Número-386
- En la reforma a las escuelas normales tienen que estar normalistas y docentes.
- Los legisladores consideran que para este proceso se requiere de un diálogo nacional.
Senadores del Grupo Parlamentario del PRD solicitaron a la Secretaría de Educación Pública (SEP) presentar a la brevedad un diagnóstico sobre el estado que guardan las escuelas normales de todo el país, con el propósito de contar con información objetiva, para poder llevar a cabo una reforma en este sector educativo.
A través de un punto de acuerdo, que fue turnado para su análisis a la Comisión de Educación, los legisladores consideraron que la reforma debe iniciar en el seno de las escuelas formadoras de docentes, bajo una óptica incluyente e integral, y con el compromiso de escuchar a todos los actores y sujetos involucrados en el proceso educativo.
En el documento de la propuesta, publicado en la Gaceta del Senado, subrayan que no puede haber una reforma a la educación normal sin normalistas, e indican que es necesario que las políticas docentes estén bien alineadas con los mayores objetivos de la política educativa, y para ello se debe de realizar un diálogo nacional.
Exponen que dicha política educativa debe estar orientada a la formación de un sujeto crítico, autocrítico, en un entorno de complejidad y con una orientación social que le permita seguir jugando el papel articulador del desarrollo comunitario, con un compromiso de formar en las mejores condiciones a los niños y jóvenes del futuro.
El proceso, indican, requiere de una visión integral ya que no sólo se trata de actualizar los planes y programas de las normales bajo un enfoque de calidad docente.
Precisan que las medidas que se incluyan en la reforma deben ser analizadas en su impacto, directo e indirecto, con respecto a la formación y los aprendizajes de los alumnos, ya que los docentes son actores definitorios para que puedan lograrse las metas educativas.
Consideran que la figura del profesor normalista sigue siendo indispensable en el proceso educativo, no sólo para la adquisición de conocimientos de los alumnos, sino para inculcar una educación ética, basada en valores y respeto a los derechos humanos.
Resaltan que es urgente que la autoridad educativa inicie este proceso de reforma curricular, para que actualice el modelo pedagógico y didáctico de las escuelas normales, dentro del marco de un modelo educativo nacional que debe ser discutido en todo el país, donde pueda escucharse el sentir y pensar de la comunidad normalista y del propio magisterio.
Los legisladores comentan que el asunto no es sólo cómo se actualiza y profesionaliza a los maestros, sino cómo se deben formar mejor para no tener que recurrir luego a evaluaciones punitivas, bajo el pretexto de mejorar la calidad educativa y que, por el contrario, éstas sean utilizadas con fines de mejora y para guiar procesos de reforma curricular de las instituciones formadoras.
En el documento expusieron que alcanzar una docencia de calidad para todos, que es sinónimo de una educación de calidad para todos, debe ser el sentido estratégico que movilice a los distintos actores sociales y políticos tras la construcción de acuerdos.
Señalaron que los mexicanos no están solos frente a este reto, ya que la formación de docentes de calidad es un problema que desde hace varios años se discute en la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), ante el cual varios países han emprendido acciones de cambio y a la fecha existen experiencias de éxito que puede servir de referencia para el proceso de reforma que vive el país.
La proposición está firmada por los senadores del Grupo Parlamentario del PRD, Raúl Morón Orozco, Angélica de la Peña Gómez, Alejandro Encinas Rodríguez, Iris Vianey Mendoza, Armando Ríos Piter, Fidel Demédicis Hidalgo, Dolores Padierna Luna, Zoé Robledo Aburto, Lorena Cuéllar Cisneros, Rabindranath Salazar Solorio, Sofío Ramírez Hernández, Isidro Pedraza Chávez y Luis Humberto Fernández Fuentes.