Dijo que México tiene que poner fin a la violencia contra los niños, pero eso no se significa limitarse a castigar a los agresores sino transformar la mentalidad de la sociedad, así como las condiciones económicas y sociales ligadas a este fenómeno.
Nuestro país, subrayó en la tribuna senatorial, tiene ya uno de los primeros lugares en el mundo de pornografía infantil y explotación sexual.
Refirió que en 2007, el relator especial de Naciones Unidas contra la venta de niños y la explotación sexual señaló que cerca de 80 menores son víctimas de pornografía y prostitución forzosa.
No se trata nada más de niños mexicanos, enfatizó, sino también de migrantes extranjeros e indígenas.
La trata de personas y la migración, destacó, es la esclavitud del siglo XXI y México es país de origen, tránsito y destino.
Entre otros datos, el legislador perredista mencionó que el sistema de justicia registró 53 mil violaciones cometidas contra menores de edad entre 1997 y 2003, un promedio de siete mil 600 casos por año y 21 cada día.
Subrayó que la Unicef demostró que existe una alta correlación entre la violencia contra niños y la se registra entre adultos
Además, Garrido Abreu señaló que el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Distrito Federal recibió un promedio de cuatro casos de maltrato infantil por día entre 2000 y 2002.
A estas cifras, dijo, se agrega que de cada 10 niños extraviados sólo aparece uno y sólo se han consignado 39 de las 798 averiguaciones previas abiertas por trata de personas de menores en esta administración.
Las iniciativas se turnaron a las comisiones de Puntos Constitucionales, Estudios Legislativos, Justicia, Seguridad Pública y Estudios Legislativos, Primera.
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