Explicaron que dicha iniciativa se convertirá en una cooperativa integrada por socios de diversas zonas del país, que fomentará el consumo responsable por medio de los valores de nuestra civilización milenaria.
Al respecto, la senadora priista María de los Ángeles Moreno Uriegas destacó que proyectos como Red México Profundo buscan “sacar de la pobreza y volver mucho más sana la economía”, a través de las relaciones económicas entre productores primarios, cadenas productivas y consumidores.
En este sentido, aseguró que por una parte facilitará que los productores tengan un ingreso, y por otro, garantizar un abasto de alimentos orgánicos y sanos a los consumidores tanto mexicanos como del extranjero.
Por ello, felicitó a los impulsores de este proyecto, ya que también servirá para “alimentar otras experiencias de cooperación, producción, distribución y de consumo de este tipo de productos”.
A su vez, María Teresa Zorrilla Rodríguez, de la comunidad de Peñas Negras, Oaxaca, explicó que se necesita promover la organización de la gente más pobre y “unirnos para buscar estrategias que permitan a los pueblos negros, campesinos, mujeres organizadas, profesionistas con conciencia social y a las organizaciones cercanas a las comunidades, participar en la consolidación de la economía de nuestro país”.
Sería un honor --dijo-- que el Senado de la República participe en fortalecer e impulsar este proyecto.
De igual forma, invitó a los diferentes órdenes de gobierno a que se involucren con esta empresa social para que juntos fortalezcan y mantengan la economía de nuestro país, independientemente de los movimientos de la macroeconomía.
En su oportunidad, Delmiro Vázquez Pérez, secretario de la Unión de Productores Orgánicos San Isidro Siltepec, indicó que se han comprometido a trabajar con productos orgánicos, que están libres de contaminantes químicos, con la finalidad de conservar el suelo y cuyo consumo mejorará la calidad de vida de la población.
En tanto, Raymundo García Cruz, presidente de Xuajin Me Phaa A.C, mencionó que el capital social de la cooperativa proviene de un movimiento plural de individuos que por generaciones “venimos haciendo realidad el proyecto de México Profundo a lo largo y ancho del territorio nacional”.
“Este proyecto está vivo y va seguir vivo, hemos resistido 500 años y seguramente nuestros hijos, nietos y bisnietos van a seguir con él”, sostuvo.
Por su parte, la presidenta de la Red, Margarita Muciño Muciño, destacó que el reto del organismo es que el consumidor acepte los productos que elaboran, por lo que más que apoyo económico requieren incentivos para promoverlos y comercializarlos.
Los alimentos de la cooperativa, agregó, se caracterizan porque su proceso de producción se basa en un manejo agroecológico altamente diversificado, con fertilidad natural y libre de contaminantes.
A su vez, Mario Rechy, presidente del Consejo de Ancianos de la agrupación, subrayó que en el mercado global se pretende llegar a unidades de comercialización que cumplen determinadas normas para venderse en unidades fijas.
Los precios de dichas unidades, dijo, se negocian de acuerdo a la norma y la puntualidad en que se entregan, por lo que la Red “está en la dirección correcta”, pues comercializa por debajo de su costo de producción.
Por parte del Centro de Agroecología San Francisco de Asís, Jorge Aguilar Reyna resaltó que más 72 por ciento de los mexicanos compran sus alimentos en tiendas comerciales, “que cada vez más se convierten en grandes monopolios que controlan la mayoría de los anaqueles”.
Dijo que es necesario el apoyo a pequeños productores para acceder a los mercados como una alternativa de desarrollo para las regiones pobres, bajo un esquema de comercio justo.
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