Es un delito que en muchas de las ocasiones al ser trasnacional tiene un carácter análogo al tráfico internacional de armas y drogas, puntualizó.
El legislador de Acción Nacional formuló los anteriores conceptos desde la tribuna del Senado para hacer un público reconocimiento a Querétaro por convertirse en el primer municipio del mundo en adoptar y firmar un Convenio en Materia de Trata de Personas con la ONU.
En su opinión, la trata de personas es “la esclavitud del Siglo XXI”.
Es --añadió-- una violación a los derechos humanos que afecta a su vez la fibra más sensible de toda persona y al atentar, entre otras cuestiones, en contra de su libertad, constituye por tanto un delito no solo contra la persona misma, sino también contra el Estado.
Citó que de acuerdo a la ONU y al Reporte de Trata de Personas del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, México se encuentra catalogado como fuente, tránsito y destino para la trata de personas, explotación sexual comercial, trabajo forzado.
En virtud de ello, consideró necesario adquirir medidas a nivel internacional que funjan como impulsoras en la cooperación entre estados, y dentro de los cuales se encuentra la Campaña Corazón Azul, lanzada por la ONU en 2008, en Viena.
El objetivo de la campaña es la sensibilización para la lucha contra la trata de personas, así como el generar una participación social en dicha temática.
El senador Tamborrel recordó que en abril de 2010 el gobierno mexicano y la oficina de la ONU para el Control de las Drogas y Prevención del Delito pusieron en marcha dicha campaña, lo que significó que nuestro país se convirtiera en el primero en el mundo en hacerlo y en líder regional para la prevención de trata de personas.
Por ello, aseguró que el convenio signado por el municipio de Querétaro representa un parteaguas pues contribuye no sólo de manera directa a la erradicación de la trata de personas en México, sino en generar conciencia pública respecto de la referida temática.
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