Número-355
- El afluente, ubicado en Coahuila, tiene afectaciones en sus riberas y lecho por las actividades mineras que se realizan en la zona.
- Se desconoce si los trabajos mineros están autorizadas bajo un permiso, y si las empresas que llevan a cabo dichas actividades presentaron una manifestación de impacto ambiental.
El Pleno de la Comisión Permanente aprobó un dictamen de la Tercera Comisión que exhorta al gobierno Federal para que evalúe decretar la cuenca del Río San Rodrigo, en Coahuila, como Área Natural Protegida para detener la deforestación de las riberas y la afectación de su lecho por actividades mineras.
Asimismo, se realizó un llamado a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y al Poder Ejecutivo de Coahuila para que realice las acciones necesarias para preservar dicha cuenca.
El exhorto determina los siguientes temas como prioritarios: garantizar la estabilidad físico-química de sus aguas y la debida continuidad ecológica de su cauce; suspender las actividades mineras de extracción de materiales que se realizan en el lecho menor, lecho mayor y planicies de inundación del río, en las zonas de La Agrícola, El Remolino y El Moral, así como las actividades de trituración de piedra en sus márgenes.
Así como revisar las actividades industriales que se realizan en la cuenca del río, a fin de detectar inconsistencias en la manifestación de impacto ambiental correspondientes y sancionar las irregularidades; además de restaurar el ecosistema.
El dictamen señala que una gran parte de los problemas ambientales que padece el Río San Rodrigo, son resultado de actividades mineras, principalmente de extracción intensiva de piedra del lecho y riberas del río, desde hace más de 30 años.
Dichas actividades se concentran en dos zonas, la primera en el Municipio de Zaragoza, en las congregaciones de La Agrícola y El Remolino, así como en la intersección de la carretera federal número 29 con la carretera a El Remolino, ambas antes de la presa La Fragua.
La segunda, ubicada en el ejido El Moral, en el Municipio de Piedras Negras, casi en la desembocadura del río.
Cabe destacar que las actividades mineras han alterado gravemente casi el 20 por ciento del Río San Rodrigo, y ha compactado el lecho y ha alterado el cauce original del río, además de haber causado la deforestación de las riberas.
Además, los legisladores de la Tercera Comisión advirtieron que se desconoce si las actividades mineras, a lo largo del cauce del Río San Rodrigo, están autorizadas bajo un permiso y si las empresas que llevan a cabo dichas actividades presentaron una manifestación de impacto ambiental, tal como lo dispone la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente.
El Río San Rodrigo fluye desde el municipio de Zaragoza, en la Sierra del Burro, hasta su desembocadura en el kilómetro 834 del río Bravo, al norte de la ciudad de Piedras Negras.