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Al respecto, el senador González Morfín dijo que “comprendemos lo mucho que representa para su pueblo esta especie que ha simbolizado por siglos la pureza, la sencillez y la lealtad”.
Por ello, se comprometió a velar con todo esmero por su desarrollo, cuidado y protección “para que con los años su belleza y crecimiento también sean muestra del florecimiento de la amistad entre dos pueblos”.
De igual forma, agregó, como un símbolo de la relación cada vez más fructífera entre el Senado de México y Japón.
En este sentido, resaltó que los mexicanos “apreciamos el espíritu de un pueblo amigo que ha sabido enfrentar todas las adversidades de manera ejemplar ofrendando siempre hasta el último aliento su máximo esfuerzo”.
En tanto, Shuichiro Megata dijo que la plantación de este árbol es una muestra “de la buena amistad entre México y Japón” y anunció que próximamente se plantarán 20 más en el Senado de la República.
Expresó su deseo de que el cerezo que hoy se planta y los 20 que se plantarán en el futuro cercano, florezcan anunciando la llegada de la primavera y que los mexicanos puedan admirar la belleza de estos árboles al igual que en Japón.
Explicó que las flores de los cerezos brotan sólo durante 12 semanas al año, y en esa temporada, en Japón se tiene la costumbre de que las familias y amistades se reúnan bajo sus ramas para admirar su belleza, por lo que “espero que estos árboles llenen de paz y armonía a todos ustedes”.
Recordó que en octubre de 2009, la asociación japonesa de intercambio de cerezos donó a la asociación México-Japonesa varios árboles de cerezo con motivo del 400 aniversario de las relaciones entre México y Japón
En la ceremonia estuvieron presentes los senadores Carlos Jiménez Macías, del PRI; Javier Castelo Parada y José Antonio Badía San Martín, del PAN; Eugenio Govea Arcos, de Movimiento Ciudadano, así como representantes de la comunidad japonesa en nuestro país.
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