Senado de la República

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Durante la comparecencia del secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, senadores del PRI, PAN, PRD y PVEM vertieron sus opiniones sobre las ventajas y desventajas de que el gobierno mexicano suscriba el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés).
Al respecto, la senadora Lisbeth Hernández Lecona, del PRI, hizo referencia a las ventajas de contar un acuerdo de la naturaleza del TPP, pues representa el 53 por ciento del PIB mundial y el 44 por ciento del comercio global.
“México tiene potencial para ser líder no sólo en América Latina, sino también en la región Asia-Pacífico”, opinó.
El senador del PAN, Francisco de Paula Búrquez Valenzuela, señaló que la apertura comercial le hace mucho bien, y de hecho ya ocurre: 35 por ciento de los insumos que exporta la industria en sectores de avanzada como la automotriz, vienen de Asia.
“Hay que permitir abrir la frontera en los dos sentidos, no hay que tener ningún prejuicio al respecto. Todas las importaciones están viniendo por los puertos de California, porque en la Costa del Pacífico no nos hemos preparado para esa realidad que se está viviendo con TPP o sin TPP”, sostuvo.
Al fijar del PRD, la senadora perredista Dolores Padierna Luna expresó que no puede compartir varias de las cuestiones que contiene el TPP como el que las empresas extranjeras tenga derecho de enjuiciar a economías soberanas como la del país si a una empresa transnacional no conviene a sus intereses.
Coincidió con la senadora Iris Vianey Mendoza Mendoza, del mismo Grupo Parlamentario en lo referente a la posible amenaza del acceso a los medicamentos a países en desarrollo como el nuestro y por poner en peligro el libre acceso a internet.
También señalaron que al aceptar el Tratado se tendría que modificar la legislación para hacerla armónica a los nuevos protocolos. En el tema de protección de derechos de autor indicaron que se trata de un control a la libertad que se tiene en Internet y que se criminaliza a los proveedores de este servicio.
Iris Vianey Mendoza cuestionó si existió algún condicionante para la entrada de México al tratado, como la reforma energética que se dará próximamente, así también refirió el caso del proyecto Dragon Mart.
Por su parte, el senador Carlos Puente Salas, del Partido Verde Ecologista refirió que si hay preocupación en el tema de patentes, de medicinas, por lo que dijo que se puede trabajar en coordinación con la Secretaría para cuidar al país, pero sin dejar fuera al país en la posibilidad de competir en esa globalización.
Asimismo, reconoció que el Senado debe participar muy de cerca en la negociación del Tratado para dar seguimiento de las posiciones que se externen y con ello ir haciendo análisis de las adecuaciones que se tengan que realizar en la legislación.
Al dar respuesta, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo destacó que el reto es definir la fortaleza de un mercado interno que tiene como contraparte la definición de una política industrial consistente con el mundo global, al cual, ninguna economía del mundo tiene la posibilidad de darle la espalda.
La política industrial --señaló-- debe ser que todos los sectores de la economía mexicana se beneficien de una estrategia de integración, sólo 30 por ciento del valor incorporado a las exportaciones es de contenido nacional.
El acuerdo, agregó, abre la puerta de integración a economías de mayor dinamismo y en ese contexto, el nivel de intercambio de comercio con las economías de Asia, principalmente se compran productos intermedios que se procesan en territorio nacional para formar parte de nuestra cadena de exportación, donde finalmente se trata de incorporar a pequeñas y medianas empresas mexicanas para sustituir a los proveedores en las cadenas de valor.
Además, dijo que no existe criminalización para proveedores de internet ni obstáculos para acceso a la riqueza dentro del esquema de la red, sí hay un capitulo de propiedad intelectual, otro de propiedad industrial que lo único que define es la protección de los derechos de autor, de diseño y de los de propiedad industrial sin afectar el acceso a la internet y su información.
En el tema de controversia de inversionista-Estado, comentó que el esquema es parte del estándar internacional aceptable en un mundo globalizado. “Un país no puede aspirar a tener mayores flujos de inversión si no hay garantías mínimas contra acciones discrecionales expropiatorias”.
Puntualizó, a pesar de que aún no ocupaba el cargo, que México solicitó formalmente ser incorporado a las negociaciones y dando respuesta a otro cuestionamiento señaló que no hubo ningún condicionamiento para el acceso al tratado, “mucho menos en materia energética”.
En el caso de Dragon Mart aseguró que en el Gobierno federal no existe solicitud de permisos migratorios, de importaciones, de ninguna naturaleza que tenga que ver con acciones federales.
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