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• Buscan parlamentarios de Asia-Pacífico nuevos acuerdos para la región.
• Senadora Gabriela Cuevas pide informes sobre negociación de yacimientos transfronterizos.

Una delegación de senadores mexicanos participa en la 23a sesión anual del Foro Parlamentario Asia-Pacífico (APPF), en la ciudad de Quito, Ecuador, donde se discuten cuatro ejes centrales sobre la situación regional e internacional: política y seguridad, economía, cooperación económica y trabajo en la región.
El APPF reúne a parlamentarios de la región que representan a más del 60 por ciento de la población mundial, a fin de realizar un ejercicio de reflexión que servirá de base para alcanzar nuevos acuerdos y construir un horizonte de entendimiento para responder a los desafíos de un mundo cada vez más complejo e interdependiente.
Además, este encuentro presenta también la oportunidad de hacer un seguimiento de las resoluciones adoptadas en la 22ª Reunión del APPF, realizada en Puerto Vallarta, México, en enero de 2014.
Durante la sesiones de este encuentro multilateral se destacó que el Estado ecuatoriano impulsa políticas de seguridad bajo el principio de protección del ser humano, promoción del bienestar, desarrollo, derechos y libertades fundamentales.
Solicita senadora Cuevas información sobre los acuerdos con EU, Cuba y Guatemala en relación a los Yacimientos Transfronterizos.
La senadora Gabriela Cuevas Barron, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, pidió a la Cancillería informar el curso que llevan las negociaciones con Estados Unidos sobre la exploración y la explotación de yacimientos transfronterizos continentales de hidrocarburos que se localizan en la denominada “Dona Oriental” del Golfo de México.
La senadora del PAN señaló que México y Estados Unidos cuentan con un Acuerdo Relativo a los Yacimientos Transfronterizos de Hidrocarburos en el Golfo de México, el cual resulta insuficiente porque sus disposiciones no aplican a los yacimientos que se encuentran dentro de las primeras 9 millas náuticas adyacentes al litoral, ni hidrocarburos que puedan existir a la frontera terrestre con los Estados Unidos.
Además, este tratado no cubre lo que se llama el “hoyo de dona oriental”, es decir, los hidrocarburos existentes en el polígono oriental del Golfo de México, que tiene una extensión aproximada de 20.000 km² y puede requerir un acuerdo tripartito entre México, Cuba y los Estados Unidos por la cercanía que tiene a los territorios de estos tres países.
Cuevas Barron expuso que existen yacimientos de hidrocarburos en la frontera sur de México: la plataforma Yucatán podría sumar reservas de hasta 3 mil 177 millones de barriles, mientras que la Cuenca Sierra Madre de Chiapas, Petén, 3 mil 826 millones, “esto, sin considerar el descubrimiento de un nuevo yacimiento petrolífero cerca del Río Hondo, en el Distrito de Orange Walk, Belice, limítrofe con Quintana Roo y Petén”.
Indicó que, de acuerdo a la Secretaría de Energía, ya se han iniciado negociaciones con Guatemala sobre un acuerdo en materia de yacimientos y que sería necesario firmar un instrumento para “la Dona Oriental” que se encuentra en la parte Este del Golfo de México.
Sin embargo, aclaró que el Senado de la República no ha recibido información al respecto, “es un tema que no sólo tiene importancia por tratarse de energéticos, sino porque incluso son de los temas donde sí se debe hablar de soberanía”.
Por ello, la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores insistió en que el Ejecutivo Federal debe aclarar si se han iniciado negociaciones con la República de Cuba y los Estados Unidos respecto a los hidrocarburos que se localizan en la denominada “Dona Oriental del Golfo de México”, y sobre las negociaciones que se están realizando con el Gobierno de Guatemala respecto al uso y aprovechamiento de yacimientos transfronterizos de hidrocarburos.
Nuevos objetivos de desarrollo deben lograr la inclusión social y reducir la desigualdad.
La Cámara de Senadores realizó el panel “La Agenda de Desarrollo Post 2015 y financiamiento para el desarrollo”, donde legisladores y embajadores consideraron que los nuevos objetivos de desarrollo deben ser universales y aplicables al conjunto de los Estados miembros de Naciones Unidas, con el fin de lograr la inclusión social y la reducción de la desigualdad.
El presidente del Senado de la República, Miguel Barbosa Huerta, dijo que esta Cámara mantiene una posición constructiva en la agenda internacional, “estamos activos en todos los temas y ámbitos de la competencia”.
Sostuvo que el Senado quiere tener mayor presencia en la toma de decisiones sobre política exterior, “que no solamente sea la instancia ante la cual se formaliza el nombramiento de embajadores y cónsules, sino que sea una instancia que contribuya a que la política exterior que México desarrolla sea aquella que se ajuste a los términos constitucionales”.
Recordó que en el mes de febrero, la Cámara de Senadores albergará un foro en materia de política exterior, con el fin de que embajadores y representantes diplomáticos de México ante el mundo brinden información que sirva a esta Cámara para generar insumos para la evaluación de esta actividad.
El senador Alejandro Encinas Rodríguez, del PRD, señaló que los objetivos para el desarrollo post 2015 podrán alcanzarse si Congreso y gobierno son capaces de elaborar indicadores puntuales para enfrentar retos como la inclusión social y la reducción de la desigualdad.
Dijo que debe trabajarse en cuatro aspectos: primero, asuntos de carácter económico global, regional y local para reducir la desigualdad; dos, equidad y combate a la pobreza; tres, desarrollo sustentable y medio ambiente; y cuatro, promover sociedades pacíficas e inclusivas para garantizar el acceso a la justicia.
La senadora Laura Angélica Rojas Hernández, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores Organismos Internacionales, reconoció el interés de la Presidencia del Senado de la República por los temas de política exterior y destacó la labor de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en los temas de la Agenda de Desarrollo Post 2015.
El embajador Juan Manuel Gómez Robledo, subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE, dijo que la agenda tiene un carácter universal y se busca que sea aplicable a los Estados miembro de la ONU.
Señaló que es necesario combatir las causas de la pobreza y la exclusión presentes en todas las sociedades. Comentó que para esta agenda existen 17 objetivos con 169 metas por cumplir, que se reflejarán en indicadores a definir en cada país.
En este panel también participaron Dionisio Pérez Jácome, representante Permanente de México ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE); Juan Manuel Valle Pereña, director ejecutivo de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo; y Jorge Montaño y Martínez, representante permanente de México ante la ONU.

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