Número-854

• El Senado realizó el Foro “El futuro del árbol en el desarrollo urbano”.

La clase política debe entender, con sensibilidad, la importancia del cuidado del medio ambiente y rol que juegan los árboles en nuestras urbes, sólo así podremos generar las leyes necesarias a nivel federal, estatal y en la Ciudad de México para brindar protección ambiental en las 59 zonas metropolitanas de nuestro país, aseguró la senadora Mariana Gómez del Campo.

Durante el foro “El futuro del árbol en el desarrollo urbano”, la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y el Caribe señaló que México se está volviendo un país de ciudades de alta concentración poblacional; en 1950 poco menos del 43 por ciento de la población vivía en localidades urbanas; en 1990 era de 71 por ciento; hoy 8 de cada 10 mexicanos vivimos en una ciudad.

Esto representa enormes retos, pues la concentración en zonas urbanas ha remarcado las desigualdades regionales. En la Ciudad de México, por ejemplo, en la delegación Cuajimalpa la población literalmente se pelea por cuidar los manantiales, mientras que en Iztapalapa de plano ni siquiera les llega el agua, y si les llega muchas veces es sucia, señaló.

La senadora del PAN indicó que este fin de semana se hicieron públicos datos del Programa de Manejo, Uso y Reuso del Agua, de la UNAM, que reveló la Ciudad de México podría quedarse sin agua en el año 2048.

“Las causas están perfectamente detectadas: la enorme cantidad de fugas que provocan que se pierda el 40 por ciento del agua que llega, el mal manejo de aguas residuales y el desperdicio de agua potable”, sostuvo.

Además, mencionó que México es uno de los países de mayor vulnerabilidad ante los desastres naturales, “40 millones de personas fueron afectadas directa o indirectamente por los sismos de septiembre por la simple razón de que vivimos en la zona de impacto”.

Recordó que otros de los riesgos que atentan contra el medio ambiente están asociados con la calidad del aire, pues tan solo de los primeros 144 días del año 2017 no hubo alguno con buena calidad o con menos de 50 puntos Imeca.

“Por ello debemos entender cuál es nuestra relación con los árboles en la ciudad, por desgracia es un tema del que se habla muy poco, lo que nos alarma es que los últimos 5 años la ciudad ha perdido una cantidad de árboles similar a 10 Alamedas centrales entre las obras públicas, construcciones e invasiones, y el saldo negativo: tenemos menos árboles”, señaló.

Reiteró la importancia de que este tipo de foros sirvan para “sentar el precedente” de la importancia del cuidado de nuestros árboles y a partir de aquí modificar las leyes que sean necesarias a nivel Federal pero también a nivel Estatal y en la Ciudad de México”.

En este foro participaron especialistas como Teobaldo Eguiluz Piedra, presidente de la Fundación Mexicana del Árbol A.C.; Eugenia García Velarde, de la Dirección de Operación Urbana de la SEDATU; Gustavo López Mendoza, gerente estatal de la Comisión Nacional Forestal de la Ciudad de México, y el Arquitecto Alberto Kalach.

Los ponentes manifestaron que los árboles no deben considerarse como una decoración urbana, porque de esta manera no habrá jamás disponibilidad de recursos financieros para la recuperación de la ciudad.

Indicaron que los componentes del arbolado urbano son la cosmética de la cara desfigurada de la Ciudad de México que ha crecido mal, donde los distintos gobiernos son reticentes a aventurarse en el terreno del diseño, planificación y conservación del patrimonio paisajístico.

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