A fin de hacer más efectiva la revocación de mandato y reconocer un poder propio de la ciudadanía, el senador del PRD, Zoé Robledo, propuso facultar al pueblo para que pueda deponer de su cargo a funcionarios que ejerzan un cargo de representación popular.

Al presentar una iniciativa ante el pleno del Senado de la República, el legislador chiapaneco destacó que hoy México vive una crisis de irrespeto a los derechos humanos, inseguridad, ineficacia en la procuración de justicia, debilitamiento de las instituciones y falta de credibilidad hacia la clase política.
En ese sentido consideró necesario “incrementar la capacidad de respuesta del gobierno a las preguntas de la sociedad, que la justicia le haga efectivamente frente a la barbarie, y que la sensibilidad y eficacia gubernamental estén a la altura del reclamo y la indignación de la gente”.
Por ello, precisó que la revocación de mandato puede ser un instrumento de profunda democracia política para que no se siga “condenando a los ciudadanos a tolerar gobiernos ineficientes y corruptos, e incluso gobiernos criminales”.
Zoé Robledo afirmó que con esta medida quienes ejerzan un cargo de representación estarán permanentemente observados y “la confianza con que contamos y las atribuciones que ejercemos pueden ser reclamadas y suspendidas por los ciudadanos ante cualquier falta ante cualquier omisión o ante cualquier abuso”.
El senador por Chiapas reiteró que los hechos de Iguala demuestran muchas cosas que están mal en el diseño institucional de nuestro país y no deben prevalecer las respuestas tradicionales solamente para sortear las crisis.
“Es momento de dar muestra de voluntad política para que se acerque esa brecha que está existiendo entre los ciudadanos y las instituciones; y aquí hay dos caminos muy claros: uno es pensar y actuar con cálculo político; y el otro, es ajustarnos a los reclamos de la sociedad”, concluyó.

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