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Lo anterior, dijo, permitirá tener una estadística nacional de los destinos de preferencia de los mexicanos y evitará que los que han cometido alguna falta en el país evadan la acción de la justicia.
Subrayó que por lo general los controles migratorios sólo se aplican a los extranjeros que ingresan o salen de México, pero no a los mexicanos, lo que ha provocado que en los casos en que algún nacional haya realizado o se presuma que cometió algún delito, salga del territorio nacional sin ninguna medida para ubicarlo.
De ahí la necesidad de que el INM, a través de sus agentes migratorios, sellen los pasaportes al entrar y abandonar el país.
Esto, resaltó, también puede prevenir la salida ilegal de menores ya que se tendrían los datos de los adultos que los pretendan sacar de México.
Además, serviría como medida de seguridad de los propios mexicanos, ya que en caso de que ocurriera alguna eventualidad durante el viaje, o en el lugar de destino, las autoridades podrían dar con la ubicación de los nacionales, o bien el día de regreso de los mismos.
Aureoles Conejo señaló que aun cuando la Secretaría de Gobernación, a través del Instituto Nacional de Migración, emitió una circular en la que se establece el uso de los sellos, éstos son casi nulos.
Por ello, la importancia de que en la Ley respectiva se incluya tal obligación por parte del personal del Instituto que se encuentre en los puntos de entrada y salida del país.
La iniciativa, que reforma la Ley de Migración, se turnó a las comisiones de Población y Desarrollo y a la de Estudios Legislativos, Primera.
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