COMUNICADO-1400

•  Esta legislación pretende que el Ejecutivo mantenga un control absoluto sobre todos los actores del sector

Para que los órganos reguladores en materia energética cumplan con su objetivo principal de ser entes encargados de normar objetiva y democráticamente, es indispensable que éstos sean independientes y autónomos tanto en sus decisiones como en su actuación, afirmó el senador del PRD, Benjamín Robles Montoya.

Al fijar su voto particular en contra del dictamen que expide la Ley de Órganos Reguladores Coordinados en Materia Energética y la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, dijo que con esta legislación se pretende que el Ejecutivo mantenga un control absoluto sobre todos los actores del sector energético.

Dijo que en la ley no se establece el que los órganos tengan autonomía técnica, debido a la amplía injerencia del Ejecutivo federal por parte de la Secretaría de Energía, ya que vulnera el principio regulador y objetivo en dichos entes.

La supeditación de los órganos al Ejecutivo federal es rotunda y contundente; el ejecutivo no quiere ser supervisado  y mucho menos que se puedan tomar decisiones contrarias, manifestó.

A la democracia mexicana aún le falta mucho por aprender y esto queda claro por el esquema de órganos reguladores coordinados en materia de energía que hoy propone el Ejecutivo federal, el cual no puede ocultar su intención de administrar y controlar todos los procesos de la administración pública, puntualizó.

---000---