* Palabras del senador Emilio Gamboa Patrón, Coordinador del Grupo Parlamentario del PRI y presidente de la Junta de Coordinación Política, con motivo del Informe de Actividades y Resultados de la Mesa Directiva, correspondiente al Tercer Año de la LXII Legislatura, efectuado en el patio central de la vieja casona de Xicoténcatl, el martes 18 de agosto de 2015.

Buenos días tengan todos ustedes, el Senado de la República se viste de gala el día de hoy, para escuchar el informe de nuestro presidente de la Mesa Directiva, el senador Barbosa.

Quisiera empezar en este patio de la casona de Xicoténcatl, reconociendo a usted y a la Mesa Directiva, que lo hayan hecho posible en este bellísimo patio, que nos llena de orgullo a mis compañeras senadoras y a mis compañeros senadores. ¡Felicidades!

Permítanme no repetir a todo el presídium, ni a todos los asistentes, pero sí con un enorme respeto saludo al presidente del Senado de la República, al senador Miguel Barbosa Huerta; al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al ministro Luis María Aguilar Morales; al licenciado Miguel Ángel Osorio Chong, representante personal del ciudadano Presidente de la República, Enrique Peña Nieto; del doctor Luis Videgaray Caso, secretario de Hacienda; del doctor José Antonio Meade, secretario de Relaciones Exteriores; del Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera; del presidente de la Conago, gobernador del Estado de México, el doctor Eruviel Ávila; del gobernador Rafael Moreno Valle; de mis compañeros coordinadores de los grupos parlamentarios; del senador Fernando Herrera Ávila, presidente también del Instituto Belisario Domínguez, del senador Carlos Alberto Puente Salas.

Nos llena de orgullo –de verdad- ver este presídium y ver la convocatoria que tiene el Senado de la Republica. Un cuerpo colegiado, plural, democrático, que ha mostrado a través de tres años dos cosas fundamentales, que podemos trabajar privilegiando la política, el diálogo, la negociación, la concertación y los acuerdos, y que a través de tres años aquí se dijo lo que hizo este último año el Senado, pero en la presidencia de Ernesto Cordero, aquí presente, tuvimos muy buenos resultados; también, Ernesto, muchas felicidades.

En la presidencia del senador –hoy con licencia- Raúl Cervantes, también tuvimos muchísimos buenos resultados para el Senado, pero sobre todo para nuestro país.

El ejercicio democrático y republicano de la rendición de cuentas, es uno de los postulados que la ciudadanía demanda de los actores de la vida pública nacional.

En la dinámica de una sociedad exigente y cada vez más enterada debemos –y es nuestra obligación- informar de manera precisa y oportuna sobre el quehacer político.

Celebro este acto de gran relevancia con motivo de la presentación del informe de labores de la Mesa Directiva y de su presidente, correspondiente al tercer año de la LXII Legislatura.

Uno de los más altos valores que considero tiene nuestro país, es que identificamos la pluralidad mexicana en su diversidad de pensamiento, como usufructo de la riqueza cultural, histórica y social de nuestro pueblo, y esto pasa todos los días en el Senado de la República.

Dice Miguel Barbosa: “una sociedad democrática se construye con debate abierto y plural, el Senado encarna el equilibrio del pacto federal, es instancia de ponderación y factor de cohesión en nuestro querido México”.

El principio democrático se vive en la integración de los órganos de dirección del Senado de la República.

Las tres principales fuerzas políticas en este Senado han ejercido ya su presidencia; en estos tres años se estimuló y respetó la tarea legislativa del Senado de la República.

El Senado tiene una Mesa Directiva sólida y legítima, reconocida por su autoridad, liderazgo y por su diálogo constructivo con los 128 senadores.

Déjenme hacerle un reconocimiento a la Mesa Directiva: a su presidente, el senador Barbosa; al senador José Rosas Aispuro, vicepresidente; al senador Arturo Zamora, vicepresidente; al senador Luis Sánchez, vicepresidente; a la senadora Martha Palafox, secretaria; a la senadora María Lucero Saldaña, secretaria; a Rosa Adriana Díaz Lizama, secretaria; a la senadora Lilia Guadalupe Merodio, secretaria; a María Elena Barrera, secretaria.

Para todos ustedes el reconocimiento de mis compañeras y compañeros senadores aquí presentes.

Saludo con cariño y respeto también, a los diputados federales que el día de hoy se encuentran, a los diputados locales, a presidentes municipales y a un gobernador electo salido del Senado, a Francisco Domínguez, gobernador electo de Querétaro. Bienvenido, Francisco.

La gestión del tercer año está marcada por una característica, la presidencia de una fuerza política de izquierda, respetable, con la que hemos podido llevar un diálogo serio, maduro y siempre privilegiando que a México le vaya bien.

Decía don Jesús Reyes Heroles: “el país requiere de una sana oposición, se necesita de quienes piensan distinto a nosotros, se necesita que participen en la vida política nacional”, como actualmente se lleva a cabo.

Estamos llamados a generar coincidencias en lo fundamental, en un solo compromiso, un México mejor y un México con menor desigualdad.

En la persona de mi amigo, el senador Miguel Barbosa, la izquierda ha desempeñado la tarea de conducir los trabajos con sentido de responsabilidad, objetividad e imparcialidad.

El talento y características personales del presidente Barbosa, han marcado un estilo distinto, creativo, firme y conciliador.

Refería Max Weber, que “el político debe tener amor apasionado por su causa, ética de su responsabilidad y mesura en sus actuaciones”.

En Miguel Barbosa encontramos al legislador siempre dispuesto a escuchar, pero también decidido a defender su razón, a defender su pensamiento; pero también, lo digo de verdad, a impulsar y no detener el desarrollo de nuestro país.

Ha mostrado congruencia, solvencia ética y principios. Es un político de vanguardia, serio y experimentado.

Con alta visión de Estado ha sabido mantener una cercanía muy respetuosa con todas y todos sus compañeros; una relación también, muy respetuosa, con los Poderes de la Unión, con el Ejecutivo y con el Judicial, y sin duda alguna, una relación respetuosa con las entidades federativas.

Afrontó la delicada tarea de representar a las 127 compañeras y compañeros que tiene. Ha participado en dos visitas de Estado a invitación del Presidente Enrique Peña Nieto, muestra del papel relevante que tiene el Poder Legislativo en el sistema político mexicano y también el rol que juega el Senado de la República en la política exterior de nuestro país.

El presidente Miguel Barbosa confirmó que la pluralidad política no es un obstáculo para construir y concretar grandes e importantes acuerdos. Como él mismo lo señaló, las grandes reformas que México requiere, nos obligan a los partidos políticos, a lograr un acuerdo nacional que vaya más allá de formar mayorías simples entre grupos parlamentarios, así lo hemos hecho en la Cámara de Senadores.

La destacada labor del senador Barbosa como presidente del Senado, será reconocida por su institucionalidad republicana y profesionalismo, por su amor y compromiso, sobre todo con nuestro país.

Concluye hoy una importante etapa, venir a escuchar su informe. El próximo 31 de agosto estamos convocados los senadores y las senadoras de la República a elegir la nueva Mesa Directiva, y estoy seguro que el senador Barbosa se va con la conciencia tranquila, con el deber cumplido; un hombre que defendió ante todo a México, a las instituciones, que representó muy dignamente al Senado mexicano.

Esta –lo digo de verdad, hace 10 años estaba en esta casona de Xicoténcatl como senador de la República, una buena legislatura, aquí hay compañeros nuestros-, lo puedo decir con enorme seguridad, esta es una legislatura histórica y estoy seguro la más productiva del México contemporáneo.

Algunas palabras definen su legado, presidente, acuerdos y resultados, diálogo y respeto. Fueron largas horas y duros debates, pero siempre imperó la disposición de escuchar al otro.

A través del diálogo y la concertación aprobamos las reformas estructurales que marcan la transformación de México y que pelea todos los días por ella, el Presidente Peña Nieto.

Sin importar el partido o ideología de las personas que ocupen la dirección de los órganos de Estado, se antepone el bienestar de México por encima de cualquier cosa.

Sigamos haciendo de la política nuestra mejor herramienta por un México mejor.

Sin duda alguna, senador Barbosa, puede tener la seguridad del deber cumplido, sea por el bien del Senado y de México; esto nos llena de orgullo a los que formamos parte de esta LXII Legislatura.

Seguimos juntos los tres Poderes trabajando, para que la desigualdad disminuya entre nosotros, la justicia se aplique sin distingos y la administración pública sea cada día más eficiente, más transparente y esté al servicio de todos los mexicanos por igual.

En nombre de la Junta de Coordinación Política, nuestro profundo reconocimiento al ser humano, al político, al hombre serio que fungió con enorme esfuerzo para llevar por muy buen camino esta presidencia del Senado.

¡Felicidades, senador Barbosa!

¡Felicidades, compañeras senadoras y compañeros senadores de la Mesa Directiva!

Muchas gracias.

---000---

Â