Número-771

• Se realizó en el Senado de la República el Foro “Alianza del Pacífico. Hacia una integración regional de gran alcance”.
• Es un mecanismo de vanguardia que contempla temas cercanos a la ciudadanía: medio ambiente, promoción cultural e intercambio académico: senadora Mariana Gómez.

La integración política latinoamericana no puede ser el proyecto principal de la Alianza del Pacífico, sino que este mecanismo de integración regional debe evaluarse por su eficacia en la creación de una mejor sociedad, con mayores oportunidades, más desarrollo humano y disminución de la inequidad que caracteriza a las comunidades de esta región, consideraron legisladores, sector privado y especialistas.
Durante el Foro “Alianza del Pacífico. Hacia una integración regional de gran alcance”, realizado en el Senado de la República, la senadora Mariana Gómez del Campo, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y El Caribe, señaló que la Alianza “está ideada como una plataforma de articulación no sólo comercial sino también política, económica y de proyección al mundo con un especial énfasis en Asia-Pacífico”.
Dijo que los países que la integran: Colombia, Chile, México y Perú, representan 38 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) regional, concentran el 50 por ciento del comercio total, atraen el 45 por ciento de la inversión extranjera directa y concentran una población de 214.1 millones de personas.
“Este es un mecanismo de vanguardia a nivel mundial, contempla simultáneamente temas sensibles y cercanos a la ciudadanía como la preservación del medio ambiente, la promoción cultural, así como también el intercambio académico y el intercambio estudiantil”, expuso.
La senadora Gabriela Cuevas Barron, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, consideró que el objetivo de la Alianza del Pacífico no es la integración por la integración, “sino ser mejores naciones para nuestros ciudadanos”.
Refirió que este acuerdo multilateral es el proyecto de integración económica, articulación política y cooperación más profundo y significativo de toda América Latina; sin embargo, hay algunas interrogantes que debemos evaluar con cuidado.
“Necesitamos tener claridad sobre los objetivos que tiene México al participar en la Alianza del Pacífico. También, necesitamos evaluar de forma exigente si esta Alianza ayuda a nuestra diversificación comercial, y también, por qué no, si la diversificación comercial es un objetivo deseable para nuestra economía”, planteó.
El senador Héctor Larios Córdova, presidente de la Comisión de Comercio y Fomento Industrial, explicó que la Alianza del Pacífico surgió como un esfuerzo de integración comercial a partir de la realidad de los cuatro países integrantes: Colombia, Perú, Chile y México, pues estos cuentan con acuerdos de libre comercio bilaterales.
Señaló que es necesario que el Senado de la República discuta ya el Protocolo Adicional al Acuerdo Marco de la Alianza del Pacífico, que fue firmado el 10 de febrero de 2014, en Cartagena de Indias, Colombia.
En tanto, la senadora María del Rocío Pineda Gochi, secretaria de la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y El Caribe, comentó que una vez que entren en vigor los protocolos adicionales de esta Alianza, “tendremos que acelerar el paso” para incrementar el intercambio comercial entre los países miembros, lo cual representará la necesidad de contar ventanillas únicas de comercio exterior, conformar programas para el fomento e innovación de las Pymes y signar mecanismos para evitar la doble tributación.
“Tenemos el doble reto de trascender el viejo modelo de la integración latinoamericana y de consolidar un verdadero bloque regional que nos permita diversificar nuestro comercio, minimizar nuestra dependencia económica de los países desarrollados, potenciar nuestras áreas estratégicas, multiplicar las oportunidades de crecimiento, aumentar nuestro comercio intrarregional y elevar la calidad de nuestras poblaciones”, señaló.
La embajadora Socorro Flores Liera, subsecretaria para América Latina y El Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), expuso que un parámetro importante dentro de la región es el objetivo de alcanzar la integración, ha habido una serie de modelos en la región, algunos de ellos todavía subsisten.
Mencionó que la Alianza del Pacífico es un proyecto que busca una integración profunda de las economías de los cuatro países que la conforman y, por tanto, éste es uno de los proyectos más ambiciosos e importantes en una de las regiones en las que México tiene enorme presencia. “Es un espacio privilegiado para avanzar en lo que es la integración regional en América Latina y el Caribe”.
Mencionó que existe una vertiente social muy importante dentro de la Alianza del Pacífico que se ha venido reflejando en una mayor interacción entre las poblaciones.
Francisco de Rosenzweig Mendialdua, subsecretario de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía (SE), dijo que este mecanismo es una iniciativa que manda una señal muy positiva a los principios del libre comercio: una “bocanada de aire puro” para la región latinoamericana, en términos de la importancia que tiene el libre comercio como motor de crecimiento.
A través de ésta se busca privilegiar los insumos de la región, es decir, que sean los cuatro países de la Alianza los beneficiarios del desmantelamiento de arancelario y no otras economías las que se beneficien de las negociaciones.
Eugenio Salinas Morales, presidente de Comercio Exterior y Asuntos Internacionales de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), indicó que este es el primer acuerdo que comprende la participación del sector privado para avanzar en el desarrollo regional.
Comentó que se requiere la armonización de normas técnicas, una convergencia regulatoria, certificación de autoridades sanitarias, una integración financiera, así como la promoción de encadenamientos productivos.
En este Foro, organizado por las Comisiones de Relaciones Exteriores; Relaciones Exteriores América Latina y el Caribe; y Comercio y Fomento Industrial, también participaron Carlos Berzunza Sánchez, director general de la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (Canipec); Adalberto Santana Hernández, director del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la Universidad Nacional Autónoma de México; y la maestra Rosaura Castañeda Ramírez, Jefa de la Unidad de Negociaciones Internacionales.

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