El senador Ernesto Cordero Arroyo aseguró que en México no puede haber reformas económicas o sociales si antes no hay un andamiaje democrático que permita al país avanzar de manera institucional y republicana en su aparato político.

Al inaugurar el seminario internacional Situación Actual y Perspectivas de los Centros de Investigación Parlamentarios, el presidente del Senado afirmó que nuestro país está preparado para la reelección legislativa, ya que a través de esta figura es como se fortalecerá al Congreso, la democracia y permitirá avanzar con mayor rapidez.

En su mensaje, destacó que concretar una reforma política que considere la reelección legislativa, traería varios beneficios, entre ellos el que los legisladores tendrían el único incentivo de atender a la gente que votó por ellos, y además  favorecería la rendición de cuentas.

“No hay mejor mecanismo de rendición de cuentas que regresar con los electores, verlos a la cara e informarles qué se hizo”, porque  “en México ese ejercicio no existe”, precisó.

Cordero Arroyo puso de manifiesto que reelegir a senadores y diputados “contribuiría a la profesionalización de los cuerpos legislativos y no que estemos improvisando cada tres o seis años”.

Nos ahorraría --añadió-- los costos de aprendizaje y permitiría la continuidad del trabajo legislativo”.

Recordó que la reelección de legisladores estaba contemplada en la Constitución de 1917, pero en un momento de presidencialismo autoritario se quitó la posibilidad a México de tener legisladores profesionales y bien preparados.

En este sentido, puntualizó que “el trabajo del Legislativo fue debilitado deliberadamente en los años 20, porque se decidió que debía haber un Presidente todopoderoso, al que no se le hiciera sombra, se eliminó la reelección de legisladores y se quitaron facultades al Congreso”.

Argumentó  que la situación política de México demanda actualmente un Poder Legislativo fuerte, a la misma altura que el Ejecutivo.

“Con el paso de los años, México ha venido avanzando en el fortalecimiento del Poder Legislativo. El país ha avanzado más rápido desde que tenemos Congresos divididos que cuando un solo partido dominaba todos los Poderes”, dijo.

Según el  legislador panista, para contar con un Congreso profesional es preciso tener un instituto de investigación legislativa que ayude a que la negociación política “sea más tersa al poner las cosas desde el punto de vista técnico y objetivo, despolitizarlo y quitarle sesgos de ideología”.

Por su parte, el senador Miguel Barbosa Huerta, presidente del Instituto Belisario Domínguez, (IBD), consideró que es el  momento de la consolidación definitiva de dicho Instituto, y para ello “resulta necesario el fortalecimiento de sus áreas de investigación, que se ordenen y sistematicen sus laborales en planes y programas con objetivos y metas de trabajo a la labor legislativa”.

Dijo que el objetivo del seminario fue analizar las circunstancias que en materia de investigación legislativa se ha desarrollado en otras partes del mundo para conocer experiencias exitosas y fortalecer el modelo que existe en México.

“Nuestro Instituto en encuentra en un proceso de rediseño que tiene como meta convertirlo en uno de los mejores centros de investigación legislativa de México y América Latina, que apoye el trabajo de los senadores y sea vínculo del Senado con el mundo académico nacional e internacional”, abundó.

Barbosa Huerta dijo que es tarea de senadoras y senadores especializarse en legislar y los investigadores en analizar los grandes problemas nacionales.

Estimó que el trabajo legislativo precisa del apoyo técnico que deben realizar los centros de investigación con alto nivel de calificación profesional para fundamentar adecuadamente las leyes que sirvan a los intereses del pueblo de México.

Opinó que un legislador debe tener la sensibilidad para reconocer que no son especialistas en todos los temas y que para tomar las mejores decisiones necesitan información objetiva, veraz y oportuna.

“El Senado requiere un órgano especializado que sea capaz de proporcionar estudios sobre temas estratégicos y sobre asuntos de temas de interés de la agenda legislativa en cada periodo”, insistió el legislador perredista.

Como una tarea futura, agregó, existe un acuerdo para integrar a las filas del Instituto Belisario Domínguez, por medio de concurso, a investigadores de alto prestigio, así como establecer alianzas y convenios de colaboración con las principales instituciones académicas nacionales e internacionales.

En tanto, el senador Daniel Ávila Ruiz, secretario del Comité Directivo del IBD, estimó que la retroalimentación dará herramientas para fortalecer el apoyo que brindan los centros de investigación parlamentaria.

El Instituto Belisario Domínguez --agregó-- se encuentra en un proceso de modernización y el objetivo primario es convertirlo en un soporte del trabajo legislativo, en un órgano especializado encargado de realizar investigaciones estratégicas sobre el desarrollo nacional.

Señaló que otro de los objetivos es lograr que los servidores públicos ligados a la investigación parlamentaria sean de carrera y no sean cambiados a menos que existan causas justificadas.

También mencionó que los procesos de capacitación y evaluación del desempeño sean fortalecidos y encauzados a beneficiar al Senado, en cuanto a construir un Instituto que aprende y es capaz de apoyar sustancialmente sus funciones parlamentarias y legislativas.

--oOo--