En el marco de la conmemoración del Centenario del inicio de la Revolución Mexicana, en el Senado de la República se presentó el libro Sara Pérez de Madero. Una Mujer de la Revolución, el cual se convierte en un reconocimiento a la mujer mexicana, a través de su figura.

Al respecto, el senador Gustavo Madero Muñoz afirmó que la historia oficial se vuelve “un poco reduccionista e injusta con miles de hombres y mujeres que hicieron posible, en ese tejer de circunstancias, que la Revolución hubiera sido viable en sus términos”.

Ante integrantes de la familia Madero, el legislador panista manifestó que este libro permite valorar a todas las mujeres que en “todas las formas y en todos los tiempos” han hecho posible cambiar a México.

Recordó que Sara Pérez de Madero, fue una gran mujer y luchadora revolucionaria que tuvo una trascendente actividad social antes del inicio del movimiento, al ayudar de diversas formas a los sectores más desprotegidos de la sociedad en aquellos tiempos.

Además, mencionó que después del asesinato de Francisco I. Madero y en su exilio en Cuba siguió con una actividad proselitista; “nunca la abandona y sigue denunciando la injusticia y el crimen de su marido a lo largo de toda su vida”.

En tanto, Laura Pérez Rosales, una de las autoras del libro, manifestó que éste puede servir para la reflexión de una de las etapas en que la historia de nuestro país adquirió la silueta de la tragedia.

Asimismo, para que “experiencias como esa no se conviertan en la cotidianidad que provoca inercia y pasividad, y que los dilemas que hemos vivido y vivimos ya no se impongan a la sociedad en su conjunto”.

En este sentido, resaltó que Sara Pérez no jugó el papel de la venganza por el asesinato de su esposo, “sino el de una mujer de naturaleza reflexiva que encontró dificultades para restaurar sus heridas ocasionadas por la deslealtad, la traición y la arrogancia “.

A su vez, María del Carmen Collado Herrera, co autora de la obra, explicó que Sara Pérez de Madero rompió con el molde tradicional de la mujer a principios del siglo XX, ya que nunca trató de figurar como gran dama de sociedad, “sino al contrario hizo campaña con su marido y se acercó a los trabajadores”.

“Fue una mujer que logró convertirse en partícipe de la Revolución, que rompió con un régimen de privilegios que tenía más de treinta años establecido en México y que se había fundado en la exclusión de grandes sectores sociales de campesinos y de obreros”, subrayó la historiadora.

Recordó que siendo esposa del Padre de la Revolución se convirtió en una mujer de lucha que apoyó a otras mujeres y fundó empresas para que las obreras pudieran vivir mejor; además “acompañó a su esposo en los momentos más difíciles y le dio ánimo, pues era sobre todo una mujer muy valiente”.

Por su parte, la historiadora mexicana, María Eugenia Ponce Alcocer, señaló que La Primera Dama de la Revolución se jugó la vida y su posición social para acompañar a su marido en la lucha por sus ideales democráticos.

Dijo que este libro rescata del olvido a una mujer, a su ser y a su quehacer; “al igual que muchas otras mujeres que participaron en la Revolución, Sara Pérez rompió con el papel tradicional que le asignaba la sociedad como esposa, madre o hermana”.

En el caso de Francisco I. Madero, un gran hombre, siempre estuvo a su lado una gran mujer, Sara Pérez de Madero, puntualizó.

-----oooOOOooo-----