En el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, el Senador Francisco Salvador López Brito, presentó Punto de Acuerdo que exhorta a la Secretaría de Salud para que realice acciones de prevención de trastornos mentales, detección oportuna y brinde el tratamiento y rehabilitación de las personas afectadas, y en particular a quienes padecen depresión, alcoholismo o esquizofrenia.
Asimismo, para que en colaboración con la Secretaría de Educación Pública realicen acciones de prevención para reducir el riesgo de suicidio en escuelas de nivel secundaria y preparatoria; de igual forma, brinde una atención adecuada y dé seguimiento a los pacientes que han cometido intentos de suicidio.
“El suicidio es tal vez la forma más trágica de terminar con la propia vida. Usualmente, las causas del suicidio responden a una compleja interacción de muchos factores, tales como enfermedad mental o física, abuso de sustancias alcohólicas y psicotrópicas, problemas familiares, interpersonales y económicos, estrés crónico, ansiedad y tristeza extrema”, resaltó el también integrante de la Comisión de Salud.
Al respecto, la Secretaría de Salud en México, estima que cada año hay hasta 14 mil intentos de suicidio, sin considerar los consumados, mientras que en el mundo, cada día hay en promedio casi 3 mil personas que ponen fin a su vida, y al menos 20 personas intentan suicidarse por cada una que lo consigue, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Lamentó que, por la falta de prevención y desconocimiento de los comportamientos de una persona con riesgo elevado de privarse la vida, esta conducta se incrementa con rapidez principalmente entre los adolescentes y jóvenes de 12 y 24 años, quienes ocupan el primer lugar en sectores vulnerables; en segundo lugar, se ubican personas adultas y, en tercero, las personas adultas mayores.
Según el Informe sobre el Sistema de Salud Mental en México elaborado por la Organización Panamericana de la Salud, al 2011 se contaba con 544 establecimientos de salud mental ambulatorios que ofrecían atención a 310 usuarios por cada 100,000 habitantes en contraste con los hospitales psiquiátricos que atendían a 47 usuarios por cada 100,000, informó López Brito
“La mayoría de los pacientes eran adultos; la población de niños y adolescentes ascendía a 27% en unidades ambulatorias y a 6% en hospitales psiquiátricos. Para diversos investigadores, estas cifras resultan preocupantes si se considera que la edad de inicio de la mayoría de los trastornos psiquiátricos se encuentra en las primeras décadas de la vida”, destacó.
El Senador Sinaloense, insistió en que una difusión apropiada de información y una campaña de sensibilización del problema son elementos esenciales para el éxito de los programas de prevención. Para ello, es necesario que las autoridades sanitarias lleven a cabo una campaña de prevención en diversos medios de comunicación, donde se alerte sobre los acontecimientos que pueden llevar a considerar el suicidio, y se oriente que éstos son temporales y no constituye una solución o método para enfrentar problemas personales tales como bancarrota, incapacidad de aprobar un examen, o abuso sexual.
Lo anterior, reforzado con charlas de orientación en secundarias y preparatorias, para que los adolescentes y jóvenes aprendan a identificar los síntomas de la depresión por ejemplo y con oportunidad reciban el tratamiento adecuado, enfatizó el Senador, médico de profesión.
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