Número-992

• El dictamen también conmina al Ejecutivo federal a exponer su labor en torno a las recomendaciones de la OCDE y el Coneval.
• Los programas sociales no combaten la desigualdad, funcionan más bien como publicidad electoral: senadora Lorena Cuéllar Cisneros, del PRD.

La Secretaría de Desarrollo Social y la Comisión Intersecretarial en la materia, deberán informar a la Comisión Permanente acerca de las acciones programático presupuestales que se propondrán, a fin de combatir la pobreza y reestructurar los programas de desarrollo social.
Esto, luego de que el Pleno de la Comisión Permanente aprobó un dictamen en el que además, se solicita al Ejecutivo federal dar a conocer, a través de las áreas competentes, las acciones realizadas y programadas en atención a las recomendaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Al manifestar su voto a favor del dictamen, la senadora Lorena Cuéllar Cisneros, del Partido de la Revolución Democrática, expresó con este acto se da un primer paso hacia una revisión más profunda de la política del país.
En el país, el combate a la pobreza es un tema muy polarizado que tiene su origen en un modelo económico creado por multimillonarios y que ha sumido a millones en la pobreza. “Mientras nuestro país tiene a millonarios en la lista de los hombres más ricos del mundo, casi 87 millones de mexicanos presentan una o más carencias sociales que pueden ir desde la vivienda hasta la alimentación”, aseguró.
Los programas sociales, consideró, no han logrado combatir la desigualdad y funcionan más como instrumento publicitario y sobre todo electoral.
En este sentido, refirió que el informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2014 del Coneval, muestra el rezago en materia social desde hace más de dos décadas; hay más servicios pero no de calidad y no están al alcance de la población vulnerable.
En tanto que la OCDE advierte que la economía mexicana, en las últimas tres décadas experimentó una prolongada desaceleración del crecimiento, minado el nivel de vida de sus habitantes y socavado su confianza en las instituciones públicas.
Las recomendaciones emitidas por ambas organizaciones plantean la necesidad de cambiar el modelo económico y atender inmediatamente a las comunidades que padecen mayor marginación, finalizó la senadora Cuéllar Cisneros.

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