Versión estenográfica de la participación de Claudio Prieto, coordinador de Servicios Tecnológicos de la Asamblea Nacional del Ecuador, en la reunión de trabajo a distancia con la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado de la República, con parlamentarios de Chile y representantes de la Organización de los Estados Americanos, OEA.

 

Muchas gracias, buenos días a todos.

 

Un cordial saludo en representación del ingeniero César Litardo, presidente de la Asamblea Nacional del Ecuador.

 

Un saludo especial al Senado de México, en particular a sus dignatarios, a su Presidenta, la senadora Mónica Fernández, y a todos los senadores que se encuentran presentes.

 

Un especial saludo, igualmente a la OEA, un agradecimiento por coordinar la participación y la invitación a este evento.

 

Igualmente un saludo cordial a nuestros amigos, a nuestros colegas del Congreso de Diputados de Chile, en especial a Miguel.

 

Para nosotros es realmente muy importante que nos hayan invitado a esto y poder compartir nuestra experiencia en esta crisis, en esta pandemia.

 

Y, a pesar de que soy representante del ámbito informático, realmente hemos presentado, hemos organizado una presentación en el ámbito general y en el contexto amplio que tiene que ver con la implementación de sesiones virtuales y de la gestión parlamentaria en modalidad teletrabajo.

 

Es por ello que quisiera compartir con ustedes una presentación. Voy a intentarlo, al igual que lo hizo Miguel, espero poderlo lograr, para poder mostrar de una manera más gráfica las cuestiones que toca tomar en cuenta en este escenario.

 

Si me habilitan la función de compartir.

 

PUBLIO RIVERA RIVAS: La tienes habilitada.

 

CLAUDIO PRIETO: Para empezar con el trabajo que se ha hecho acá en la Asamblea Nacional de Ecuador, al igual que todos, creo que nos tomó en un momento que no estábamos preparados o no lo teníamos previsto.

 

En el caso particular del Ecuador, la Asamblea, los miembros del Parlamento, se encontraban en receso legislativo; es decir, cada uno estaba en su territorio, en sus lugares habituales de residencia, ninguno en sus oficinas, y en esa situación se presentó la emergencia, se decretó el Estado de excepción acá en el Ecuador y ninguno de ellos se pudo movilizar a sus oficinas siquiera para tomar algún equipamiento o algún documento que permita facilitar el trabajo.

 

Ahora creo que tenemos la función -estoy activándome, me dispensa un momento hasta lograr poner en pantalla un documento-.

 

Okey, se está cargando el documento, espero que ya pronto lo puedan ver.

 

¿Si me pueden confirmar si están viendo un documento en pantalla? Creo que se nos giró.

 

PUBLIO RIVERA RIVAS: Sí, está en modo vertical.

 

CLAUDIO PRIETO: Vamos a tratar de rotarlo. Por algún motivo tenemos aquí un pequeño detalle técnico que nos impide rotar el documento, si alguien tiene experiencia en esto, cómo lograr que este documento gire.

 

Bueno, mientras lidiamos con este asunto, les voy a seguir hablando del contexto ecuatoriano. Como les comentaba, nos tomó a toda la asamblea en un tema de receso y eso de cierta manera era un cierto impedimento para coordinar algunas actividades.


Pero a pesar de ello, efectivamente se trató de coordinar, organizar de la mejor manera el tema, y quería aquí, en primera instancia, compartirles cual es la situación en general del Ecuador.

 

El Ecuador es un país de aproximadamente 17 millones de habitantes. Su capital es la ciudad de Quito y es la sede de la Asamblea Nacional. La Asamblea Nacional está conformada por 137 miembros de la Asamblea, con representantes de cada una de las 24 provincias de nuestro país.

 

Está conformado por un Consejo de Administración Legislativa, que está formado por siete representantes, siendo el principal nuestro Presidente de la Asamblea, que es el ingeniero César Vitar.

 

Para no distorsionar, voy a tratar de desactivar la presentación, la visualización realmente no nos ayuda para nada, vamos a tratar de ir hacia esta otra pantalla, me conforman si tal vez la visualización ahora es mejor.

 

PUBLIO RIVERA RIVAS: Adelante, es correcto.

 

CLAUDIO PRIETO: Perfecto, disculpa, igual que Miguel, habitualmente trabajamos en Zoom, acá en Ecuador también y con WebEx estamos teniendo un poco de complicaciones.

 

Entonces, regresando un poco al contexto del Ecuador, esta es la situación de la Asamblea y finalmente los 137 asambleístas se agrupan en 13 comisiones especializadas, que son las que hacen el tratamiento específico de los proyectos de ley en su ámbito de especialidad.

 

Es o que empezamos justamente de manera imprevista yd e emergencia, a tratar de mantener este trabajo parlamentario, porque es muy importante para cada uno de nuestros países y a pesar de que lo hicimos en muy corto tiempo, realmente aquí hemos resumido cuáles son las cuestiones básicas que toca analizar y obviamente mucho en contexto y en acuerdo con lo que ha expresado Miguel Landeros de Chile.


Lo básico, lo principal es la viabilidad legal. Si legalmente existe un impedimento a que las sesiones sean virtuales o existe algún tema muy puntual de que cite un esquema presencial o un mecanismo físico de organización de sesiones o de trabajo parlamentario, pues eso es un impedimento grave para efectuar esta transformación.

 

En nuestro caso no se encontró ninguna limitación específica que impida que este trabajo, que esta gestión parlamentaria pueda llevarse en el ámbito virtual, en el ámbito digital, pero sí fue necesario complementar.

 

Es decir, como todos conocemos en el ámbito público, sólo se puede hacer lo que está prescrito. En la normativa de ningún país estuvo escrito de manera formal o muy completo que las sesiones puedan ser en el ámbito virtual, en nuestro caso no lo estaba, no habíamos tenido la oportunidad siquiera de hacer una reunión de prueba de este estilo.

 

Es por ello que a través del Consejo de Administración Legislativa se estableció un reglamento y unos procedimientos, unas instrucciones de cómo llevar a cabo estas sesiones virtuales y, sobre todo, de cómo en lazar a los procedimientos que ya estaban establecidos, es decir, darles una extensión a que esos procedimientos podían ejecutarse también de manera remota, de manera telemática.

 

Con este tema y, sobre todo, sustentados en una justificación, finalmente para hacer una modificación una emisión de normativa interna, se requiere una justificación.

 

En nuestro caso puntual se utilizó el Decreto de Emergencia, el estado de Excepción. En base a esto, también la Constitución acá, en el Ecuador, provee mecanismos especiales para algunos procesos.

 

Con estas bases se construyó, se apuntaló este reglamento de operación y se empezó ya propiamente la implementación en el ámbito administrativo y tecnológico.

 

Esto, pues sí pasar por alto y que obviamente nuestro Presidente ha sido el principal gestor, la viabilidad política.

 

Es decir, conseguir ese consenso entre todos los entes políticos y sociales que están representados en los senadores, en las cámaras o en las asambleas, de que efectivamente haya un compromiso por continuar este trabajo legislativo o parlamentario.

 

En nuestro caso particular, creo que fue unánime ese consenso porque era necesario mantener el trabajo legislativo, el trabajo parlamentario y realmente no fue un impedimento, no hubo oposición de actores políticos sociales a que esto pueda realizarse.

 

Y obviamente con un liderazgo adecuado por parte de las autoridades de la Asamblea Nacional pues se logró ese apoyo y se logró la participación, sobre todo de los miembros de nuestra Asamblea Nacional en este proceso.

 

Pues como experiencia, o como comentario general, en las reuniones presenciales no teníamos por lo general más allá del 90 por ciento de quórums, pero en estas sesiones virtuales tenemos el 98 por ciento de quórum y a veces el 100 por ciento de quórum. Es decir, sí es una participación mucho más activa de los miembros del Parlamento, miembros de la Asamblea.

 

Y, finalmente, está la viabilidad tecnológica. La viabilidad tecnológica obviamente tiene que ver con, como casi en todos los casos, con la situación particular de cada institución, en este caso de los parlamentos, cada parlamento tiene distinto grado de implementaciones tecnológicas, distintas herramientas, distintas tecnologías y marcas en general.

 

Pues aquí lo que se hizo es justamente, como mencionaba también, Miguel, buscar la compatibilidad de herramientas, buscar herramientas que sean mucho más adecuadas a nuestro entorno informático, a nuestro entorno operacional y también herramientas que sean accesibles, y hablamos accesibles en el sentido de que no sean muy costosas, o que sus p4ocesos de adquisición sean muy largos, porque eso obviamente ya dilata el proceso de implementación.

 

Nosotros, particularmente por nuestra estructura, optamos por herramientas por lo general de software libre o de herramientas de bajo costo, que nos permitieron adquirirlas muy rápidamente, en algunos casos pues descargar algunas opciones de la nube, ajustarlas a nuestras necesidades, con el departamento de Tecnología de nuestra institución y dar una solución más o menos rápida a este reto que nos puso la pandemia.

 

Entonces, pues en la actividad tecnológica mucho depende de con qué se cuenta, pero herramientas, como pudimos nosotros palpar, herramientas tecnológicas disponibles hay muchos, de distinto tipo y realmente yo creo que eso se va a solucionar, de alguna manera se soluciona.

 

Creo que lo principal es el consenso político, la viabilidad legal y, en lo tecnológico, creo que siempre hay una solución. Tal vez soy muy optimista porque soy del ámbito técnico.

 

Bueno, y aquí queríamos resumir cuáles fueron los pasos, la reacción que tuvo ante la emergencia propiamente la Asamblea Nacional del Ecuador.

 

Puntualmente, el 16 de marzo se decretó la emergencia sanitaria. Eso pues habilitó el Estado de excepción, se restringió la movilidad y realmente casi todos nos quedamos congelados en nuestras casas y nos movimos inicialmente únicamente para las reuniones de emergencia, como era programar, hacer el plan para establecer este trabajo parlamentario.

 

Lo primero que se apuntaló o que se definió como objetivo en la Asamblea Nacional era poder hacer las reuniones. Una sesión creo que es un tema más complicado, pero al menos tener unas reuniones de coordinación por medios telemáticos. Es por eso que rápidamente se buscó una herramienta, se decidió por Zoom.

 

A través de esta herramienta Zoom empezamos los primeros grupos de coordinación, los asambleístas se encontraban en territorio, que se logró este consenso y finalmente se aprobó el reglamento de las sesiones virtuales y teletrabajo en la Asamblea Nacional del Ecuador, esto el 19 de marzo, a tres días de decretada la emergencia.

 

Finalmente, se avanzó ya en implantar esta herramienta, esta aplicación Zoom para ya utilizarla formalmente, no sólo por la sesión del Pleno sino también por las comisiones. Empezamos realmente primero en una Comisión, hacer las pruebas de conexión, hacer la capacitación remota.

 

Como todos se encontraban en sus domicilios, en sus lugares habituales de residencia, pues no teníamos la posibilidad de hacer capacitación presencial, se designó un equipo de 10 técnicos nuestros de nuestro staff técnico, para que sean los soportes directos de cada asambleísta.

 

Se dividieron más o menos 13 asambleístas por cada técnico para que puedan estar de manera dedicada, para brindarles todo el asesoramiento, la capacitación técnica para usar estas herramientas y, sobre todo, para configurar los equipos.

 

Tal vez me olvidé destacar que en la viabilidad técnica un asunto muy importante es la disponibilidad de conexión y la disponibilidad de equipos.

 

En nuestro caso, la disponibilidad de conexión a Internet es bastante buena a nivel del Ecuador, sobre todo en las cabeceras provinciales.

 

En cuanto a equipamiento, realmente los asambleístas o todos lo tenían, porque muchos de sus equipos estaban en sus oficinas de la Ciudad de Quito y no lo llevaron en su receso legislativo.

 

Muchos asambleístas no contaban con computadoras, con tablets o teléfonos, entonces buscamos una solución, tanto Zoom como otras herramientas, son compatibles no sólo con computadoras de escritorio o laptop, son compatibles con tablets o con teléfonos, y eso obviamente hace más accesible el asunto de poder conectarse a la reunión.

 

Tenemos muchos asambleístas al momento todavía que se conectan por teléfono al Zoom y tienen otra computadora para conectarse a nuestro sistema de curul electrónica, que es lo que estamos viendo a continuación.

 

Aquí quería destacar justamente este apoyo técnico que requieren, sobre todo por el nivel de alfabetismo digital, que es algo que tal vez olvidé mencionar en la viabilidad tecnológica. Tiene que ver con la conectividad, equipamiento, el alfabetismo digital de cada uno de los miembros de estas sesiones, de los miembros del parlamento.

 

No todos, creo que cada parlamento, cada Senado agrupa a personas de distinto nivel de alfabetismo digital, de distinta edad y de distinta afinidad con las herramientas informáticas; es por ello que se necesita un apoyo que les guíe en estos pasos, a unos con mayor detalle, a otros con menor detalle, para lograr que efectivamente se conecten y participen a esta sesión.

 

Avanzando en nuestro caso, una vez que logramos conectarnos virtualmente en una reunión a través del zoom, el siguiente paso era poder acceder a las herramientas propias de las sesiones.

 

En el caso de la Asamblea Nacional de Ecuador contamos con un sistema que se llama Curul Electrónica, el cual gestiona el desarrollo de las sesiones del Pleno; tanto en lo que es el ingreso, la autenticación de cada asambleísta en lo que es la toma del quórum, en lo que es el registro de votación, las votaciones, las intervenciones, es decir, todo lo que sucede en una sesión.

 

Controla todo lo que es el tema a tratar y los distintos puntos que están contemplados en el Orden del Día.

 

Lo que buscamos fue justamente un mecanismo que nos permita acceder a este mismo sistema, porque este sistema estaba ya hasta regulado dentro de los procedimientos de la Asamblea, no podíamos usar otro; y lo que buscamos es una forma de cómo ellos podían acceder a este mecanismo.

 

Es por ello que virtualizamos en nuestro sistema, este sistema data del año 2012, no es muy nuevo, es por ello que tenía ciertas limitaciones, no es un sistema web, por lo cual tuvimos que virtualizarlo e instalar una herramienta de acceso remoto; de tal manera que el asambleísta, en su equipo de su casa o de su oficina, lo que hace es entrar de manera remota a su equipo virtual que está en el edificio de la Asamblea Nacional, y participa como si estuviera de manera presencial.

 

Esto nos facilitó completamente la gestión y sobre todo la transparencia, que creo que es muy importante que este proceso debe respetar los principios en general de los parlamentos, pero sobre todo las recomendaciones del parlamento abierto, la transparencia, el acceso a la información, la participación, manteniendo los mecanismos ya establecidos aseguramos esos principios.

 

Y, finalmente, se necesita todo un apoyo de gestión documental. Realmente en la práctica los parlamentos trabajan con información escrita, con documentos, ese es su principal insumo donde se plasman todas las propuestas, todas las ideas; entonces habilitar un sistema de gestión documental en línea es fundamental.

 

En nuestro caso, habíamos tenido un avance justo antes de la pandemia, habíamos implementado un sistema de gestión documental con firma electrónica, lo cual permitía ya no sólo mover documentos físicos sino documentos en vía electrónica, y para la pandemia fue ideal o nos facilitó mucho el intercambio, la emisión de documentos en formato digital con firma electrónica.

 

Al inicio de la pandemia no teníamos más de 20 asambleístas con firma electrónica, pero dado a esta crisis y la necesidad, ahora ya contamos casi con el cien por ciento de asambleístas con firma electrónica; adicional a todo el equipo administrativo que tiene que participar en este proceso, pues empezando por el tema de la Secretaría General.

 

Entonces, estos son los componentes que se tuvieron que habilitar para que empiece a funcionar el teletrabajo parlamentario en la Asamblea Nacional de Ecuador. Nuestro hito principal fue que el 24 de marzo ya tuvimos nuestra primera sesión plenaria virtual.

 

Es decir, a una semana de decretada la emergencia, ya logramos hacer esta primera sesión plenaria virtual. Y, a la fecha, mejor dicho a cien días de iniciada la pandemia, este es el resultado del trabajo parlamentario en la Asamblea Nacional del Ecuador, que ha tenido 34 sesiones plenarias en estos cien días, ha habido 52 votaciones electrónicas, en ellas han participado 705, ha habido 705 intervenciones de los asambleístas; y en comisiones hemos tenido 329 sesiones de las comisiones especializadas.

 

Es decir, refleja claramente que el trabajo parlamentario no ha parado, y más bien como lo ha manifestado nuestro presidente en algunas entrevistas, se tiene un 40 por ciento más de trabajo de lo que se hacía habitualmente. Es decir, este mecanismo de teletrabajo virtual ha potenciado o ha facilitado las capacidades del tratamiento y se ha incrementado la productividad –hablemos así– de la gestión parlamentaria.

 

Con todo esto, en este periodo de cien días, se logró aprobar cinco leyes muy importantes para nuestro país. Esto está cortado al 30 junio de 2019, que se cumplieron cien días de teletrabajo en la Asamblea Nacional.

 

Con base en ello, unas ideas, unos comentarios que creemos es importante tomar en consideración. Primero, como les decía, la transparencia.

 

En nuestro caso, aquí les estoy mostrando una pantalla de cómo se ven las transmisiones en vivo que se hacen mediante Facebook y mediante televisión tradicional. En la cual, por ejemplo aquí estamos viendo una votación; las votaciones son en vivo, lo que está por debajo es nuestro sistema de curul electrónica, es un módulo de votación, de voto electrónico, y en línea se va viendo cómo sufraga cada uno, como vota cada uno de nuestros asambleístas.

 

Al lado derecho están las imágenes de los asambleístas. Efectivamente, a veces los asambleístas no muestran su video, muestran alguna imagen; hay ciertas cuestiones puntuales que considerar, pero finamente todo esto se está transmitiendo en vivo a la ciudadanía, para garantizar la transparencia de los procesos.

 

Es fundamental fortalecer los canales de información. En el caso de nuestro país, de nuestra asamblea, se ha mantenido todos los canales de información y se los ha potenciado, porque son los únicos mecanismos que tienen los ciudadanos de informarse, pues ya no pueden concurrir presencialmente al parlamento.

 

Es por ello que tanto la aplicación, Asamblea de Ecuador, que trae información en línea de las sesiones, de las votaciones, como todas las redes sociales y los medios tradicionales, ha sido un mecanismo muy importante para que la ciudadanía conozca el trabajo que continúa realizando y pueda participar también mediante estos mecanismos, ya que de manera presencial no necesariamente lo ha podido realizar.

 

En cuanto a las condiciones, igualmente ellos interactúan con los actores sociales, con la ciudadanía, a través de las conexiones respectivas en cada una de ellas.

 

Y finalmente, para terminar y no cansarles mucho, aquí tenemos un pequeño bosquejo de ciertas lecciones aprendidas en esta experiencia de implementación en la Asamblea Nacional del Ecuador.

 

Lo principal fue reconocer que efectivamente esto es una dificultad operativa extrema. Nadie creo que lo tenía pensado a este nivel y realmente nos trastocó muchos planes.

 

Pero también ha sido una gran oportunidad de modernización, sobre todo en el ámbito informático de la gestión parlamentaria. Muchos estábamos, sobre todo muchos asambleístas eran muy renuentes al ámbito, tal vez no compartían mucho esto del Parlamento Electrónico, pero con esto nos tocó, se puede decir obligados a ir a hacia estos aspectos.

 

Lo que mencionaba, que indistintamente de cualquier implementación, siempre hay que mantener los principios del Parlamento Abierto, la transparencia, el acceso a la información, la participación ciudadana y al rendición de cuentas, a través de los mecanismos, en este caso digitales, que se pueden implementar.

 

Mencionar que el trabajo parlamentario pues no sólo es la reunión o la conexión virtual en la cual se puedan compartir ideas, sino que va acompañado de un montón de herramientas, tanto de la coordinación de las sesiones, del registro de votaciones, pero también de todos estos sistemas de oficina virtual que se requieren para que los documentos mantengan la legalidad, la conservación y sean adecuadamente y oportunamente procesados.

 

Todo este proceso de digitalización pues, como es obvio, debe estar claramente sostenido, apuntalado en la normativa del país, la normativa institucional claramente, para que no yaya luego posteriores reclamos, objeciones o problemas legales en las actuaciones que se han realizado durante este periodo.

 

El liderazgo político, como mencionaba, pues es fundamental para llevar a cabo este proceso con la agilidad que requiere cada uno de los países.

 

Y en cuanto a las aplicaciones, como les mencionaba, pues hay muchas, de distinto tipo y que en algunos casos se pueden utilizar los presupuestos económicos requeridos.

 

Esto, como ideas principales de este tema, igualmente quedamos a disposición para cualquier inquietud y, sobre todo, agradecerles por su atención y la oportunidad de participar en esta importante reunión.

 

Muchas gracias.