Número-87
- Contiene acciones puntuales para garantizar los derechos de ellas y disminuir la violencia en su contra.
Senadoras y senadores de la República conocieron este viernes el Programa Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (PROIGUALDAD) 2020-2024, que contiene las principales estrategias y acciones puntuales a las que las diversas instituciones se han comprometido para garantizar los derechos de las mujeres y disminuir la violencia en su contra.
La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Nadine Gasman Zylbermann, presentó el proyecto a la Comisión para la Igualdad de Género, que preside la senadora Martha Lucía Micher Camarena.
La legisladora dijo que se trata del eje rector de la política de igualdad, una pieza clave en favor de los derechos de las niñas y las mujeres, y un instrumento importante para el trabajo legislativo.
Su elaboración, agregó Micher Camarena, demuestra la capacidad de negociación del Instituto con el resto de las instancias del gobierno federal.
Nadine Gasman, en tanto, afirmó que no se trata de un programa transversal más, sino un documento que refleja las principales temáticas y preocupaciones de más de cinco mil mujeres con las que se dialogó en las 32 entidades del país.
Con este ejercicio, apuntó, se demuestra que es posible construir una nueva relación entre las mujeres y el gobierno, en donde ellas hablan y las autoridades escuchan activamente.
Destacó que entre las principales preocupaciones del género femenino está vivir en paz y sin violencia, asegurar la corresponsabilidad en el cuidado de la familia y la dificultad de alcanzar una plena autonomía económica.
En este contexto, explicó que el PROIGUALDAD 2020-2024 establece seis objetivos estratégicos para los próximos cuatro años: autonomía económica, salud y bienestar, cuidados, no violencia, participación igualitaria de las mujeres en todos los ámbitos y la construcción de entornos seguros y en paz.
La funcionaria dijo que entre las puntuales que se establecen para la Cámara de Senadores están la armonización del marco jurídico sobre el tipo penal del feminicidio, la violencia obstétrica, discriminación y los derechos sexuales y reproductivos de todas mujeres.
En el intercambio de opiniones, la senadora Beatriz Paredes Rangel, del Grupo Parlamentario del PRI, señaló que si este plan “no tiene una base mínima de presupuesto no va a poder tener resultados”.
Por el Grupo Parlamentario del PVEM, la senadora Verónica Camino Farjat expresó que “estamos en un buen momento para perfeccionar” las acciones de prevención social del delito en contra de las mujeres “y no quisiera de ninguna forma el tema del presupuesto se tomara como una justificación para la inacción”.
La senadora Claudia Ruiz Massieu, del PRI, señaló que en esta nueva realidad provocada por el Covid-19, se han ahondado las brechas de desigualdad y están generando una carga mayor para las mujeres que trabajan y están a cargo del cuidado de sus hijos y ancianos en casa, por ejemplo, y además tienen que trabajar. ¿Cómo se puede ajustar el Programa Pro-Igualdad para ellas? Porque les está costando trabajo regresar a la nueva realidad que están viviendo.
Marta Ferreyra Beltrán, directora General de Autonomía y Empoderamiento para la Igualdad Sustantiva del Instituto, indicó que el proyecto “es un concierto de voluntades y aspiraciones que impactará en los programas sectoriales, en secretarías de gobierno e instituciones autónomas.
A su vez, Patricia Uribe Zúñiga, secretaria Ejecutiva del Inmujeres, habló sobre el seguimiento que realizaron para garantizar que “PROIGUALDAD” no se convierta en letra muerta y realmente se implemente en el gobierno.
Para ello, agregó, a la fecha se han realizado 44 reuniones con dependencias de la administración pública. “Hemos compartido el semáforo del proyecto y acciones para que puedan vincularlo en sus programas sectoriales o institucionales acordes a los planes de trabajo, esto, agregó, mientras se aprueba y se publica el programa.