- PAN, comprometido con desarrollar una gestión del agua en la agricultura que sea viable y favorable a los pobres
La Reforma del Campo que deberá discutirse en el Congreso en breve, habrá de centrar su atención en el uso eficiente del agua, como elemento crucial para elevar la producción agrícola en México, y con ello evitar el lamentable desperdicio de casi 50% del agua usada para riego como ocurre actualmente, así lo manifestó el Senador Francisco Salvador López Brito, hoy en el día de quienes trabajan la tierra para dar de comer a millones de mexicanos y extranjeros.
En los festejos de los productores agrícolas, el responsable de impulsar la Reforma al Campo del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional en el Senado de la República, señaló que los incentivos para invertir en la reparación y modernización de los sistemas de riego son muchos, ya que actualmente la agricultura consume 77% del agua del país, pero debido a la falta de modernización casi la mitad se desperdicia.
Puntualizó que la productividad agrícola no solamente debe medirse por el número de toneladas producidas por hectárea, sino también por los metros cúbicos de agua utilizados para producir una tonelada de alimentos, por lo que es vital promover políticas públicas para su uso y gestión eficiente.
Destacó que es prioritario mejorar la planeación del uso y gestión de riego y drenaje, ya que el mal riego y avenamiento producen pérdidas de agua y la propagación de enfermedades transmitidas por el agua, el encharcamiento y la salinización de casi el 10 por ciento de las tierras de regadío del mundo, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), lo que reduce la productividad.
Reconoció que en el pasado se han hecho grandes inversiones para desarrollar los sistemas de riegos en el país, sin embargo, las actividades de funcionamiento, mantenimiento y rehabilitación de tales sistemas no están financiados suficientemente por los sectores público y privado.
López Brito señaló que el gobierno debe destinar mayores recursos a un programa de uso racional del agua, a efecto de elevar la eficiencia del agua de riego e incrementar la productividad con criterios de sustentabilidad, para lo cual se debe invertir en la rehabilitación y modernización infraestructura hidroagrícola, además, deberán incrementarse significativamente los volúmenes de agua residual tratada y su reutilización, con el fin de aumentar la disponibilidad de agua.
El Senador por Sinaloa comentó que el Partido Acción Nacional (PAN), está comprometido con desarrollar una gestión del agua en la agricultura que sea viable y favorable a los pobres, para lo cual impulsarásistemas baratos y en pequeña escala de recolección del agua, de riego y drenaje para las pequeñas comunidades rurales, las cuales es posible que cuenten únicamente con medios manuales y de tracción animal.
“La ampliación de la cobertura de los sistemas de riego para alcanzar no solamente una mayor producción, sino también una mayor productividad que brinde mayores ingresos a la gente del campo, ayudará a reducir la brecha de la desigualdad en el sector rural tornando productivas las tierras que hasta hoy se siembran por temporal”, dijo.
Existen notables diferencias al comparar los rendimientos promedio en la producción de maíz y trigo en México en áreas de riego contra los rendimientos por hectárea en áreas de temporal, así por ejemplo según cifras oficiales, para producir 13 millones de toneladas de maíz se necesitan 1.8 millones de hectáreas de riego. En cambio, si la producción se lleva a cabo en áreas de temporal se necesitan 6.6 millones de hectáreas para alcanzar el mismo nivel de producción.
Por otra parte, mencionó que la reforma a las políticas públicas del campo deben incorporar acciones de mitigación del cambio climático, ya que según datos oficiales 48 por ciento de la tierra del país es susceptible a degradación y desertificación, lo que provoca la desestabilizado los ciclos agrícolas, por lo que se debe proteger a productores vulnerables mediante seguros catastróficos y apoyos directos en desastres naturales.
Entre las estrategias para ahorrar agua en la agricultura, el Senador López Brito resaltó la siembraprotegida en predios pequeños, ya que permite proteger a los cultivos de factores ambientales adversos, hacer un uso eficiente del agua y productividad del uso de suelo incrementando el volumen y calidad de los productos.
“Por kilo de tomate producido bajo la modalidad de agricultura protegida es posible ahorrar hasta un 60% menos uso de agua que a campo abierto”, concluyó.