En uso de la palabra Ricardo Monreal, diputado por Movimiento Ciudadano, argumentó que la Comisión Permanente no debía convertirse en “cómplice” de que se concediera dicho permiso, dadas las versiones periodísticas, incluso en medios de España como “El País”, donde se refiere que Iñaki Urangarin, yerno del Rey del España, utilizó las buenas relaciones entre la familia real y el ex presidente Felipe Calderón para concretar negocios en territorio mexicano, según constata el documento “oportunidades de negocio en México”, en proyectos de agua pública, desarrollos turísticos y energía eólica.
Bajo este argumento, el diputado Ricardo Monreal calificó de “sorprendente” que se concediera la autorización al ex mandatario, pues “para empezar, es una vergüenza para la política exterior de nuestro país este hecho, es una barbaridad diplomática y es una barbaridad política que se apruebe esta condecoración, que no evidencia sino el tráfico de influencias y la corrupción que se elevó a nivel constitucional durante el anterior sexenio”.
Sostuvo que en 2008 había una buena relación entre el reino de España y Calderón, “por lo que incluso fue llamado la puerta de entrada para estos negocios, así lo afirma la casa del rey”, por lo que el legislador del partido naranja consideró que la gravedad radica en que Iñaki es acusado de corrupción en su país y ha trascendido que este se reunió en diversas ocasiones con el ex presidente Calderón para “traficar negocios” por encima de licitaciones públicas.
Al hablar a favor del dictamen, el senador panista Héctor Larios Córdova estableció que no es aplicable votar en contra de que el Congreso conceda dicha autorización, pues la Constitución establece en el último párrafo la obligación del Congreso a hacer una ley reglamentaria, la cual no se ha elaborado.
“Eso lleva a que en ocasiones el Congreso tiene la absoluta ceguera y miopía de pensar que es el Congreso el que otorga la condecoración; quien otorga la condecoración es un país extranjero, en este caso el Rey de España. Es realmente obsoleto que el Congreso tenga que autorizar, hay cientos de distinciones de reconocimientos que mexicanos reciben del extranjero y que no solicitan permiso al Congreso y no hay una sola norma” al respecto, apuntó el legislador sonorense.
Héctor Larios puntualizó además que se debe tener sumo cuidado al hablar de presuntos actos de corrupción, “barbaridad diplomática es que en esta Comisión Permanente alguien venga y acuse de corrupción al Rey de España”, pues se trata de un asunto interno de otros país, al tiempo de rechazar las acusaciones en contra del ex presidente Calderón.
En respuesta, la diputada por el PRD, Alfa Eliana González Magallanes, apuntó que la oposición de los grupos parlamentarios de izquierda de conceder a Calderón recibir la condecoración española, se basa en las denuncias de corrupción expuestas desde España y replicadas en México, las cuales calificó como una prueba fehaciente de la existencia de irregularidades en la admintración calderonista.
“Es e vidente que no estamos acusando de actos de corrupción al Rey de España –acotó-, lo que hemos hecho es denunciar los actos de corrupción del ex presidente Calderón”, de ahí la votación en contra del PRD.
En su turno, el diputado Ricardo Cantú Garza, del PT, lamentó que dicho debate se diera en el marco de la reciente aprobación de una iniciativa para dejar en manos del Ejecutivo otorgar los permisos a mexicanos para recibir condecoraciones y reconocimientos de gobiernos extranjeros.
“Esto es muy delicado, el propósito de esta norma era cuidar que los ciudadanos mexicanos no se vieran tentados a servir a gobiernos extranjeros a cambio de privilegios y prebendas, como es el caso de una medalla”, apuntó.
Cuestionó cuáles pueden ser los méritos de Calderón Hinojosa para verse favorecido por el Gobierno de España, “¿acaso tiene que ver con las operaciones donde permitieron que la empresa española Repsol tuviera tratos comerciales con Pemex, o será gracias a las ganancias de los bancos españoles en México que fueron de gran cuantía durante los seis años que fue titular del Ejecutivo, o por todas las facilidades que le brindó al capital español para explotar los atractivos turísticos en las playas mexicanas, sin importar que pusieran en peligro el medio ambiente y el equilibrio ecológico?”.
Por su parte, Roberto Gil Zuarth, senador por el PAN, estableció que la modificación constitucional para que el Congreso no sea ya el facultado para conceder permisos para recibir condecoraciones extranjeras, es porque se ponía a salvo la soberanía nacional lo cual puntualizó, ya está superado por la historia y de ahí el cambio de la norma.
Tras ello, afirmó que “ninguna de las empresas que han sido señaladas en la causa penal a la que usted –diputado Ricardo Monreal- hizo referencia tuvo contratos en nuestro país, ninguna y si se dice únicamente lo que en un documento se razonaba crear en oportunidades de negocio, créame que en muchos países hay de ese tipo de afirmaciones porque México es una tierra de oportunidades, porque hemos hecho bien las cosas”.
Sostuvo también que los méritos del ex presidente Calderón para recibir la condecoración Orden del Mérito Civil fueron avalados por el Gobierno de España, no por el Rey de aquel país.
Al respecto, el senador perredista Alejandro Encinas aclaró que hoy es facultad del Congreso autorizar o no a ciudadanos mexicanos el uso de condecoraciones del extranjero y esto tiene el objetivo de impedir la intervención de gobiernos de otros países en México.
Por tanto, concluyó, esta facultad implica que el Congreso puede establecer si la persona cuenta con los méritos para portar una condecoración y no sólo el país que la concede.
La Orden del Mérito Civil es, junto con la Orden de Isabel la Católica, una de las 2 órdenes actualmente dependientes del Ministerio de Asuntos Exteriores de España. Se concede a ciudadanos españoles o extranjeros que hayan realizado méritos de carácter civil, como servicios relevantes al Estado y trabajos extraordinarios.
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