La senadora panista Silvia Guadalupe Garza Galván hizo un llamado a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para que continúen la actualización de los parámetros y límites sobre la contaminación en las descargas de aguas residuales industriales en los cuerpos hídricos del país, en virtud de que han quedado rezagados frente a las actuales necesidades de protección ambiental.
Además, planteó incluir en dichos registros los análisis de toxicidad que puedan identificar aquellas descargas que introducen sustancias tóxicas a los ríos, mares y lagos, y que no son detectadas por los análisis convencionales.
De acuerdo con la propuesta de la presidenta de la Comisión Especial de Cambio Climático del Senado de la República, para controlar las descargas que se vierten sobre aguas nacionales, nuestro país cuenta con la NOM-001-SEMARNAT-1996.
“Esta Norma Oficial Mexicana establece los límites máximos permisibles de contaminantes en las descargas de aguas residuales en aguas y bienes nacionales, con el objetivo de proteger su calidad y adecuar su uso, así como la obligación para los responsables de las descargas de aguas residuales vertidas a aguas y bienes nacionales”, explica.
Sin embargo, debido a que la última actualización a dicha normativa se hizo en el año 2001, “a la fecha se ha identificado la necesidad de revisar los parámetros y límites que caracterizan a la contaminación en las descargas de aguas residuales, en virtud de que han quedado rezagados frente a las necesidades de protección de los cuerpos de agua del país; respecto a normas internacionales; a las demandas señaladas en acuerdos internacionales y frente a otros ordenamientos nacionales como la Ley Federal de Derechos y las Declaratorias de Clasificación de los Cuerpos de Agua”.
Para la legisladora de Acción Nacional, la industria en nuestro país evoluciona constantemente, mejorando sus procesos y tecnologías. No obstante, los niveles de producción de cuando se creó la NOM-001-SEMARNAT-1996 no son los mismos y tampoco se contaba con las buenas prácticas de producción que tenemos hoy en día, por lo que es necesario que la norma se actualice para que logre controlar la contaminación industrial hacia los cuerpos acuíferos en México.
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