Número-581

• Asegurar el suministro de petróleo e implementar un sistema de información internacional sobre el mercado, entre sus objetivos.

La Cámara de Senadores aprobó el “Acuerdo sobre un Programa Internacional de Energía”, que tiene como objetivos desarrollar un nivel de suficiencia de suministro de petróleo en casos de emergencia e implementar un sistema de información sobre el mercado mundial de este recurso.

El convenio, elaborado en París el 18 de noviembre de 1974 y enmendado el 9 de mayo de 2014, también busca coordinar políticas en materia de seguridad energética, desarrollo económico y protección al medio ambiente.

En el dictamen, que se avaló con 68 votos a favor y 16 en contra, se explica que el Programa se efectúa por medio de la Agencia Internacional de Energía (AIE), misma que efectuará revisiones periódicas sobre el uso de los recursos energéticos.

La membresía de México al Acuerdo, y en consecuencia a la AIE, acota el documento, le brindará beneficios tangibles como el derecho a participar en la Junta de Gobierno, a través de la cual incidirá en la adopción y diseño de políticas en la materia.

Además, nuestro país tendrá acceso a bases de datos específicas, y a la cooperación, asesoría y colaboración en caso de emergencias energéticas.

La asistencia técnica de los expertos de la Agencia, se agrega, favorecerá el libre comercio, el intercambio de tecnología, la recepción de recomendaciones en materia de política energética y la seguridad al mercado energético.

Al hablar en contra del dictamen, el senador Isidro Pedraza Chávez, del Grupo Parlamentario del PRD, afirmó que “el tratado invade nuestra soberanía en el manejo de información estratégica para la seguridad energética”.

El proceso para implementar la reforma energética en México, dijo, “ha sido apabullante y continua con acuerdos” como éste. Este año, acotó, se experimentó un incremento de los precios de gasolina, diésel y gas doméstico, y esto ha significado un alto costo para la economía familiar.

Para el presidente de la Comisión de Energía, Salvador Vega Casillas, pertenecer a la Agencia Internacional de Energía permitirá a México contar con la asistencia técnica, “no la intervención”, de expertos de todos los países miembros, la protección al libre comercio y un ambiente seguro para las inversiones.

Adherirse a este organismo, dijo, beneficia a México, no compromete sus reservas; “la información que se tiene que transmitir está claramente estipulada en el convenio, no se trata de información clasificada y se trata de un mecanismo de cooperación”, asentó.

Por el Grupo Parlamentario del PT, la senadora Dolores Padierna Luna consideró que “es absolutamente negativo aprobar este tratado”, pues obliga a las naciones a mantener una reserva de petróleo suficiente para satisfacer, por 60 días, su consumo, sin recurrir a las importaciones, pero México es una nación productora de petróleo y sus reservas superan ese tiempo.

De lo que se trata, precisó, es de regular la demanda para que no se incrementen los precios de este combustible, pero ¿qué no estamos pasando una crisis por la reducción de los precios del petróleo’, cuestionó.

En la discusión del dictamen, también manifestaron su postura en contra del “Acuerdo sobre un Programa Internacional de Energía”, los senadores Luis Sánchez Jiménez, del PRD; David Monreal Ávila y Rabindranath Salazar Solorio, del PT.

Sánchez Jiménez aseveró que la decisión de aprobar el convenio constituye un viraje de México tras décadas de permanecer independiente tanto de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), como de la Agencia Internacional de Energía.

El dictamen se envió al Ejecutivo Federal.

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