consecuentes, solidarios; es impresionante realmente, todos.
Mariana, muchísimas gracias, senadora, por tanto trabajo, tanto esfuerzo y quiero nombrar a una persona que está en esta mesa, que es mi hermano y es hermano de Leopoldo, que es Gustavo Tovar. Gracias, Gustavo, por todo lo que has hecho por Venezuela desde aquí, desde este Senado, con estos líderes que es un honor conocer, que es un honor tenerlos cerca.
Y quiero hacer un resumen muy sencillo, sé que han estado en Venezuela, el presidente del Senado, la senadora Mariana y otros que nos acompañaron el 6 de diciembre, en ese día histórico donde logramos ganar la Asamblea Nacional; y el 5 de enero, cuando ya inició esta nueva Asamblea Nacional con el presidente Henry Ramos Allup.
Pero quiero decirles lo que significa la libertad de Leopoldo López, y la palabra libertad para Venezuela hoy. Quiero decirles que Leopoldo es un buen hombre, es un buen hijo, es un buen esposo, es el mejor papá del mundo; es un servidor público, fue alcalde de Chacao, hizo dos gestiones con plena transparencia internacional, dejó las mejores obras que tenemos hoy en la capital venezolana, Caracas.
Leopoldo en el 2008 lo inhabilitaron; fue a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, él contra el Estado venezolano. Ganó el caso y el Estado venezolano no acató la instancia internacional de la Corte Interamericana.
Leopoldo siguió trabajando por Venezuela y recorrió el país por siete años, siete años recorriendo el país haciendo redes populares, bases populares, recorriendo, llevando esperanza a cada pueblo de Venezuela y conformó el movimiento que hoy es partido político Voluntad Popular.
En el año 2014, ya la crisis de Venezuela era muy profunda. Crisis económica, crisis política, crisis social, y se veía venir una crisis humanitaria.
Leopoldo, firme y claro, como líder político planteó el cambio del gobierno de forma constitucional. Eso fue en enero del año 2014. Leopoldo dijo: “Esto es un gobierno antidemocrático, corrupto e ineficiente”. Y por esas palabras que él pronunció, por decir lo que sentía y lo que todos los venezolanos en ese momento sentíamos, lo metieron preso. Le armaron todo un juicio falso donde no hay ni una prueba ni un testigo en su contra y lo condenaron a 14 años.
Leopoldo dio la cara. Leopoldo dijo: “No me voy a ir del país”.
Diosdado Cabello fue a nuestra casa dos madrugadas a convencernos que nos fuéramos del país, y Leopoldo dijo: “No, nunca me voy a ir de Venezuela. Vamos a lograr el cambio profundo político de forma constitucional, pacífica y electoral”. Desde ese momento Leopoldo está preso en una cárcel militar.
La orden que le dan a Leopoldo es no mirar a los ojos a nadie, no hablar con nadie.
Ha pasado por requisas violentas. Le roban sus escritos; le roban sus documentos de la defensa; le rompen las fotos de nuestros hijos. Lo tienen en una celda sin luz y hemos pedido durante cuatro meses una lamparita para que él pueda leer de noche y no le dan la lamparita.
Nos encierran. Ahora nos dividen en la visita; lo meten a él en un espacio con mis hijos, con Manuela que tiene seis años y Leopoldo que tiene tres, y a mí me dejan apartada y no me dejan estar con ellos. Nos encierran con candados.
Nos privan de libertad también a nosotras las familias. En las requisas nos humillan: nos hacen quitarnos la ropa, desnudarnos completamente a mí y a mi suegra, la mamá de Leopoldo, delante de nuestros hijos.
¿Y saben qué? Lo hemos hecho y lo volveríamos a hacer mil veces, porque nos pueden quitar la ropa, nos pueden quitar los medios, pero nunca nos van a quitar la razón de la lucha, la verdad, los testimonios y la fuerza de la fe que sentimos para lograr el cambio en Venezuela.
Estamos resistiendo. Leopoldo lo dijo: “El que se cansa, pierde”.
Una resistencia pacífica, una resistencia basada en la fe.
Muchos me preguntan que cómo estamos, y yo les digo: Me siento en paz porque Leopoldo está en paz.
¿Me siento perseguida? Sí, me siento perseguida por el régimen. Pero a ellos les digo: Vamos a dialogar, caminemos juntos agarrados de las manos. Hablemos de la visión del futuro de nuestro país; busquemos la solución a los problemas de los venezolanos y la liberación de los presos políticos.
No esperemos unas semanas para que se dé la Ley de Amnistía; sabemos que son inocentes, libérenlos, los deberían liberar. El alcalde metropolitano Antonio Ledezma está preso; el alcalde Daniel Ceballos, alcalde de San Cristóbal está preso; nuestros jóvenes, héroes de la democracia, están presos, pero están firmes y saben que viene el día de la libertad.
Esa amnistía ya entró al Parlamento, es la ley de Amnistía, va a irse a discusión las próximas semanas y se va a aprobar y se tiene que aprobar.
Yo les pido al Senado de México y al Senado de la región y del mundo que estén muy atentos a la Ley de Amnistía, la Ley de la Amnistía y de la Reconciliación Nacional.

Eso es lo que nosotros queremos en Venezuela: reconciliación nacional. Queremos cambiar la injusticia por la justicia; queremos rescatar nuestras instituciones; queremos autonomía de los poderes públicos.
Y les digo algo, hermanos, mexicanos, senadores, lo vamos a lograr. Ya el cambio inició con el voto popular el 6 de diciembre y lo vamos a lograr. Tenemos la fuerza, tenemos la fe, tenemos la resistencia y tenemos lo más grande que puede tener un ser humano y ustedes lo saben, el amor; cuando lucha por amor nadie nos para. Cuando una lucha por una causa tan noble como es la libertad de un pueblo, nadie nos para.
Y termino con esto: ¿qué significa la libertad? Cuando nosotros pedimos la libertad, no estamos pidiendo la libertad de Leopoldo López sólo, no; la libertad es la libertad de un venezolano que pueda salir caminando sin miedo a que te maten, te roben o te secuestren; es la libertad de una madre que pueda ir a buscar un medicamento para curar a su hijo y lo consiga, no que se le muera su bebé porque no hay medicina.
Es la libertad de ir a un automercado, de una farmacia, de lograr comprar la canasta básica y que te alcance. Hoy la canasta básica cuesta 139 dólares y el 86 por ciento de los venezolanos ganan menos, el ingreso familiar es menos de 35 dólares.

Hay hambre en mi país, hay escasez, hay inflación, hay inseguridad, hay hoy, en las colas, golpes y empujones por un kilo de arroz o un pedazo de pollo. Eso está pasando en este momento en mi país.
Eso que dijo Leopoldo de que es un gobierno antidemocrático, corrupto, ineficiente y que estamos en una crisis profundad, ya llegó lamentablemente a la crisis humanitaria.
Y por eso hemos recorrido el mundo, porque el país no puede salir solo de esta crisis, necesita de la ayuda de los países de la región y por eso agradecemos enormemente esta invitación del poder hablar aquí, presidente del Senado de México.
No se imaginan lo que significa para los venezolanos. Por ahí hay una venezolana que al vernos lloramos automáticamente de la emoción que sentimos, porque ha sido una lucha muy fuerte y muy larga, pero vale la pena, lo vamos a lograr.
El encarcelamiento de nuestros héroes, de Leopoldo, valió la pena para despertar de un pueblo y ese despertar lo estamos sintiendo y lo vamos a seguir viviendo en paz y en democracia.

Muchísimas gracias por escucharnos, por escuchar la voz de los perseguidos, de los encarcelados, de los torturados, de los familiares de los presos políticos y las víctimas de la represión.
Cuenten con nosotros, somos hermanos de la región, estamos en el año de la misericordia, del jubileo, estamos en el año de la libertad.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias a Lilian Tintori por sus palabras.
Siempre una mujer valiente, entrona y que sin duda nos sensibiliza con la causa, a favor de la causa a todos nosotros.
Quiero compartirte que en este encuentro hay senadores de todos los partidos políticos.
Hay senadores del PAN, del PRI, del PRD, de Morena, del Verde Ecologista. Todos muy interesados en poder escuchar tu testimonio.
Y quiero agradecer también muy en especial a Gustavo Tovar, como Lilian ya lo hizo hace un momento; a Farid Acevedo, también, y Carlos Páez, quienes han estado muy atentos a la causa y además como venezolanos en México han sido también muy activos, hay jugado un papel muy activo.
Ahora abriríamos un espacio para poder tener un diálogo rico entre nosotros.
Quienes quieran hacer uso de la palabra favor de manifestarlo.
Senadora Gabriela Cuevas.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRÓN: Muchas gracias senadora Gómez del Campo.
Presidente Roberto Gil.
Lilian; Antonieta:
Bienvenidas a este Senado de la República, que como bien se comentaba, las voces de ustedes han logrado reunir aquí a todas las fuerzas políticas.
Y aunque nos reunimos todos los días, coincidencias como estas no se ven de manera tan cotidiana.
Así que claramente la lucha por las libertades, por los derechos y por supuesto por la libertad de los presos políticos, es algo que en México nos importa, que compartimos y que nos solidarizamos.
Imaginarnos nosotros quienes nos dedicamos a la política que un día por decir lo que pensamos, cómo nos sentimos, podamos estar lejos de nuestra familia, en la cárcel, y que nuestras familias pasen la situación que tú has descrito creo que por supuesto nos llega mucho al corazón.
Sabemos también la situación que vive Venezuela, que no es fácil. Cuando vemos, por ejemplo, las listas en materia de criminalidad en el mundo y ver que quitando a los países que se encuentran en guerra, Caracas es la ciudad más peligrosa del mundo, es algo que quienes en algún momento vimos a la Venezuela democrática, nos cuesta hasta trabajo entenderlo.
Por otro lado también vemos esta parte económica que comentas, cómo un país tan rico en recursos, tan rico en petróleo, al mismo tiempo es un país incapaz de darle de comer a su propia gente.
Y eso nos hace cuestionarnos por supuesto dónde debe estar nuestra solidaridad, dónde debe estar el corazón de México.
Y me da mucho gusto por eso que estén aquí en el Senado de la República.
El Senado de la República tiene, entre otras facultades, ver por la política exterior de nuestro país.
A nosotros nos toca analizar la política exterior y uno de nuestros principios muy importantes es la promoción y la defensa de los derechos humanos.
México no puede ser ajeno a la promoción y a la defensa de los derechos humanos, no sólo al interior de nuestra fronteras sino en cada ser humano que ve amenazados sus derechos y por supuesto sus libertades.
Yo creo que aquí hay que aprovechar esta oportunidad que estamos senadores y senadoras de todos los partidos políticos, para que también pudieras platicarnos, Lilian, qué podemos nosotros hacer en esta crisis humanitaria de Venezuela, más allá de las coyunturas políticas que ustedes claramente demostraron, resultados impresionantes y que abrieron los ojos del mundo, en la parte humana, para aliviar ese sufrimiento, cómo puede ayudar México, qué manos necesitan, de qué manera podemos estar más cerca.
Y, por otro lado, también me parece muy importante cómo podemos nosotros sumarnos a este tipo de esfuerzos legislativos como la Ley de Amnistía.
No sé si pueda existir el intento de vetarla, que pudieras platicarnos un poco cuál es el proceso legislativo en Venezuela y cómo desde otras latitudes podemos apoyar que los presos políticos puedan estar en libertad y cómo, sin duda, apoyar a que todos los venezolanos vuelvan a vivir esa Venezuela próspera, democrática, el hogar de todos los venezolanos al que, como bien dijiste, muchos hasta quisieran regresar.
Bienvenidas.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, senadora.
Pasaríamos con el senador Javier Lozano. Adelante.
SENADOR JAVIER LOZANO ALARCÓN: Gracias. Yo seré muy breve.
Lilian, para expresarte todo nuestro respeto, cariño, admiración por esta lucha que estás emprendiendo como venezolana, como esposa, como madre de familia. Eres todo un ejemplo a seguir.
Lo vemos a la distancia, quisiéramos estar más cerca, queremos estar más cerca, queremos ayudar, a ti y a todo el pueblo de Venezuela; porque su causa es una causa que nosotros compartimos por el respeto a los derechos humanos y a las libertades.
Me alegro de ver a todos mis compañeros de los distintos partidos políticos, unidos –como dice Gaby, como dijo Mariana– precisamente en esta defensa de las causas que nos identifican, como países hermanos.
Y también quiero celebrar que finalmente la Cancillería mexicana ayer haya tenido ya una expresión de esta recepción a ustedes, a usted señora, y que finalmente hayamos levantado la voz. Lamento y repudio la reacción de la Cancillería venezolana, habla de una brutal intolerancia hacia lo que fue un gesto que me parece que es el adecuado por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México.
Pero por favor, no se sientan solas. Yo aplaudo también que su lucha sea una lucha institucional, basada en el diálogo y el respeto a las leyes; eso habla muy bien de ustedes y le deseo a la nueva Asamblea Nacional todo el éxito que merecen y a ti, que tus hijos sigan tu ejemplo toda la vida.
Felicidades.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, senador Lozano.
Pasaríamos con la intervención de la senadora María del Rocío Pineda Gochi. Adelante.
SENADORA MARÍA DEL ROCÍO PINEDA GOCHI: Muchas gracias, senadora.
Lilian, bienvenida al Senado de la República. Señora Mendoza, igual. Qué bueno que están aquí.
Y decirles a ustedes que en primer lugar, la democracia se nutre de la pluralidad y en este sentido México ha sido respetuoso y ha sido congruente de lo que el pueblo venezolano y nosotros nos hemos pronunciado en foros internacionales: Con un respeto a los derechos humanos, un respeto a la pluralidad, un respeto a la democracia.
Y nosotros hacemos votos porque esa madurez política que el Gobierno hizo cuando reconoce un triunfo total de oposición, pues sea congruente en su actuar y continúe con ello.
Indudablemente que nosotros seremos solidarios y creemos en que ante todo el respeto a los derechos humanos y el apego a las instituciones y a las leyes debe ir para hacer que la justicia prevalezca en todos los ámbitos. Y en ese sentido, nosotros estaremos pendientes de todo este proceso y que nos unimos a que esto tenga un camino de justicia y sobre todo que el ser humano esté en el centro de cualquier decisión que se tome.
Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, senadora.
Senadora Lisbeth Hernández. Adelante.
SENADORA LISBETH HERNÁNDEZ LECONA: Gracias, presidenta.
Me uno a la bienvenida que se les da, Lilian, la señora Mendoza. Estuvimos con ustedes ayer en Cancillería y podemos ver su entusiasmo, podemos ver cuál ha sido la forma de hacer política sin violencia.
Así que nos unimos a contribuir en esta reconciliación y el respeto a los derechos humanos de todos los países. Y sobre todo, entendemos como mujeres lo difícil que ha sido esta lucha, pero lo han hecho a través de la paciencia, del amor, de la fe y la esperanza.
Así que nos gustaría conformar incluso un grupo de amistad parlamentaria, que pudiéramos hacer para generar este vínculo y poder seguir trazando el apoyo solidario, como lo hemos estado haciendo incluso desde el Parlamento Latinoamericano.
Así que sean ustedes bienvenidas y estamos con ustedes.
Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, senadora.
Senador Gerardo Flores, adelante.
SENADOR JUAN GERARDO FLORES RAMÍREZ: Muchas gracias, senadora.
Al igual que mis compañeras y compañeros que me han antecedido en el uso de la palabra, yo les doy la bienvenida al Senado de la República a ti Lilian y a usted señora Antonieta Mendoza.
En primer lugar, quiero también externar mi admiración y mi reconocimiento por esta lucha pacífica que encabezan para lograr, como ya se dijo, la reconciliación del pueblo venezolano.
De la misma forma también repudio y no puedo aceptar el pronunciamiento de la cancillería del gobierno venezolano por el solo hecho de que la Canciller de nuestro país le recibió el día de ayer. Me parece que es un acto que demuestra la pequeñez del gobierno de Venezuela hoy en día, y por lo mismo es inaceptable en un mundo como en el que hoy vivimos.
Celebro también el entusiasmo del pueblo venezolano que se tradujo en una configuración de la Asamblea de Venezuela que estoy seguro que dará lugar a una reconstrucción democrática de ese país.
Y celebro que ustedes reiteren de manera, que siempre reiteren esta lucha pacífica y que, como bien decías hoy en una entrevista, me parece que queda acreditado este consejo o este pronunciamiento de tu esposo que dice: “El que se cansa, pierde”.
Me parece que ustedes han hecho un elogio de esa máxima, porque han llegado a unos niveles de paciencia que me parece que debemos todos reconocer, aprender de ello. Y yo estoy seguro que esta lucha que ustedes han encabezado se traducirá en una Venezuela con bienestar, porque es inaceptable que el pueblo de Venezuela tenga que hacer filas para obtener sus alimentos, que tenga que hacer filas para obtener sus medicinas. Creo que eso no puede ser y el pueblo venezolano propio debe de darse la solución y creo que muy pronto lo lograrán.
Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, senador.
Senador Francisco Búrquez, adelante.
SENADOR FRANCISCO BÚRQUEZ VALENZUELA: Bienvenidas y bienvenidos.
Yo celebro que estemos hoy aquí por la oportunidad, no solamente por la oportunidad de mostrarles y brindarles nuestra solidaridad al pueblo de Venezuela; también por ejemplo que puede significar para muchos países de Latinoamérica, entre los cuales nos contamos.
Cuando la democracia solamente sirve a la clase política, cuando los partidos, los legisladores y los gobiernos estamos tan desprestigiados que nos peleamos por el último lugar contra los policías, a ver quién está más desprestigiado.
Pues estos procesos y estas violaciones a la libertad inician desde mucho antes en pequeñas acciones de gobierno que parecieran no tan significativas, pero que significan violaciones a la libertad y a los derechos individuales de las personas en forma de regulaciones. Hasta para hacer algo bueno, positivo, necesitas pedir permiso al gobierno.
Y ahí están esas semillas sembradas, impuestos confiscatorios que te quitan el fruto de tu trabajo, la corrupción, el despilfarro.
Que sirva esta visita también para recordarnos a nosotros que tenemos que evitar ese camino.
Y cuenten con el Senado y cuenten, aquí están representados todos los grupos políticos, y cuenten con México.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Gracias, senador.
Senadora Angélica de la Peña, adelante.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Gracias, senadora.
Bueno, pues, Lilian, bienvenida a México y a quienes le acompañan igual.
Para nosotros es importante en el Senado de la República se han manifestado diferentes preocupaciones en el sentido de que tomar en consideración lo que desde la Organización de Estados Americanos ha planteado respecto a Venezuela como este clima que se padece no ayuda a lograr una democracia y un tránsito político con tranquilidad, con la paz que queremos para todos nuestros pueblos.
Y en ese sentido no repito las palabras del presidente de la OEA, Almagro, pero sin desperdicio llamando la atención respecto de desear que Venezuela transite por este camino pacificador como algo fundamental para la región.
Ciertamente Venezuela y México están muy unidos, tenemos una relación de mucho tiempo, estamos muy hermanados igual que otros países latinoamericanos, somos una misma región, por cierto, no saber que estamos unidos por el idioma, por nuestros orígenes, sino porque hemos compartido muchas situaciones de solidaridad.
Y hoy me parece que el haber logrado en una elección constitucional, el pueblo venezolano haber decidido lo que decidió, permite transitar ene se camino al que tenemos que seguir pugnando, en cumplimiento, ni más ni menos, con el artículo 2 del Pacto sobre Derechos Civiles y Políticos de naciones Unidas, nos parece que es importante destacarlo y en ese sentido creo que hay fundamentos, desde el derecho internacional de los derechos humanos, para insistir cualquier signo que pueda caracterizar a un país, no permitir ni hacer concesiones respecto al no cumplimiento de estas obligaciones con derecho internacional.

De tal manera que esa sería la opinión personal que yo doy en esta reunión y por supuesto estamos atentos y atentas a lo que acontezca en Venezuela y por supuesto deseando lo mejor para su país.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchísimas gracias senadora Angélica de la Peña.
Senador Mario Delgado, adelante.
SENADOR MARIO DELGADO CARRILLO: Muchas gracias, bienvenida señora Lilian Tintori, señora Antonieta Mendoza.
Este es un país que en 2011 decidió reformar la Constitución para que el paradigma de los derechos humanos nos rigiera y eso quiere decir que en la Constitución tenemos la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos y para que esta obligación se preserve, los derechos humanos se deben de ver a través del principio de universalidad.
Esto quiere decir, el principio de universalidad, que los derechos humanos son inherentes a todas las personas en todos los lugares; todos los derechos, todas las personas, en todo lugar.
Estamos aprendiendo a vivir ahora con ese paradigma, pero tenemos graves omisiones. Somos un país que vive una crisis de derechos humanos, somos un país de víctimas y de desaparecidos, que lo mismo se construyen verdades históricas, que se ordenan abatimientos de supuestos delincuentes de manera sumaria, que se cierran los ojos ante las violaciones graves de derechos humanos en Venezuela.

Me parece que el gobierno mexicano debería ir un poco más allá, qué bueno que se dio ayer la reunión en la Cancillería, es un gesto muy importante, es una mujer sensible también la Canciller.
Pero creo que el gobierno mexicano debería denunciar, como lo han hecho organismos internacionales, no es algo fuera de lugar, como la ONU, la OEA, Amnistía Internacional, lo que pasa en Venezuela; existencia de claras violaciones a los derechos humanos, de presos políticos.
Aquí en México también creo que debe sacarse el tema de Venezuela como un asunto de izquierdas y derechas, porque muy fácilmente se encasilla si estás a favor o no, si estás apoyando a un gobierno o no.
Me parece que puede haber diferencias en las políticas públicas, puede haber incluso muchas coincidencias con algunas políticas que se hayan hecho en Venezuela y otras no.
Pero debería haber un compromiso único con el respeto a los derechos humanos.
Ahí debe ser condenable que haya presos políticos en cualquier lugar del mundo.
Me gusta mucho, señora Lilian, escuchar su mensaje, que en medio de tanto sufrimiento usted hable de amor, de reconciliación; que hable de futuro.
Me parece que tienen muy claro, y lo hacen desde el corazón, la batalla que ustedes están dando.
Sigan así. Creo que van a triunfar porque si luchan por el amor son invencibles.
Y seguramente los miedos están en otro lado y aumentará el nivel de presión, el nivel de abusos, el nivel de violencia.
Pero mientras más obscura parezca la situación, más fuerte será el brillo de la libertad.
Bienvenida.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias senador.
Ahora toca el turno a la senadora Lucero Saldaña.
SENADORA LUCERO SALDAÑA: Muchas gracias senadora Mariana Gómez del Campo, Presidenta de la Comisión de América Latina.
Presidente de la Mesa Directiva, quien nos hace la convocatoria a esta reunión de trabajo.
Sea bienvenida al Senado de la República, Lilian Tintori y Antonieta Mendoza.
Compañeras.
Compañeros senadores:
Lo que se ha expresado aquí es parte de procesos democráticos que tenemos constantemente:
El derecho a escucha, el derecho poder tener un diálogo, el conocer los intereses es muestra de que el Senado no está cerrado y que nuestro país también está aprendiendo de estos procesos democráticos.
Esperamos de Venezuela también esa madurez democrática, de reconocer los resultados y de avanzar en las diferencias acuerdos.
Este Senado ha sido ejemplo de hacer más de 13 Reformas Estructurales en las diferencias y que a pesar de todo el contexto internacional nuestro país tiene una solidez y una seguridad de rumbo.
Creemos que el llamado de México no significa una intromisión, sino es congruente a los Tratados Internacionales que hemos firmado y asignado.
Sí tenemos el principio de los derechos humanos y también respetamos el principio de la soberanía de cada país.
Nuestros mejores deseos para que el pueblo venezolano no sea la víctima de esta transición, de estos movimientos, que sean preservados precisamente el diálogo y la concertacesión.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias senadora.
Senadora Angélica Araujo. Adelante.
SENADORA ANGÉLICA ARAUJO: Gracias senadora Mariana.
Presidente de la Mesa, muchas gracias.
Lilian, y por supuesto a doña Antonieta:
Bienvenidas al Senado.
Voy a hacer dos comentarios:
Uno, poniéndome en la posición de ustedes. Como madres, como mujeres, somos senadores aquí, pero ante todo somos mujeres, madres de familia, muchas jefas de familia.
Y por eso quisiera dividir mi comentario en dos partes:
Primero, no puedo desligar lo que siento como mujer, como madre, como alguien que ha visitado su país y lo difícil y doloroso que es por supuesto, escuchar sus mensajes, escuchar lo que ustedes están viviendo; y por eso mi primer mensaje es de verdad, que ustedes nos ayuden a llevarle a todo el pueblo de Venezuela, a todas las mujeres, a todos los hombres, un mensaje de paz, un mensaje de verdad de –lo decían hace un momento– futuro, un mensaje de solidaridad de este pueblo mexicano.
Gracias por confiar en nosotros como país para venir a expresarse tan abiertamente, con todo el corazón y de una manera tan directa y natural.
Y dos, hoy tenemos la dicha, todos los que estamos aquí, de ser senadores; entonces ustedes están hoy por supuesto en una de las máximas tribunas de nuestro país, ante el presidente, ante diferentes compañeros de partidos políticos que lo que más resalto es que estamos en un país de libertades.
Como ustedes podrán haber escuchado, las diferentes opiniones de diferentes grupos políticos aquí en México; quienes somos coincidentes del partido del Presidente en el poder, permitimos y nos gratificamos y nos congratulamos de que en el Senado –lo decía hace un momento Lucero– cada uno de nosotros se pueda expresar libremente; y en esa libertad hemos logrado construir consensos.
Entonces están ustedes en un país que afortunadamente goza hoy de pasos agigantados en democracia. Están ustedes en un país que hoy, pese a las adversidades económicas que tiene este mundo, estamos saliendo adelante, que tenemos mucho por hacer, por supuesto; pero que lo queremos hacer junto con nuestros hermanos de América Latina y junto con nuestros hermanos de todo el mundo.
Entonces, lo que le quiero decir a ustedes es que como senadores, como senadoras, ustedes tienen el consenso de todos los grupos políticos y sobre todo van a tener por supuesto aliados vigilando; que así como nosotros respetamos una Constitución garantista en materia de derechos humanos, por supuesto también hemos firmado pactos y tratados internacionales para garantizar los derechos humanos desde el punto de vista de las organizaciones internacionales.
Entonces tendrán, lo ratifico, el respaldo de todos los grupos parlamentarios, por lo que aquí veo, y de este Senado, para garantizar que en Venezuela por supuesto también prevalezcan los derechos humanos.
Sean bienvenidas a este Senado, esta es su casa.
Muchas gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias.
¿Algún otro compañero, compañera?
Senador Raúl Morón. Adelante.
SENADOR RAÚL MORÓN OROZCO: Gracias, presidenta. Presidente.
Bienvenidas al Senado de la República señora Antonieta, señora Lilian. La verdad es importante escuchar lo que ustedes nos han planteado el día de hoy, el proceso que se está viviendo en Venezuela.
Desde acá igual, vemos con preocupación las luchas por la libertad, la lucha por la democracia. En Latinoamérica ha sido un proceso permanente, un proceso que lleva muchos años y encontrar la mejor manera de que los pueblos puedan resolver los problemas de vida que tienen de sus habitantes, es algo que nos motiva a todos los que aquí estamos presentes.
En ningún país se justifica, de ninguna manera, que se violenten los derechos humanos. En ningún país del mundo se justifica que por expresar libremente sus ideas sean reprimidos con cárcel, sean encarcelados; porque creo que eso no puede darse a estas alturas del desarrollo de la civilización.
Nuestra solidaridad, pues, para con el pueblo de Venezuela. Igual que todos mis compañeros, espero que puedan encontrar con la paz, con el respeto a las leyes, con nuestra solidaridad también, formas de arribar a que en Venezuela pueda haber progreso, pueda haber tranquilidad, pueda haber serenidad y puedan resolver los problemas en los que están inmersos.
Ojalá que pronto puedan encontrar respuesta a esto que ustedes están planteando y que están llevando a varios países, y ojalá que pronto el pueblo de Venezuela y los pueblos latinoamericanos, también encuentren solución a sus grandes problemas.
Como aquí se ha dicho, hay problemas en Brasil, hay problemas en Argentina, tenemos problemas en México; y estamos haciendo esfuerzos para que estas visiones plurales puedan fortalecernos y encontrar solución a los mismos.
Esperamos que en Venezuela también encuentre esta posibilidad.
Bienvenidas al Senado de la República.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, senador.
Antes de cederle el uso de la palabra a Lilian y también a Antonieta, que quiere hacer uso de la misma, quiero compartirles para que ustedes tengan conocimiento, que este Senado de la República como tal, hemos estado a lo largo de esta Legislatura, primero tuvimos diversos encuentros con legisladores venezolanos en su momento. Con María Corina Machado, con Julio Borges, con Julio Montoya, entre otros.
Escuchamos aquí de viva voz, fue de las primeras veces que se escuchaba con mucha fuerza en el Senado cuál era la situación de Venezuela.
También realizamos una serie de conferencias que nuestro amigo Gustavo Tobar nos ayudó para que tuviera mucha fuerza. No nada más lo hicimos dentro del Senado de la República sino que acudimos a diferentes universidades tituladas “Voces de Venezuela”. Analizamos la situación de derechos humanos, el papel del Poder Legislativo, así como el diálogo también entre la oposición.
Señalamos en tribuna la importancia de las misiones de observación electoral para garantizar una jornada libre y transparente en Venezuela. De esta forma también logramos que diferentes legisladores, tanto de Cámara de Diputados como de este Senado de la República pudiesen ser parte de una delegación plural e incluyente.
Durante una reunión de trabajo con el doctor Luis Almagro, Secretario General de la OEA hablamos de la importancia de darle seguimiento puntual a las elecciones parlamentarias.
Durante la comparecencia en 2015 de la canciller en este Senado de la República le externamos también nuestra exigencia de que el gobierno federal se pronunciara con fuerza sobre Venezuela.
Hoy, afortunadamente ya hay un pronunciamiento, se dio hace unos meses, pero con la venida de ustedes se dio este pronunciamiento, insisto, con mucha fuerza.
A mí lo que sí me gustaría es que por parte del gobierno federal se diese un pronunciamiento oficial concretamente sobre las detenciones arbitrarias que se viven en Venezuela.
Ojo. Muchos de los jóvenes que están hoy en la cárcel solamente están en la cárcel por haber posteado algún mensaje vía redes sociales en contra del régimen.
Senadores de la República firmamos una carta dirigida al presidente Peña Nieto en la que lo exhortábamos a pronunciarse por la violación de los derechos humanos en Venezuela, así como también exigíamos que se abordara el tema en los organismos regionales multilaterales a fin de encontrar soluciones pacíficas.
Desde el Parlamento Latinoamericano y Caribeño firmamos un acuerdo en el que condenamos los actos de violencia en la campaña electoral e hicimos un llamado a las autoridades gubernamentales y electorales para asegurar un proceso libre.
Hace unas semanas legisladores de diferentes partidos también nos pronunciamos en contra del hostigamiento que vivió Lilian y Antonieta en la Prisión Militar de Ramo Verde, y exigimos que los derechos humanos de los presos políticos fuesen respetados.
Nos sumamos a la campaña “Libertad antes de navidad para la libertad de los presos políticos” en busca de que, bueno, antes de navidad pudiesen estar cerca de sus seres queridos.
A este pronunciamiento se sumaron todas las fuerzas políticas también.
Nos hemos pronunciado con ciudadanos venezolanos dándole la voz a los que no la tienen e incluso hemos pedido al gobierno federal impulsar la suspensión de Venezuela del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas hasta que se garanticen las libertades fundamentales en el territorio venezolano
Hemos presentado 16 puntos de acuerdo de diversas materias, relativos al tema Venezuela. Insisto, exhortando al gobierno a asumir un papel más proactivo y protagónico en el tema.
Estos son algunos de los puntos que hemos impulsado desde este Senado de la República.
Me parece importante que ustedes tengan la película completa de todo lo que hemos hecho aquí, porque desde mi particular punto de vista y creo que hablaría también por algunos de mis compañeros, donde más se ha escuchado lo que ocurre en Venezuela es en el Senado de la República.
Habiendo muchos otros espacios, pues no se le ha dado la fuerza, la importancia y por eso es tan valioso que dos mujeres como ustedes nos puedan dar aquí su testimonio y yo espero que lo puedan hacer también en América latina, en muchos de los países de América Latina.

Ha habido pronunciamientos muy aislados y creo que a favor de los derechos humanos, de la democracia y de las libertades, pues todos debiéramos estarnos pronunciando.
Obviamente estamos muy conscientes de lo que pasa en nuestro país, también hay violación de los derechos humanos en México, no dejamos de señalar lo que ocurre a nivel nacional, pero tampoco dejaremos de señalar ya demás somos los encargados de la política exterior, no dejaremos de señalar lo que ocurre en un país hermano como Venezuela.
Ahora cedería el uso de la palabra a la señora Antonieta Mendoza de López.
Adelante.
SEÑORA ANTONIETA MENDOZA DE LÓPEZ: Gracias.

Presidente Roberto Gil; gracias querida Mariana, que ya yo la adopté como hija, me la voy a llevar a Venezuela.
Yo no pensaba participar, no pensaba intervenir, primero porque estoy muy emocionada, me cuesta hablar. A mí me preguntaba una persona hoy, cómo no lloran ustedes, ustedes no lloran, ustedes son demasiado fuertes.
Y le dije, pero nos han tocado la fibra más débil, pero Lilian y en su intervención compartió con esta audiencia tan calificada la situación de Venezuela, la situación de la crisis humanitaria que no es que esté en puerta, la tenemos instalada, la situación de los presos políticos, la situación de mi hijo Leopoldo, de su esposa de Leopoldo y yo ya consideraba que era suficiente.

Pero viendo y escuchando todas y cada una de estas intervenciones, que están llenas de principios libertarios, principios demócratas, principios de libertad, que tenemos tanto tiempo nosotros en nuestro país que no escuchamos, dije, yo tengo que agradecer.
Nosotros, Lilian y yo, entramos en la Asamblea Nacional, el presidente Roberto Gil nos estaba acompañando, el día 5 de enero nosotros teníamos 17 años que no entrábamos en el Parlamento. El Parlamento estaba vetado para toda aquella persona, ciudadano venezolano, la casa del pueblo estaba vetada para todos aquellos que no pensaban como el gobierno.
Caminamos por los salones de la Asamblea Nacional, el Salón Elíptico, el Salón Francisco de Miranda, es un edificio precioso, usted lo vio presidente y yo sentí una emoción tan grande, yo decía: el cambio empezó.
El oxígeno y la luz se sienten en este país; la lucha es fuerte, pero lo que yo les quería compartir cuando los escuchaba era que yo no hacía sino pensar en Leopoldo. Leopoldo no se imagina, allá donde está, aislado, todo el apoyo que su grito de libertad generó ene l mundo entero.
Nosotros se lo tratamos de explicar, pero él no tiene acceso a los medios, él no tiene acceso a la televisión, él no tiene acceso a medios internacionales y claro, lo que es el cuento, el relato se agota.
Nosotros podemos contarle muy descriptivamente todos estos apoyos, las sesiones que hemos participado, pero cuando yo veía que estaban representadas todas las fracciones, con un consenso, un consenso por la libertad.
Igual nos pasó en España. “El País”, de España, sacó un editorial que decía: “primera vez que el PP y el PSOE se ponen de acuerdo en algo, y es por Venezuela y es por la libertad.
Y fue Leopoldo, el 18 de febrero, dos años la semana que viene, cuando se entregó.
Y sí dijo él, que lo repito y lo repito. Dijo: “Si mi entrega ayuda para el despertar de un pueblo, bien valdrá la pena”.
Y el pueblo venezolano despertó. Pero la comunidad internacional despertó. Nosotros hemos tenido dos años de este peregrinaje pero hoy por hoy, como decíamos esta mañana, nos sentimos en paz porque hemos tenido la responsabilidad como venezolana, como mujeres venezolanas de llevar la voz del silencio a las fronteras y que el mundo entero, la comunidad, se entere que nosotros estamos en un gobierno totalitario.
Esto tiene que cambiar y esa nueva Asamblea Legislativa nos va a dar la oportunidad; y la Ley de Amnistía es la llave que va a abrir ese primer candado que va a sacar a todos nuestros presos políticos.
Gracias México.
Gracias senadores.
Verdaderamente me siento; no me había emocionado nunca. Me emocioné el día que estaba con Lilian reseñando esa vejación tan tremenda que nos hicieron.
Y me emocioné hoy. Eso quiere decir que los siento a todos muy cercanos a mi corazón.
Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias Antonieta.
Y ahora cedo el uso de la palabra a Lilian Tintori.
Adelante.
SEÑORA LILIAN TINTORI: Bueno mujer, sí puedo Antonieta. No me gusta verte así.
Ella nos da fuerza a todos. Ella.
Quiero ir uno por uno para un poco responder las preguntas que salieron en este diálogo.
Gracias senadora Gabriela Cuevas, Presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores.
Ella preguntaba cómo nos pueden ayudar con la crisis humanitaria:
Nosotros hemos pedido a nivel internacional y en la comunidad internacional que estén muy cerca de lo que está pasando en Venezuela.
Que estén pendientes, que sigan muy de cerca el día a día de lo que nosotros estamos viviendo.
Pero por supuesto que la forma más rápida de hacer esto es algo que ya hicieron.
Ustedes invitaron ya al Presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, aquí al Senado.
Eso es una gran ayuda, una gran oportunidad porque definitivamente nuestro Parlamento está lleno de diputados comprometidos con un Presidente nuevo, comprometido, trabajando día a día para buscar soluciones a los problemas, comenzando por la crisis que más nos preocupa, que es la crisis humanitaria.
En segundo lugar, me había preguntado que cómo puede apoyar para la Ley de Amnistía.
Yo quiero decirles lo que significa la Amnistía:
La Amnistía significa el abrazo que se va a dar la familia venezolana.
El abrazo que le va a dar Leopoldo a su mamá cuando salga en libertad, a mis hijos, el abrazo que le va a dar Antonio Ledezma a sus 7 hijos; el abrazo que le va a dar Daniel Ceballos al pueblo de Táchira.
Es el abrazo de la reconciliación nacional, es el abrazo que le va a dar los venezolanos a sus familiares que se quedaron en Venezuela pero que van a volver.
Porque con la Ley de Amnistía y la reconciliación nacional, el ambiente, la política venezolana va a cambiar.
Creo que es muy importante que estén, que sigan las discusiones de la Ley de Amnistía y como institución, que son un ejemplo para nosotros, desde el Parlamento vean todo el desarrollo de estas discusiones y vean ese gran día cuando se va a aprobar, porque yo no tengo duda de que se va a aprobar la Ley de Amnistía y que lo vamos a liberar desde un poder público que rescatamos.
Leopoldo me lo decía el otro día: “yo entré a la cárcel y no había autonomía de los Poderes Públicos. Y a mí me va a sacar un Poder Demócrata. A mí me va a sacar la democracia, con los votos y desde el Parlamento”.
Entonces apóyennos a los venezolanos con la Ley de Amnistía.
Gracias senador Javier Lozano.
Esta lucha es por nuestros hijos. Yo todos los días me levanto y pienso es muy difícil como mamá viajar por el mundo, atender la visita de Leopoldo todos los fines de semana y además seguir trabajando por la lucha de los presos políticos y los derechos humanos.
Pero tengo la esperanza de que mis hijos cuando crezcan van a estar orgullosos de su papá y también de su mamá.
Y también he sentido que algo me puede pasar. Y lo digo en todos los lugares que voy, y lo digo aquí en México porque me siento en confianza:
Si algo me pasa a mí, es responsabilidad directa de Nicolás Maduro, el presidente de Venezuela. Si algo me pasa a mí, mis hijos van a quedar con la herencia de la moral, de la fuerza y de la libertad.
Leopoldo en un juicio dijo: “yo prefiero explicarle a mis hijos porqué estoy preso, que explicarle a mis hijos porqué no tienen país”. Leopoldo dijo esas palabras en el juicio y esas palabras las tomamos como ejemplo y luchamos por nuestros hijos.
Muchos de los líderes de la unidad, en especial mi querido presidente Henry Ramos Allup, a quien admiro, apoyo; siempre me dice que tenga mucho cuidado, que no recorra Venezuela tanto, que no me vaya a las zonas tan peligrosas, porque tengo hijos. Y yo le dijo al presidente Henry Ramos Allup: “presidente, precisamente por eso lo estoy haciendo, por mis hijos, por los hijos de toda Venezuela, por nuestro futuro, por nuestro país, por las familias venezolanas”.
Así que el tema de los hijos para nosotros es un impulso fundamental y veo que aquí todos tienen familia, casi todos tienen tres hijos, dos hijos; eso es lo más bello que alguien puede tener y con los hijos nadie se mete. Con mis hijos se han metido: los graban en la cárcel y los sacan en el canal del Estado, Diosdado Cabello ha utilizado las imágenes de mis hijos, de 6 y 3 años, para hacer política desde el gobierno; y eso lo denuncio y lo hemos denunciado en todas las instancias.
Gracias senadora María del Rocío, gracias por sus palabras.
Gracias senadora Lisbeth Hernández.
Las mujeres, las mujeres. Nos tocó a las mujeres en Venezuela. Quiero desde aquí enviarle un abrazo fuerte a mi hermana, María Corina Machado; quiero decirte María Corina que tu voz no está aquí porque tú también estás presa, porque no te dejan salir del país, pero te estamos representando María Corina. Tú nos abriste un camino internacional inmenso, y ese camino está ahí y te respalda.
Quiero enviarle un mensaje directo a Mitzy Capriles de Ledezma, la esposa de nuestro alcalde metropolitano Antonio Ledezma, que ha recorrido el mundo conmigo. Esta lucha es de Mitzy.
Quiero mandarle un abrazo a mi hermana Patricia de Ceballos, alcaldesa de San Cristóbal, que su esposo está preso en casa por cárcel, injustamente.
Quiero enviarle un saludo a una mujer que nos está dando un ejemplo de lucha, Rosa Orozco. Rosa tenía a su hija de 23 años, su hija estaba protestando con una cacerola en la puerta de su edificio en Valencia, y vino un militar y le disparó a quemarropa, en la cara, y la mató.
Rosa Orozco, después de dos años, todavía está esperando justicia por la muerte de su hija. Y Rosa recorrió conmigo el país durante dos meses, pidiéndole a Venezuela: “perdonemos, Venezuela”. Hay que perdonar a quienes nos han disparado, a quienes nos han encarcelado, a quienes nos persiguen, a quienes nos mandan policías sin placa a perseguirnos, a quienes nos mandan drone a nuestras casas para grabarnos, como me lo hicieron a mí hace tres días en Venezuela.
Vamos a perdonarlos, vamos a buscar soluciones. Es una lucha de mujeres y es un tema muy impresionante, a veces hacemos evento y estamos en la tarima mujeres, porque nuestros esposos o están presos o están en el exilio o están en clandestinidad o están regados por el mundo, como Caros Vecchio, que está en el exilio; segundo a bordo del partido Voluntad Popular, perseguido político: él también está preso porque está fuera de su tierra amada, querida, que es Venezuela.
Gracias al senador Juan Gerardo Flores. Definitivamente esa es la frase y se las dejo aquí para que nos sigan ayudando: “el que se cansa, pierde”.
Gracias al senador Francisco de Paula. Sus palabras nos dan mucha fuerza porque sentimos que esta lucha es tan grande, tan grande, tan grande, que no solamente es para Venezuela, sino para toda la región latinoamericana.
Gracias a la senadora Angélica de la Peña. Ella tocó un punto importantísimo, que yo lo hablé ayer con la Canciller, que es que los países del mundo tienen una gran oportunidad de unirse a los pronunciamientos que ya hemos tenido con respecto a la libertad inmediata de Leopoldo López y de todos los presos políticos en Venezuela.
La ONU se ha pronunciado cinco veces; Grupo de Detenciones Arbitrarias, Comité contra las Torturas, Alto Comisionado de Derechos Humanos, CAT y el Relator contra las Torturas de las Naciones.
Cinco veces se han pronunciado las Naciones Unidas. La ONU ha pedido la libertad; la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha pedido la libertad; la OEA ha pedido la libertad; Amnistía Internacional; Human Rigth Watch y casi todos los senados y cámaras de diputados de Latino América han pedido la libertad de Leopoldo y de los presos políticos. Todos estamos de acuerdo.
No lo digo yo, lo dice la ONU; no lo digo yo, lo dice la OEA; no lo digo yo, lo dice la Comisión.
Y Venezuela viola el artículo 23 de la Constitución Venezolana, que dice que claramente cualquier ente vinculante a nuestro país, como es la ONU, como es la Comisión, tiene que ser acatado inmediatamente. Y violan la Constitución, especialmente en su artículo 23.
Pero es una gran oportunidad, y lo hablé ayer con la Canciller. Ahí está, ahí están los tratados; ahí están los pactos.
¿Para qué los tenemos?
Yo he hecho unas reflexiones durante dos años, y digo: ¿Para qué los tenemos entonces?
Los tenemos entonces para hacerlos cumplir y nos toca a nosotros luchar para que se cumplan.
Y les digo, gracias que los tenemos. Si no es por la ONU, por la Comisión, por la OEA, incluso UNASUR, MERCOSUR, porque sus objetivos son derechos humanos también.
Si nosotros no luchamos para que esas entes importantísimas, a quienes respeto y siempre los nombro, a pesar de que espero por ellos, cuento con ellos y lucharé siempre para que hagan su trabajo con respecto a los derechos humanos.
Pero es un punto importantísimo que ustedes pueden impulsar.
Gracias al senador Mario Delgado, va a brillar la luz, Mario. Va a salir brillante; ese sol va a brillar mucho. Es la luz de la libertad y la vamos a lograr gracias al apoyo de la Comunidad Internacional, gracias a senadores como tú.
Gracias a la senadora Lucero Saldaña Pérez, cuando habla de democracia y cuando habla de no injerencia.
Yo quiero dejar claro aquí que lo que nosotros hemos hecho por el mundo no ha sido injerencia. Lo que hacen los líderes del mundo cuando se pronuncian por Venezuela no es injerencia, porque nuestra lucha es por los derechos. Derechos humanos no tienen fronteras; todos hacen política, todos hacen política, pero el techo, el paraguas, lo que nos cubre son los derechos humanos, y ahí no hay injerencia.
Y tampoco estoy haciendo en México, y lo quiero dejar claro y grabado a los medios de comunicación que no estoy haciendo ninguna campaña en contra de mi país; al contrario, estoy llevando la verdad de lo que está pasando para buscar soluciones con reconciliación, con visión, con respeto a las autoridades de mi país, con respeto siempre.
Y estamos dejando muy en alto el nombre de Venezuela. El nombre de Venezuela lo estamos dejando muy en alto porque hemos llevado al mundo la realidad, y la realidad es que hoy la mayoría de los venezolanos queremos un cambio y lo estamos logrando.
Gracias a la senadora Angélica del Rosario. Cuando habla de madres, de mujeres, yo quería ahí darle la palabra a Antonieta. ¡Qué bueno que la tenemos aquí! Es primera vez que estamos juntas en un Senado las mujeres de Leopoldo.
Como dice Antonieta, ustedes le contarán, esa es la promesa, cuando salga y venga para acá ustedes le contarán todo lo que hicimos por él, todo lo que hicimos por nuestros presos políticos.
Gracias al senador Raúl Morón, cuando habla de la solidaridad. Esa palabra la hemos llevado ante el mundo pidiendo solidaridad y nos ha costado muchísimo pero lo hemos logrado.
Hemos recorrido el mundo. Me sentaba con todos los países del mundo en la embajada de la ONU, en embajadas de Ginebra y Nueva York y nos atendían en principio en cafeterías con música. No nos daban ni siquiera tarjeta de presentación. Les pedía el teléfono y no me lo daban. A veces nos atendían con pena porque éramos de Venezuela.
Y hoy se nos abren las puertas. No a nosotros, no a Antonieta, no a Leopoldo, no: a Venezuela, a los venezolanos, se abrieron las puertas poco a poco, con trabajo, con constancia.
Gracias a la senadora mariana Gómez del Campo, han hecho muchísimo, senadora, muchísimo, han hecho mucho. Felicito al senado mexicano por todo lo que han hecho. Felicito este encuentro y esta reunión con todos los partidos que se unen por los derechos humanos.
Van a ser mejores senadores a partir del día de hoy por ese gran paso de estar todos juntos sentados, unidos en una misma causa y quiero pedirte, Mariana, que sigas haciendo, no ha terminado, nos falta mucho, estamos viviendo la peor crisis de la historia de Venezuela, los momentos más difíciles, más violentos y necesitamos de su ayuda.

Necesitamos que sigan presentes, vigilantes a lo que nosotros estamos viviendo hoy y muchísimas gracias.
Quiero invitar además, una forma de ayudar, que también me lo preguntaste, cómo pueden ayudar más. La semana que viene Leopoldo cumple dos años preso y tenemos tres eventos muy importantes, 18, 19 y 20 de febrero, jueves, viernes y sábado de la semana que viene.
Quiero invitarlos formalmente, en persona., a Venezuela, a caracas, a que nos acompañen a nosotros, la familia de Leopoldo, a vivir estos tres días que van a ser tres días históricos, vamos a ir a la Asamblea Nacional el día 18, vamos a tener un Foro de la Libertad el día 19 y el 20 vamos a tener un evento muy grande, pacífico, todos vestidos de blanco, donde vamos a escuchar música nacional, que nos va a llenar de esperanza para seguir en esta lucha.
Vamos a tener invitados de Venezuela, a cuatro representantes de la lucha democrática Lech Walesa, Oscar Arias, el nieto de Mandela y el hijo de Des Mon Tutu.
Los invitamos a todos a que nos acompañen; al presidente le pido formalmente que haga los esfuerzos para que seleccione uno de cada partido, sería lo ideal y que nos acompañen a vivir este momento tan difícil que son dos años.
No sabemos cuánto tiempo más va a pasar, Leopoldo tampoco, pero sabemos que el día de la libertad va a llegar.

Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias Lilian.
Ahora y para concluir esta reunión le damos el uso de la palabra a nuestro presidente del Senado de la República, el senador Roberto Gil.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Lilian, señora Antonieta Mendoza de López, de nueva cuenta les damos la bienvenida al senado de la República.
Es evidente la enorme importancia de este encuentro, no solamente el Senado de la República sirve de foro para expresar una circunstancia específica, el momento que vive una nación hermana, sino también hemos podido escuchar de primera mano la enorme fuerza inspiradora de una convicción, de un conjunto de principios que ha orientado la lucha de estas dos destacadas mujeres, aguerridas mujeres, que están no solamente defendiendo el caso concreto de su esposo, de su hijo, sino también defendiendo la causa de libertad de una nación entera.
La solidaridad que puede expresar una institución como la nuestra, no es recurso o pretexto para esconder nuestros propios problemas ni para hacerlos menores, sino la oportunidad de reconocerlos en los problemas y las angustias de otros y esa es la expresión básica de la solidaridad.
No significa, bajo ninguna circunstancia, que olvidemos lo que tenemos como retos de país, sino hacernos cargo de que otras naciones como la nuestra, hermanadas por historia, por cultura, hermanadas por sociedad, tienen una dificultad en el horizonte.
Y esa solidaridad no puede ser simplemente la expresión de un sentimiento en una reunión como esta, sino acciones concretas, expresiones políticas concretas, decisiones concretas en el ámbito de los resortes institucionales que tiene este Senado y de los amplísimos mecanismos y potencias que tiene la política.
La lucha por la amnistía es un primer paso para la reconciliación nacional, y así lo ha dicho Lilian.
Es el paso en el cual una sociedad puede dejar la violencia política y abrazarse --uso la expresión de Lilian-- para hacer de la política libre el paso del cambio político; el instrumento del cambio político.
Por eso y de ahí la enorme importancia de la Ley de Amnistía.
Es la posibilidad de acelerar el cambio político en Venezuela, un cambio que ya inició por el resultado electoral y por la conformación de una Asamblea.
Pero ese cambio político no va a ser profundo mientras no se corrija la injusticia de quienes están hoy pagando una pena en prisión por el único delito de haber hecho política por su país y de tratar de cambiar la realidad de su país.
No podrá haber cambio político profundo para recuperar la democracia en Venezuela, las libertades, la vigencia de los derechos, mientras esas personas no regresen a sus familias, a sus calles y a las plazas públicas, a insistir en lo que los ha motivado, lo que los convenció de tomar por sí mismos la decisión de hacer política.
Es el caso de Leopoldo y de muchos otros líderes políticos que hoy están recluidos en prisión.
Es una demanda de justicia, es una demanda de aspiración de libertad, es una demanda que debería motivar la solidaridad de todos.
No hay ninguna excusa, no hay ninguna razón para que esas personas sigan en prisión mientras únicamente estaban pidiendo y exigiendo a su Nación, que tomara en sus propias manos su propio destino.
La solidaridad del Senado de la República tiene una meta en el cortísimo plazo y es solidarizarnos con la Ley de Amnistía que ha sido presentada como iniciativa en el Congreso, en la Asamblea Nacional Venezolana y que ojalá, esperamos y así lo deseamos, pueda tener pronta resolución.
Y no podemos tampoco soslayar que existe la tentación de no acatar las decisiones de esa Asamblea.
Que existe la tentación de debilitar la soberanía y la legitimidad democrática de la Asamblea venezolana.
Y en el marco de la diplomacia parlamentaria, o mejor dicho, de la solidaridad a la que estamos obligados con otro Parlamento, debemos ser los primeros en levantar la voz para que la soberanía, representada en la Asamblea, la soberanía popular, se cumpla, se acate y tenga vigencia.
Es un poder democráticamente constituido, es un poder hermano del nuestro, del Senado de la República, y sobre todo es el poder que encarna la esperanza de millones de venezolanos.
Lo decíamos hace un momento con Lilian: los ciudadanos venezolanos en la pasada elección, votaron sí por un cambio político, sí votaron por partidos de oposición, pero sobre todo votaron por la Ley de Amnistía para liberar a los presos políticos.
Ese es el mandato popular que recibieron de las urnas quienes hoy integran la Asamblea de Venezuela.
Es el mandato popular que se tiene que cumplir en el corto plazo.
Y es el mandato que el gobierno del Presidente Maduro debe acatar cuando se convierta en una decisión legislativa de la Asamblea Nacional.
Y nuestra solidaridad debe ser, como Parlamento frente a un Parlamento hermano, que esa voluntad se pueda materializar en la decisión que va a regresarle la libertad a unos cuantos, pero sobre todo que le va a dar la oportunidad a Venezuela entera de construir su propio camino de libertad.
Lilian.
Señora Antonieta:
El Senado en su pluralidad, en su enorme y compleja pluralidad, los recibe con calidez, los recibe con reconocimiento, los recibe con amistad, con gratitud, porque su lucha es la lucha de muchos.
Yo subrayo las palabras que han utilizado reiteradamente: diálogo, reconciliación, paz.
Es una lucha más larga, es una lucha más difícil, pero es la única lucha justa que tiene un pueblo tan honorable, tan digno y sobre todo tan esperanzador como el pueblo de Venezuela.
Muchísimas gracias a todos.
De nueva cuenta bienvenidas.

-0-0-0-

Calendario

Julio 2024
Lu Ma Mi Ju Vi Sa Do
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30 31 1 2 3 4