- La senadora Ana Lilia Herrera presentó un punto de acuerdo que busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Las pérdidas económicas por los problemas de movilidad, advirtió, se estiman en 200 mil millones de pesos cada año.
Lo anterior, explicó la legisladora, a fin de que se puedan generar proyectos de movilidad sustentable a nivel nacional dirigidos a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero
A nombre de las senadoras Graciela Ortiz González, Marcela Guerra Castillo y Blanca Alcalá Ruíz, así como del senador Jesús Casillas Romero, Herrera Anzaldo hizo un llamado para que, dentro del Ramo 15- Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, se asignen los recursos suficientes para que el “Programa de Impulso a la movilidad urbana (PMUS-007)” pueda ser efectivo.
Argumentó que el destino de los recursos federales puede marcar la diferencia entre elevar la calidad de vida de los mexicanos y la competitividad de las ciudades, o continuar con un modelo de movilidad centrado en el automóvil y que ha provocado altos costos.
La senadora destacó la importancia de las inversiones para incentivar la movilidad sustentable y proyectos que contribuyan simultáneamente a la mitigación y adaptación al cambio climático.
Dijo que en la zonas metropolitanas, el sistema de transporte público de calidad “no ha podido ir de la mano con el crecimiento urbano, y la lejanía entre los centros de trabajo y las vivienda ha incrementado el uso de vehículos privados, provocando congestionamientos viales que afectan la salud y productividad de la población”.
Las pérdidas económicas en México por este tipo de problemas, advirtió, se estiman en 200 mil millones de pesos cada año y, de acuerdo con el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, el patrón de movilidad de la Zona Metropolitana del Valle de México contribuye a que los vehículos emitan 50 por ciento de los gases de efecto invernadero y 80 por ciento de los contaminantes locales.
En este contexto, agregó, invertir en transporte público sustentable representa una gran oportunidad para que 78 por ciento de la población en nuestro país que vive en zonas urbanas tengan la opción de trasladarse de manera segura, rápida y con un bajo impacto ambiental.