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1202.2018
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)) NOSOTROS LOS PROGRI
H
ace algunos días reflexio–
naba en este espado sobre
el papel que debiera jugar
el PRI en las elecdones del
próximo verano en la capital. En
vir–
tud de su extrema debilidad, tanto en
las preferendas de los electores como
en sus estructuras. sugerí que debía
centrarse en las propuestas;
y
enfo–
carse exclusivamente en aquellas sec–
dones
y
distritos en dónde es relativa–
mente competitivo.
De igual forma, me aventuré a una hipótesis
de alianza de facto con
el
Frente, de tal suerte que
sume su fuerza para ayudar a frenar el avance de
MORENA en la dudad; lo que desde mi punto de
vista vendría a agravar aún más los problemas que
nos han legado los sucesivosgobiernos deizquierda.
Yno es que considere a Alejandra Barra!es como
lo mejor que
rlM
pueda ocumr, sino que la dudad
se terminarla de hundir al tener de regreso a la co–
rrupción
más
descaraday al radicalismo ideológico
que representa Claudia Sheinbaum
y
sus compañe-
LaRazén
ros de campaña (Bejarano, Ebrard, ·chiguil, Romo,
Batres y otros similares).
En ese sentido, por supuesto que en el trico–
lor
saben
perfectamente que su cosecha será muy
pobre, aunque algo tienen que sumar. Sin embar–
go, pareciera que están empeñados enmermar aún
más a su raquítica base.
La
repartición de candidaturas siempre deja he–
ridos en el camino, pero en este caso lo que ha pro–
vocado es que el tricolor se encuentre en el cuarto
sitio, acariciando laposibilidad de perder
el
registro.
Arriola es
sin
duda una cara fresca, pero su estadia
no creo que sea de largo plazo, además de que su
papel es trabajar para que otros ganen.
Por eso deben ser muy cuidadosos con aquellos
pocos que han trabajado para mantenerlos a flote.
Lo más sabio será enviar candidatos de sacrificio
para que compitan por las alcaldías (a excepción de
aqueUas pocas que actualmente gobiernan); y colo–
car a los cuadros más competitivos y con prestigio
entre la militancia y la comunidad
en
las diputado·
nes locales.
Quizás
eso explique
el
registro de candidaturas
que se está presentando. Dos casos en particular
ejemplifican lo dicho: el de Araceli García Rico y el
de Esteban
Ruiz
Carballido.
En el primer caso se trata de la ex candidata
al Senado en el proceso
2012.
Ella obtuvo por sí
misina cerca de
900
mil
votos, mientras que su
compañero, Pablo Escudero, a duras penas logró
una tercera parte de eso. Sin embargo, el segundo
iba al frente de la fórmula y logró entrara al Senado,
mientras
que a la primera ni las
gracias
le dieron.
En
el caso de Esteban
Ruiz,
aunque no es oriun·
do de la capital, ha trabajado durante años por su
partido, concretamente en Benito Juárez. Sin em–
bargo, la cúpula decidió darle la candidatura a la
delegación al ex clavadista olimpico Carlos Girón,
quien porcierto buscó postularse primero por la
Mi·
guel Hidalgo. Si quien está tomando las decisiones
no quiere que de los cuatro votos que se llevarán,
dos vayan a parar en MORENA, bien deberían cui–
dar de ese tipo de militantes.
Twitter: ®RudyCoen