La relación que existe entre México y Cuba rebasa por mucho los linderos de la diplomacia, pues tiene profundas raíces históricas y culturales, además de estar fincada en el encuentro de dos gestas históricas que han dado identidad a los pueblos de América Latina: las revoluciones Mexicana y Cubana.

Así lo manifestó la senadora perredista Dolores Padierna Luna al conmemorar el LX aniversario del asalto al Cuartel Moncada, en Santiago de Cuba, que dio inicio a la Revolución Cubana.

Desde la tribuna de la Comisión Permanente, la legisladora destacó que salvo a “algunos periodos vergonzosos” México ha mantenido con ese país sus principios de política internacional de no intervención y libre autodeterminación, marcados en nuestra Constitución.

La relación entre ambos países se ha mantenido “pese a la tremendas presiones del imperio y pese al aislamiento en que se ha tratado de mantener a la isla”, apuntó.

Refirió que la Revolución Cubana es un acontecimiento de  la mayor importancia y ha sido fuente de inspiración y guía para los pueblos del continente que luchan por mantener su independencia y que buscan justicia y libertad.

En este sentido, lamentó la “política criminal” que mantiene Estados Unidos sobre Cuba,  pues “ha hecho caso omiso, una y otra vez”, de las resoluciones de un gran número de organismos multilaterales que han condenado el embargo económico contra la isla.

Ante ello, Padierna Luna expresó que México no debe apoyar “cualquier argumento falaz” que se sume a las justificaciones del bloqueo y la intervención anunciada en Cuba.

Por último, la legisladora entregó un diploma conmemorativo del LX aniversario del asalto al Cuartel Moncada a Ismary González Mirón, encargada de negocios de la embajada de Cuba en México.

Mencionó que este reconocimiento  es testimonio de una relación basada en el respeto mutuo, la no injerencia en los asuntos internos y la cooperación y refleja “nuestro rechazo a las políticas de castigo que las naciones más poderosas quieren imponer en nuestros países”.

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