Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

Conferencia de prensa que ofreció el senador Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República.

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: A sus órdenes.


REPORTERA: Presidente, gracias por recibirnos.
Yo le quería consultar: el presidente de la Comisión de Justicia, Fernando Yunes, manifestaba su interés de agotar los 30 días para el análisis de las ternas y esto tal vez podría implicar que puedan quedar unos días vacantes las posiciones en la Corte, y quisiera saber más o menos usted cómo ve el tema de los tiempos, si efectivamente será necesario agotar los 30 días desde su punto de vista.
Y también aprovechar para preguntarle, la semana pasada el dirigente nacional del PRI lanzó fuertes críticas contra López Obrador y Ricardo Anaya por utilizar los tiempos de los partidos para, lo que él dice, es promoción personal. Él considera que es una trampa utilizar de esa manera los tiempos.
Yo quisiera preguntarle su opinión sobre este tema y sobre si efectivamente es necesario hacer una reforma para puntualizar el modelo de comunicación electoral.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Sobre lo primero. La mecánica constitucional establece que el Senado de la República tiene hasta 30 días para pronunciarse sobre la terna que reciba de parte del Presidente de la República.
Esos 30 días son especialmente relevantes, porque en el caso de que no haya un pronunciamiento, la terna se entiende desechada y en consecuencia se abre la segunda ronda de la mecánica constitucional, que implica un nuevo envío por parte del Presidente de la República, otros 30 días; pero ya con una cláusula constitucional de superación de vetos.
Y esta cláusula implica que si se agotan otros 30 días en esta segunda vuelta, el Presidente de la República puede hacer una designación directa.
En consecuencia, el Senado tiene que ser cuidadoso de no agotar la primera segunda ronda, precisamente para no abrir la posibilidad de una designación directa por parte del Presidente de la República.
En consecuencia, el Senado tiene que hacer el mayor de los esfuerzos para tejer un acuerdo, un consenso político en los primeros 30 días; y eventualmente en los segundos 30 días, a efecto de evitar el escenario constitucional en el cual el Presidente por sí mismo y ante sí mismo, determina quién va a integrar la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
No es un plazo rígido, se puede tomar la decisión en el horizonte de esos 30 días, a partir de que se recibe la terna; pero siempre en el entendido de que el agotamiento de estos 30 días genera consecuencias constitucionales; genera la posibilidad y la facultad del Presidente de la República de designar de manera directa.
En todos los casos, nunca ha sucedido –para decirlo pronto– que el Presidente de la República esté en el supuesto de designación directa de los ministros de la Corte. Lo más que ha acontecido es que tengamos estas dos rondas a la que ya he hecho referencia.
¿De qué dependerá el tiempo que lleve el procesamiento de las ternas en el Senado de la República?
De la generación de los consensos. Y hay que recordar cuál es el procedimiento interno:
El Pleno del Senado, cuando recibe las ternas, lo que sucederá el día de mañana, que daremos cuenta formal de la recepción de las dos ternas, aprueba un acuerdo parlamentario en el cual se norma, se disciplinan los distintos procedimientos internos a efecto de hacer la auscultación de los perfiles incluidos en la terna y concluir con una votación en el Pleno del Senado.
¿Cuáles son estos pasos?
Turno a la Comisión de Justicia. Recepción por parte de la Comisión de Justicia, de toda la documentación que acredita el cumplimiento de los requisitos. Se desahoga una comparecencia en el Pleno de la Comisión dictaminadora. La Comisión formula un dictamen con respecto al cumplimiento de los requisitos constitucionales. Y el dictamen se remite al Pleno, no con un pronunciamiento a favor de en quién recaerá el nombramiento; sino simplemente la valoración sobre si cumplen o no los requisitos.
El Pleno del Senado aprueba, en primer lugar el dictamen sobre idoneidad objetiva, es decir, sobre el cumplimiento de los requisitos constitucionales; y posteriormente reparte entre sus integrantes una cédula en la cual, a través de votación secreta, se elige al integrante de la Corte.
Se requiere, como ustedes saben, una mayoría calificada, pero es en votación secreta. Una vez que vuelvan a comparecer, sin preguntas, ante el Pleno del Senado.
Ese es el procedimiento que se ha desarrollado en los últimos ejercicios, es el procedimiento que vamos a aplicar en este caso; y por supuesto los tiempos que se deberán invertir en este proceso, serán aquellos que sean estrictamente necesarios para generar un consenso.
No va a haber fast track, pero tampoco correremos el riesgo de abrir la segunda ronda o eventualmente la ronda constitucional de designación directa por parte del Presidente de la República.
Sería gravísimo que el Senado de la República no lograra un consenso y que en consecuencia, fuese el Presidente quien de manera directa nombrase los dos ministros.
No ha acontecido, no debiera acontecer en un régimen democrático y de equilibrio de poderes. Al contrario, debemos hacer el esfuerzo que esté a nuestro alcance para generar los consensos políticos en un nombramiento que fortalezca a la Suprema Corte de Justicia como el órgano cúspide del Poder Judicial de la Federación.
Con respecto al…
REPORTERA: Perdón, nada más entonces en este tema, si finalmente quedan algunos días vacantes de esas dos exposiciones, ¿representa un riesgo para la Corte o no?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: La Corte puede funcionar con nueve integrantes.
Ya ha acontecido incluso que no esté plenamente integrada. Por supuesto que no es lo deseable; por supuesto que no es lo ideal, sobre todo porque las salas que se integran por cinco ministros al no tener un integrante tendrían que funcionar con cuatro ministros y, en consecuencia, el riesgo del empate es mayor.
No pasa nada, no se altera la vida institucional de la Suprema Corte de Justicia, sin embargo, no es deseable que esté con dos vacantes.
Lo ideal en este proceso serían básicamente dos cosas: Uno, que las fuerzas políticas lograran lo antes posible un acuerdo político, un amplio acuerdo político que garantice la mayoría calificada, y si es posible la unanimidad en el Pleno del Senado.
Y, en segundo lugar, que el día 1º de diciembre, fecha en la cual se actualizan las dos vacantes, tengamos a un pleno de la Suprema Corte de Justicia debidamente integrado.
Eso sería lo ideal y la política debe abocarse a cumplir estos dos objetivos.
Con respecto a lo segundo, muchos creemos que hay una suerte de zona gris en la utilización de los tiempos de radio y televisión que corresponden a los partidos políticos fuera de campañas.
Muchos creemos que quienes han dicho con claridad que van a competir en el 2018 por un cargo de elección popular, como es el caso de uno de los precandidatos que están apareciendo en televisión nacional, en la medida que ya afirmó que estará en la boleta en el 2018 por un partido político, que eso supondría por lo menos una duda sobre si son actos o no anticipados de campaña a través de las prerrogativas de Radio y Televisión.
En nuestro régimen no solamente se tienen que observar las normas relativas a la utilización de los tiempos oficiales de radio y televisión sino también garantizar la equidad en la competencia y que nadie adelante la competencia a través de la promoción personalizada de su perfil, de su persona y de su candidatura.
Esto ya se resolvió en el ámbito del Instituto Nacional Electoral y en el ámbito del Tribunal Electoral.
Se ha autorizado a los partidos políticos a utilizar los tiempos de radio y televisión, los tiempos oficiales, las prerrogativas de partido para difundir la imagen de algún liderazgo de su propio partido.
Sin embargo, tenemos que reflexionar si estas decisiones, si estas estrategias de utilizar los tiempos de radio y televisión pueden implicar actos anticipados de campaña para aquellas personas, para aquellos políticos que ya dijeron que van a competir en el 2018; que explícitamente ya anunciaron que van a participar en esa elección, aquellos que ya prácticamente están en campaña.
No es el caso, los dos casos que se están discutiendo no son los mismos. La diferencia, notable diferencia, abismal diferencia, es que en un caso ya hay un anuncio, una intención explícita de competir en el 2018. En consecuencia, se debe valorar si estamos en el supuesto de actos anticipados de campaña.
Si las reglas actuales no dan, tenemos que reflexionar si tendríamos que corregir las condiciones de equidad en la competencia precisamente para que nadie adelante los tiempos de la competencia.
REPORTERA: ¿Desde su punto de vista, Ricardo Anaya está haciendo trampa?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: No. Ya he dicho claramente la diferencia.
En el caso de Ricardo Anaya él está actuando como presidente del partido en una utilización genuina y auténtica jurídicamente posible de los tiempos oficiales, porque no está en abierta campaña por la Presidencia de la República en 2018; cosa contraria del otro político, del otro perfil que sí ha dicho con toda claridad y con todas sus letras que competirá en el 2018.
En ese caso, al haber hecho una manifestación expresa de la voluntad de competir en el 2018, parecería pues que estamos en el supuesto de actos anticipados de campaña.
REPORTERA: Y para dejar en claro esta zona gris, ¿habría que cambiar el modelo de comunicación electoral o ya no es necesario ir hasta allá?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Habría que reflexionar cuáles son las condiciones de equidad en la competencia que queremos generar en nuestro país.
Se vale o no se vale que alguien desde una posición partidaria, desde una posición de utilización de los tiempos oficiales, puede utilizar esos tiempos oficiales para difundir su imagen a tres años de distancia de la competencia electoral.
Esa es la gran pregunta que nos tenemos que hacer en términos de nuestra institucionalidad democrática; si se vale anticiparse de tal manera, si se vale adelantar los tiempos cuando hemos hecho reformas electorales con la firme intención de no anticipar los tiempos de la competencia electoral.
Hay que recordar que la reforma en 2007 tuvo como uno de los propósitos explícitos evitar que la competencia se adelantara; evitar que alguien se aprovechara de las condiciones de difusión en radio y televisión, o en otro tipo de medios de comunicación para poder difundir su imagen y ganar de manera previa al inicio de los procesos electorales adiciones sociales.
REPORTERO: Presidente, buenos días.
Yo tengo dos temas. Primero, quisiera conocer tu opinión.
Hoy se da a conocer que la Policía Federal tiene grandes adeudos en cuestiones de hoteles. Es decir, cuando van a un estado a ayudar a resarcir el tejido social y a recuperar la seguridad y la paz se hospedan en estos hoteles, pero no pagan.
¿Esto no de alguna manera afecta también la economía de estas entidades que se supone que tendrían que ir a rescatar?
Y también por otra parte, también el senador Yunes comentaba que pasando el periodo de elección de los dos ministros de la Corte se debe de reformular y ponerle límites a los tiempos con los cuales el Ejecutivo tendría para presentar las ternas, para que no los dejara a ustedes también tan acotados en ese sentido.
¿Ustedes lo acompañarían?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Con respecto a la Policía Federal, muchas de las decisiones de despliegue de fuerzas federales se toman de un día para otro. Se responden a situaciones de emergencia, se responden a circunstancias no previstas, no calculadas, no planeadas, como podría ser el estallido de una crisis de violencia o algún acontecimiento de enfrentamientos entre Fuerzas Armadas y delincuentes, y, en consecuencia, se requiere tomar decisiones prontas.
Desafortunadamente, la institucionalidad de gasto en nuestro país no está preparada para esa flexibilidad. Se requiere toda una burocracia interna para comprobar, acreditar, liberar los recursos, y eso puede generar algunos retrasos en el pago de proveedurías, sobre todo cuando tiene que ver con temas de seguridad que, insisto, requieren una respuesta rápida, pronta, del Gobierno Federal y del Estado mexicano.
Espero que esa sea la explicación de estos adeudos que, en efecto, la rigidez de las normas administrativas estén dilatando el pago de las proveedurías y que no sea un descuido por parte de las autoridades que tienen a su cargo a la Policía Federal, y sobre todo que tienen a su cargo la administración de bienes y servicios que se le proveen a la policía federal.
Lo cierto es que en nuestro país por un régimen crónico de desconfianza, por un régimen de control preventivo posterior de los recursos públicos, se han generado una serie de dinámicas que hacen muy rígida la aplicación de los recursos y ahí puede haber buena parte de la explicación de esos adeudos.
Ojalá se trate de eso y ojalá puedan resolverse de mejor manera con normas específicas para ese tipo de circunstancias y que ningún proveedor de bienes y servicios al Estado mexicano o al Gobierno de la República quede en una circunstancia de impago frente al propio gobierno, y que evidentemente pueda pagárseles con oportunidad, porque en efecto se afecta la economía nacional.
Se afecta la economía de las localidades, se afecta la economía del patrimonio de las personas que proveen esos bienes y servicios, y eventualmente se desalienta la inversión y se generan efectos en el empleo.
Sin embargo, habría que distinguir claramente si se trata de una omisión o una negligencia por parte de las autoridades que administran los recursos de la Policía Federal o se trata, pues, de la rigidez habitual de las normas administrativas con la cual se aplican los recursos públicos, sobre todo en materia de seguridad con estas características que ya he definido.
Con respecto a la mecánica constitucional, en el diseño uno de los elementos de discreción que tiene el presidente de la República es elegir el momento en el cual envía la terna.
Son distintos tipos de discreción que están insertos en la mecánica constitucional: la primera es cuándos e envía, la segunda es cómo se integra la terna, qué opciones se combinan en esos tres perfiles que se envían al Senado; si se juega una apuesta a la primera ronda o bien se fuerza a la segunda ronda o eventualmente a una tercera.
Hay un diseño en la Constitución que genera una suerte de mecánica de incentivos a la cooperación por parte del Senado, pero también a la responsabilidad por parte del Ejecutivo y esa responsabilidad se desdobla en la elección de cómo, cuándo y a quién se envía como terna.
Ese es el diseño que nos hemos dado y ha venido funcionando a lo largo del tiempo. Por supuesto que el procedimiento puede ser mucho más pulcro, puede ser perfeccionado, pero eso implicaría modificar de sustancia esta mecánica y realinear de alguna manera los incentivos.
Alterar estos mecanismos de discreción tiene efectos en la forma en la que interactúan los poderes. El diseño estaba pensado precisamente para que haya responsabilidad en la postulación y responsabilidad en el nombramiento por parte del Senado y de que cuando no haya posibilidad de cooperación entre poderes, existan cláusulas de salida para resolver la obstrucción entre los propios poderes. Tal es el caso de esta cláusula de la tercera etapa que es nombramiento directo del Presidente.
Yo creo que es deseable siempre pensar y repensar nuestras instituciones. Por supuesto que puede ser mejor el procedimiento de elección de ministros, siempre y cuando también ponderemos claramente cuáles son las racionalidades que están en el diseño que nos hemos dado y que desde mi perspectiva ha funcionado porque alienta, por un lado, la responsabilidad de quien postula y por el otro, la responsabilidad de quién no.
REPORTERO: Quiero saber, cumplió un año de que el presidente envió su iniciativa en materia de seguridad, mando único.
Argumentaba en ese entonces que se requería esa reforma por las condiciones que pasaba el país, creo que no han cambiado. ¿Qué ha pasado aquí en el Senado?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: No solamente está la iniciativa del presidente de la República, sino como ustedes saben, ya se han incluido otras iniciativas.
Recientemente el PAN ha presentado un modelo de reforma integral del Sistema Nacional de Seguridad Pública para no solamente aumentar la generación de capacidades, sino también para formalizar, institucionalizar desde la Constitución los mecanismos de intervención de los órdenes mayores con respecto a los órdenes locales, para generar capacidades, pero también para atender situaciones de crisis.
Ya hay dos iniciativas, la iniciativa del presidente de la República que, insisto, no propone mando único, sino propone policías estatales únicas, que son dos cosas diferentes.
El mando único implica la existencia de distintas policías en distintos órdenes de gobierno. La propuesta del presidente propone, por el contrario, desaparecer las policías municipales y sustituir las policías municipales por una sola policía estatal.
No es mando único, es policía estatal única y cando discutimos esa iniciativa hubo algunas reacciones por parte de gobernadores y alcaldes, en el sentido de que no es conveniente mudarnos a un sistema de tal rigidez, en razón de que las realidades en nuestro país son absolutamente diferentes.
Hay policías estatales muy buenas, como por ejemplo la policía de Nuevo león; hay policías municipales muy buenas, como por ejemplo la policía municipal de Querétaro; hay policías municipales que son una desgracia, como la policía de Veracruz o una policía municipal de tragedia, como es la policía de Iguala.

Tenemos distintas realidades, hay policías estatales buenas y policías municipales buenas; hay policías estatales malas y policías municipales muy malas.

La gran apuesta de la reforma en materia de seguridad pública debe ser crear los incentivos correctos para que los órdenes de gobierno generen capacidades propias, es decir, generen instituciones de seguridad en cada uno de los marcos de su responsabilidad y que esas policías funcionen con honestidad, con profesionalismo, con honradez, con sentido de eficacia y que puedan atender los desafíos específicos de la realidad en la que actúan.
Nosotros estamos dispuestos, como grupo parlamentario, a entrar a la discusión sobre la reforma en seguridad. Tenemos propuestas explícitas, tenemos propuestas ya presentadas; hemos sometido a la discusión pública un conjunto de ideas con respecto al fortalecimiento de la política de seguridad en nuestro país y estamos en espera de que los otros grupos parlamentarios se pronuncien al respecto.
Nosotros estamos listos para entrar a la discusión y existen las condiciones políticas en el Senado de la República para que en este mismo periodo de sesiones nos pongamos de acuerdo en una reforma en materia de seguridad.

Hay tiempo si existe voluntad política; hay posibilidad política si existen ámbitos de conciliación y sobre todo márgenes para ponernos de acuerdo.

México necesita una reforma integral en seguridad que desafortunadamente no se agota con decidir en quién recae el mando operativo de las policías. Se requiere un rediseño integral para poner los incentivos correctamente y que el Estado Mexicano genere capacidades desde el municipio más modesto en nuestro país, al estado más rico en nuestro territorio.
REPORTERO: Senador, tres preguntas.

La primera, estarían en condiciones de acompañar, incluso como PAN o como senador, la propuesta de Manlio Fabio Beltrones de modificar la Ley Electoral. Esa sería la primera.
La segunda es también qué opinión le merece que el mismo presidente ya se pronunció por un ministro, en el caso de Laynez, y también la ministra actual se pronunció a favor de la magistrada Piña.
¿Esto no pone en riesgo las decisiones aquí o ustedes ya están en condiciones de dar algún tipo de perfil del candidato a ministro?
Y la segunda sobre el presupuesto. ¿La Cámara de Diputados les dio la lana que estaban pidiendo ustedes, le van a bajar al tema de los recursos, en qué quedó el tema de los dineros?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Empiezo por la última pregunta.
Se aprobó el presupuesto tal y como lo envió el Senado de la República. Ya en algún momento, en un encuentro con ustedes aclaramos que el incremento del presupuesto en el Senado tenía que ver con la compensación de una reducción que hizo la Cámara de Diputados, las horas finales de la discusión presupuestal del año que entra y que nos dejó en una situación difícil frente a algunos proyectos que teníamos y ya estaban en marcha.
Estaos generando ahorros importantes. Vamos a presentar en próximos días ya el balance integral del Plan de Austeridad para este año y para el que sigue; vamos a hacer ahorros importantes en distintas materias y vamos a invertir los ahorros, en general nuevos ahorros.
Hay muchas áreas de oportunidad en el senado, que si invertimos en equipamiento, si invertimos en soluciones definitivas a los contenciosos que tenemos, por ejemplo, con respecto al edificio, podemos ahorrarnos mucho dinero hacia el futuro y eficientar el uso de los recursos en el Senado.

Vamos a hacer un esfuerzo por qué los recursos que se han dispuesto en el Senado de la República se ejecuten, se apliquen de manera correcta, puntualmente, conforme a lo que establece la ley, pero sobre todo a generar ahorros importantes.
También, como lo establece la Ley de Transparencia, estamos en un proceso de reorganización administrativa que ya fue presentado en los grupos parlamentarios y que está en proceso de formalización, para cambiar la forma en la que se aplican los recursos y sobre todo en las asignaciones a los grupos parlamentarios.

De tal manera que con el nuevo régimen administrativo tengamos total posibilidad de transparentar el origen y destino de los recursos públicos, pero también la forma en la que esto se aplica específicamente en el ámbito de los grupos parlamentarios, de las comisiones y del Senado en su conjunto.
Con respecto a las ternas, las ternas son de tres y las tres personas que han sido propuestas, los tres perfiles, participarán en igualdad de condiciones en el Senado de la República.

Los tres de cada una de las ternas nos merecen el respeto y nos merecen también la consideración de que su perfil se analizado, sea revisado de manera objetiva, imparcial, a detalle, profunda, en el entendido de que el Presidente ha asumido una responsabilidad, o ve en ellos que tienen las características y las condiciones personales para poder ocupar ese cargo.
Para el Senado de la República las ternas están integradas por 3 personas que participarán en este proceso en igualdad de consideraciones, en igualdad de trato y con la misma oportunidad de ser electos o nombrados como Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
No hay dados cantados. Algunos ya los conocemos porque han estado presentes en las negociaciones, en las discusiones en razón de su cargo.
Algunos ya los conocemos porque han participado de manera previa en procesos de nombramiento de ministros.
Pero también hay algunos otros que no conocemos y que deberíamos y debemos conocer a cabalidad cuáles son sus trayectorias, su experiencia, su perfil, sus conocimientos y los méritos que el Presidente ha encontrado en ellos para proponerlos al Senado de la República.
Garantizamos, en el Senado de la República, igualdad de trato, equidad en la competencia y las mismas posibilidades de ser nombrados.
Por supuesto que habrá pronunciamientos de distinto tipo: de la sociedad, de senadores, a favor de alguno u otro. Es parte de la discusión social con respecto a las ternas, es parte de los pronunciamientos que se generan cuando tenemos una discusión de esta naturaleza.
Lo importante es que el Senado garantiza que todos tendrán las mismas posibilidades de ser electos.
Y con respecto a la propuesta del Presidente Beltrones:
Entiendo que él ha hecho una reflexión, a modo de comentario, en algunos espacios noticiosos:
No conozco el contenido de ninguna iniciativa. No conozco la existencia de un planteamiento formal, por escrito, que plantee la revisión del modelo de comunicación política o de algunas otras reglas de la institucionalidad electoral vigente.
En el caso que haya alguna iniciativa, los grupos parlamentarios la revisarán porque es parte natural de nuestro trabajo.
Cada iniciativa que se presenta, independientemente de quién sea el autor, merecen la discusión, la atención de los otros grupos parlamentarios y ver si tiene méritos para poder ser respaldada.
En este momento no existe ningún tipo de planteamiento formal, salvo los comentaros que a modo de reflexión se ha hecho desde la trinchera del PRI, con respecto a un acontecimiento, la difusión por parte de ciertos perfiles en los espacios de radio y televisión y específicamente por el anticipo o el adelanto en la promoción personalizada de un aspirante a la Presidencia de la República en el 2018.
En esa tesitura tomamos esos comentarios. Cuando venga una iniciativa, si es que viene, el PAN y los senadores en lo individual, en el seno de las comisiones y también en el foro interno, se pronunciarán sobre esas reformas o sobre esas iniciativas.
En este momento, insisto, no existe ninguna materia prima para generar una aproximación, o un pronunciamiento en términos de acompañamiento o no de esa propuesta.
REPORTERO: Si me permite hacer una última pregunta sobre el tema de Francia y este recrudecimiento de la guerra contra el terrorismo que ya anunció el Presidente Hollande, que nos regalara una opinión sobre este tema.
Y hay cierto temor también de que México al ser frontera con Estados Unidos, pudiera ser la vía a lo mejor para entrar el terrorismo hacia los Estados Unidos, también sobre algún eventual acuerdo con el narcotráfico, con los clanes del narcotráfico, y que incluso en esta intención, aclara de atacar a las grandes potencias, pudiera ser hasta el objetivo de algún atentado terrorista a México. ¿Qué nos comenta?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Nuestra posición geopolítica, nuestra vecindad con Estados Unidos, y sobre todo con el país que mayor protagonismo ha tenido en el combate al terrorismo internacional, que es Estados Unidos, nos obliga no solamente a tener una estrategia de prevención, de inteligencia, de atención frente a cualquier riesgo o amenaza a nuestra seguridad nacional, y específicamente a la posible incursión de grupos terroristas en nuestro país y generar alertas, pero sí estando atentos y cuidando que nuestro país, por esta vecindad, no entre en una zona de riesgo.
Pero también tener claro que la lucha contra el terrorismo internacional no debe ser únicamente de unos cuantos países, no debe ser únicamente de quienes han sido en el pasado atacados por estas células de terrorismo internacional. Debe ser una decisión del concierto internacional, de todos los países.
Los grupos terroristas tratan de dinamitar, de destruir una forma de convivencia democrática basada en libertades y pretenden infundir el miedo en nuestras sociedades precisamente para poder imponer su forma de creer, su forma de ver la realidad.
México debe participar de manera activa en todas las decisiones y estrategias que lleven a la desactivación operativa, financiera y militar de las células terroristas en el mundo.
Debe de participar de manera activa en el intercambio de información, en la generación de circuitos de prevención en todos los continentes, en todos los países y especialmente en un país como el nuestro, que comparte frontera con Estados Unidos.
La lucha contra el terrorismo debe ser del mundo civilizado, de las civilizaciones que han avanzado hacia un régimen de libertades, de democracia y sobre todo que no van a dejarse amedrentar por el miedo y por el terror.
Es una lucha de nuestra civilización, de nuestra forma de convivencia, basada en democracia y libertad, es la que tenemos que dar en el concierto internacional.
Y por supuesto que México debe ser una voz activa en el debilitamiento de cualquier sentimiento o sentido de terror, de miedo en nuestras sociedades.
Cuando el miedo se generaliza en nuestras sociedades, ha triunfado el terrorismo.
Cuando las sociedades enfrentan el miedo con decisión, con alegría, con apertura, con tolerancia, con decisiones de cuidar sus fronteras y la integridad de sus territorios, pero sobre todo se enfrentan con decisión a esos desafíos, esas sociedades salen adelante.
Nuestro riesgo es debilitar el terrorismo internacional y para eso se requiere el consenso global, el consenso internacional, la suma de todos los países que compartimos valores y principios en la democracia y en la libertad.
REPORTERA: La legislación vigente en México en materia de combate al terrorismo, ¿es suficiente o será necesario fortalecerla?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Tenemos instituciones que nos permitan tener un régimen de prevención.
Hay tratados internacionales que nos someten a obligaciones y que también nos dan acceso a información relevante para poder prevenir o atender cualquier tipo de riesgo o amenaza a nuestra seguridad y específicamente a la forma de convivencia que los mexicanos nos hemos dado.
Tenemos mecanismos, por ejemplo, de inteligencia financiera, de inteligencia en materia de seguridad, compartimos información con Estados Unidos, compartimos información en el seno de Naciones Unidas, en el seno de los mecanismos de cooperación para el combate al terrorismo, fundamentalmente mecanismos, por ejemplo, de acotamiento de la capacidad financiera de estas células terroristas.
En fin, creo que existe institucionalidad suficiente para poder enfrentar el desafío actual.
México no debe caer en pánico. México no debe caer en el miedo. México debe actuar para evitar cualquier riesgo o amenaza en su seguridad nacional y específicamente en la convivencia entre los mexicanos.
Pero también debe colaborar y contribuir a la desactivación de estas células terroristas internacionales, a la contención del crecimiento de estos fundamentalismos religiosos de carácter islámicos, y sobre todo de quienes han recurrido a las armas y al terror como mecanismo para infundir sus ideas.
Gracias.

Calendario

Julio 2024
Lu Ma Mi Ju Vi Sa Do
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30 31 1 2 3 4