La senadora Dolores Padierna Luna aseguró que a partir del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, la industria cinematográfica mexicana se ha enfrentado a condiciones de inequidad ante la presencia de inversionistas estadounidenses y canadienses que dominan los mercados mundiales de producción, distribución y exhibición de cine.

Más aún, apuntó el casi nulo apoyo en pantalla a las películas nacionales a favor de las producciones de Hollywood, las cuales se imponen en las pantallas a los espectadores a pesar de su baja calidad artística, técnica y de contenidos gracias a que suelen tener presupuestos de promoción que rebasan por mucho a los que reciben las producciones mexicanas.

En efecto, de acuerdo con datos del “Informe Panorama Audiovisual Iberoamericano 2013”, el año pasado sólo el 21 por ciento del total de estrenos exhibidos en las salas de cine en el país fueron películas nacionales, las cuales acapararon apenas el 5 por ciento de los 229.5 millones de espectadores y obtuvieron el 4.5 por ciento de una recaudación de 815.4 millones de dólares.

De esta manera, a fin de impulsar la industria cinematográfica nacional y establecer condiciones de mayor equidad y competitividad con respecto al cine estadounidense, la senadora presentó una iniciativa para reformar el artículo 19 de la Ley Federal de Cinematografía.

Así, se busca que los exhibidores reserven el diez por ciento del tiempo total de exhibición para la proyección de películas mexicanas. Igualmente, se establece que toda producción nacional permanecerá en salas por un periodo no inferior a tres semanas, dentro de los seis meses siguientes a la fecha en que sea inscrita en el Registro Público Correspondiente.

Lo anterior, aseguró Padierna Luna, permitiría que las películas mexicanas fueran promocionadas por el propio público y contaran con la perspectiva de ver aumentado su tiempo en pantalla, lo cual incentivaría a su vez a una industria que no sólo se hace evidente en su producto final en pantalla, sino que produce empleos en cada una de las etapas en las que dicho producto se mueve.

Después de todo, señaló la legisladora, “el buen cine mexicano depende mucho de los espacios que se consigan abrir para su exhibición”.

La iniciativa fue turnada a la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, así como a la Comisión de Estudios Legislativos.

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