Al manifestar el respaldo del GPPRI a las reformas a Ley General de la Infraestructura Física Educativa, en materia de bebederos escolares, las senadoras Graciela Ortiz y Mely Romero consideraron que esta medida contribuirá a mejorar la salud de miles de niños en el país.
Durante el análisis del dictamen, que fue aprobado por el pleno del Senado en la sesión de este jueves, puntualizaron que el consumo de agua potable ayudará a reducir el consumo de bebidas azucaradas entre el estudiantado, que es una de las causas de la obesidad.
“El hecho de que se establezca -como medida administrativa y legal-, el que cuenten en las escuelas con los bebederos, va a lograr en términos generales una disminución sensible del consumo de bebidas azucaradas”, destacó Ortiz González.
La senadora por el estado de Chihuahua dijo que esta situación está dando como resultado que miles de niños padezcan cada vez, a más tempranas edades, el problema de diabetes.
Expuso que por su magnitud y ritmo de crecimiento, esta problemática de obesidad y sobrepeso que aqueja a la población, representa ya un grave problema de salud, que en muchos casos afecta la productividad y el desempeño escolar.
Por su parte, Mely Romero Celis manifestó que los niños en situación de cursar la educación básica son uno de los sectores más vulnerables, y alertó que México ocupa el cuarto lugar en obesidad de niños y el octavo lugar en niñas, a nivel mundial.
Por ello, la senadora por el estado de Colima indicó que para el GPPRI es fundamental que todas las escuelas de educación básica, media superior y superior cuenten con bebedores de agua potable.
Es urgente establecer una estrategia que permita a las autoridades educativas de los tres niveles de gobierno ofrecer al acceso al agua potable de calidad a los más de 35 millones de alumnos que existen en el país, agregó.
---000---