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El Senado de la República pidió a las secretarías de Agricultura y de Economía que implementen acciones inmediatas que estabilicen los precios del azúcar en el mercado nacional y que revisen y ajusten los procesos de importación de alta fructuosa.

Asimismo, les solicitaron que canalicen los apoyos inmediatos y extraordinarios para los campesinos cañeros, a fin de evitar que producción se colapse “estructuralmente”.

Al presentar el punto de acuerdo --que fue aprobado de forma urgente-- la senadora panista Sonia Mendoza Díaz dijo que  la drástica caída de los precios del azúcar ha llegado casi a un 40 por ciento, lo que ha provocado “una afectación irreversible”.

Sin embargo, advirtió, sus efectos podrían ser más funestos para la economía de los productores de caña que se encuentran en 15 entidades federativas de nuestro país.
 
Indicó que la producción del actual ciclo tiene un excedente de 1.6 millones de toneladas --que de no exportarse a la brevedad-- continuarán agudizando un fenómeno que ya estamos observando con absoluta claridad: la quiebra total del sector cañero.

La depreciación del azúcar en casi 40 por ciento de su valor --agregó--  representa para el sector una pérdida de 8.5 mil millones de pesos, es decir, este importante detonante de la economía nacional ha dejado de percibir ingresos del orden de los 11 mil pesos por cada hectárea cosechada.

Por ello, dijo que de no tomar acciones estratégicas, coordinadas e inmediatas “esta pérdida puede ser mucho mayor”.

A su vez, el senador panista Manuel Cota Jiménez, presidente de la Comisión de Agricultura, informó que en el país existen 54 ingenios distribuidos en 15 estados de la República; 170 mil productores se dedican a esa actividad, por lo que es necesario atender a profundidad a ese problema.
 
En este sentido, comentó que derivado de las pláticas y reuniones con los diferentes actores, se acordó implementar un fideicomiso por el Gobierno Federal, que permita a los industriales utilizar los servicios de almacenamiento  y que ha permitido la recuperación del precio de azúcar paulatinamente.

En su turno, el senador perredista Fidel Demédicis Hidalgo consideró que si el Senado no interviene en este problema, “seremos irremediablemente cómplices de esa situación que está lanzando a la desesperanza a miles y miles de familias que viven de este producto, y sin duda, pasarán a engrosar las filas de los pobres alimentarios en este país”.

Señaló que es momento de acabar con “esa pesadilla, pues afecta a miles de productores que hoy tienen tomados los ingenios y lastima a “tantísimos compañeros”.
 

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