Número-391
- Es un buen momento para que este diálogo fortifique, no solamente nuestra visión de la política, sino también la esperanza de los mexicanos: Gil Zuarth.
- El nuncio apostólico en México, Christophe Pierre, consideró positivo que el Senado promueva una relación con todas las religiones, y busque mejorar estas relaciones.
El senador Gil Zuarth dijo que se debe reestablecer y fortalecer el diálogo entre la política y los hechos religiosos, porque “creemos que es un buen momento para que este diálogo fortifique, no solamente nuestra visión de la política y de las políticas públicas, sino también la esperanza de los mexicanos”.
“Creemos que el Senado es un espacio de libertades, de pluralidad y donde hemos demostrado sensatez y responsabilidad al momento de tomar decisiones; y estamos convencidos de que un mensaje de su Santidad en el seno del Senado puede ser, no sólo importante para los mexicanos sino también para nuestros hermanos latinoamericanos”, comentó.
Al encabezar una delegación de senadores que acudieron a la Nunciatura Apostólica en México, subrayó que México puede ser la puerta de entrada para un mensaje dirigido a la clase política latinoamericana, en el marco de la visita pastoral, porque los problemas que debaten los políticos y los que preocupan al Papa Francisco son comunes.
“Los representantes políticos de México quieren cambiar a su país para bien, y eso también es importante que su Santidad lo sepa. Creemos que podemos abrir un nuevo ciclo histórico de entendimiento positivo, en la cual la política se nutra de ciertos valores que se recrean en la sociedad, que pueda orientar la política y que sirva para que se ejerzan a plenitud las libertades”, enfatizó el Presidente del Senado de la República.
Christophe Pierre, nuncio apostólico en México, destacó que se trata de una invitación muy positiva, porque a pesar de tratarse de una visita pastoral, existe un precedente “que todos hemos admirado” en la visita que hizo el Papa Francisco al Congreso de Estados Unidos.
Comentó que ve positivo que el Senado de la República promueva una relación con todas las religiones, con la finalidad de mejorar las relaciones, porque “es esencial”; y que los representantes populares tienen un papel importante, pero no pueden separar la dimensión religiosa de la vida de la Nación.
“No quiere decir que todo debe ser mezclado, cada uno en su lugar, hay una separación necesaria, pero no una marginalización, porque al final la libertad religiosa no es un privilegio de una religión o iglesia, sino un derecho humano”, comentó el Nuncio Apostólico.
La senadora Gabriela Cuevas, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, dijo que se necesita que México esté vinculado al mundo, y se entienda que las decisiones que toman los políticos no se quedan solamente en la esfera nacional.
Subrayó la importancia de la invitación, porque la única forma en que se puede “salir de la crisis en la que estamos, tiene que ver con una reestructuración de nuestros valores como sociedad; y ese ha sido, en muchos casos, el mensaje del Papa”.
Rabindranath Salazar Solorio, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores Europa, dijo que sería de gran importancia que el Papa Francisco diera un mensaje de solidaridad desde el Senado de la República, como ocurrió en el Congreso norteamericano, donde “movió las fibras”.
La senadora Marcela Guerra, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte, dijo que el mensaje del Papa no sólo habla de valores, sino que ha traído modernidad, y ha movido conciencias y voluntades, de ahí la importancia de esta invitación.
A la reunión con el Nuncio Apostólico en México también asistieron: el senador José Rosas Aispuro Torres, y las senadoras Hilda Flores Escalera, María Elena Barrera Tapia, Rosa Adriana Díaz Lizama y Margarita Flores Sánchez.