La Coordinadora del Grupo Parlamentaria del PRD en el Senado, Dolores Padierna presentó un punto de acuerdo para que la Comisión Permanente solicite al Director General de Petróleos Mexicanos y al titular de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente un informe detallado sobre las causas y los costos que ocasionó el incendio en la refinería de Salina Cruz.
En el documento, la senadora perredista refiere que el pasado 14 de junio se registró un incendio en la casa de bombas de la Refinería de Salina Cruz, que fue sofocado hasta la madrugada del viernes 16. En un comunicada de Pemex se dice que “Derivado de las fuertes lluvias en la zona provocadas por la tormenta tropical Calvin, diversas áreas de la Refinería en Salina Cruz resultaron inundadas. Por ello, se arrancó el procedimiento de paro seguro de operaciones. Las inundaciones tuvieron como consecuencia el desbordamiento de presas de residuos y el derramamiento de aceite. Preliminarmente, este producto alcanzó un punto de ignición resultado de las afectaciones por la inundación, desatando un incendio.”
Padierna Luna informó que de las 6 refinerías que existen en el país, la de Salina Cruz es la segunda más importante solo superada por la de Tula. En abril de 2017 produjo en 22.1% del total de petrolíferos del país.
Sin embargo, dijo la legisladora, al igual que todas las refinerías, la de Salina Cruz ha venido reduciendo su producción, a partir de la reforma energética. Mientras que, entre 2010 y 2014, la producción se mantuvo más o menos estable, entre 2014 y abril de 2017 cayó 20.2% y con el incendio es muy probable que se reduzca aún más.
“Este tipo de accidentes vienen a complicar aún más la precaria situación en que se ha puesto a la industria de transformación industrial del sector petrolero. No sólo no se ha incrementado la capacidad de producción, sino que la disponible se usa cada vez menos. Mientras en 2010 se utilizó el 77.5% en 2016 ya sólo se usó el 56.9%, caída que se aceleró a raíz de la reforma energética y que se explica por la obsolescencia de las refinerías, falta de mantenimiento y accidentes constantes, lo que a su vez ha ocasionado una dependencia creciente de las importaciones”, advirtió.
A consideración de la coordinadora parlamentaria, ademas de la invaluable pérdida que significa la muerte de un trabajador, el incendio tendrá un costo económico para el país tanto por los daños materiales que ocasionó como por la pérdida de producción. Adicionalmente también provocó costos ambientales.
“En este sentido es una responsabilidad ineludible de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente determinar con toda precisión las causas que provocaron el incendio y todos los costos que ocasionó. Así mismo, en el caso de que se determinen causas ajenas a las lluvias, como lo ha manifestado Pemex, se haga el fincamiento de responsabilidades que corresponda”, concluyo.
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