La Segunda Comisión de la Permanente votó a favor de un punto de acuerdo presentado por senadores de Acción Nacional, mediante el cual proponen que la Comisión Permanente manifieste su beneplácito por la adopción del Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares y reconozca la labor que hizo el Estado Mexicano para su promoción.

Asimismo, se avaló la propuesta de hacer un llamado a las dependencias competentes del Gobierno federal, para que continúen con las acciones necesarias a efecto de que las disposiciones de dicho tratado formen parte de nuestro ordenamiento jurídico.

De acuerdo con la propuesta de las senadoras Mariana Gómez del Campo Gurza, Laura Rojas Hernández y del senador Daniel Ávila Ruiz, “el pasado 7 de julio de 2017 la ONU aprobó un tratado que prohíbe el desarrollo, las pruebas, producción, adquisición y posesión de arsenal o explosivos nucleares. Se trata de un instrumento jurídicamente vinculante para prohibir dicho armamento y alcanzar su eventual eliminación total”.

El tratado se abrirá a la firma a partir del 20 de septiembre de 2017 y entrará en vigor 90 días después de que 50 naciones lo hayan ratificado, agrega el dictamen.

Al hacer uso de la palabra, la senadora Rojas Hernández, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores Organismos Internacionales, destacó el “enorme consenso” de todas las fuerzas políticas en el Congreso de la Unión respecto a este tratado, ya que “es un tema en el que México históricamente ha trabajado en los órganos multilaterales, especialmente en la Organización de las Naciones Unidas”, y el Poder Legislativo hizo un gran acompañamiento.

En otro asunto, la Comisión también aprobó una propuesta de los senadores Gómez del Campo Gurza y Ávila Ruiz por el que la Comisión Permanente “se congratula por la ratificación del compromiso de las Naciones participantes en la XII Cumbre del G20, con excepción de los Estados Unidos, respecto al combate al cambio climático y el libre comercio para hacer frente a los retos económicos globales y contribuir a la prosperidad y el bienestar de todos los pueblos”.

Los dictámenes avalados fueron turnados al pleno de la Permanente, para su respectiva discusión y votación.

 

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