COMUNICADO-1196

• No se garantizan las inversiones de las transnacionales, señala

El dictamen que expide las leyes de Petróleos Mexicanos y de la Comisión Federal de Electricidad rompe la integración de estas empresas, fomenta el florecimiento de negocios personales a costa de Pemex y la CFE, empodera a la Secretaría de Hacienda, detona la corrupción y no garantiza la inversión de las transnacionales a largo plazo.

El senador del PRD, Luis Sánchez Jiménez, en la presentación de sus reservas al dictamen, aseguró que debe separase las actividades de Pemex con la visión de ver todo “como negocio”. Es decir, agregó, se confiere a los particulares realizar la refinación, petroquímica, transporte, almacenamiento y comercialización de combustible.

Dijo que el Senado expresó renuencia a ser parte activa en la supervisión de este sector y sólo queda como una oficialía de partes, lo que es “un papel denigrante”.

Pemex y la CFE requieren de un Consejo de Administración que esté integrado con profesionistas y no con burócratas, a efecto de hacerlas verdaderamente empresas que busquen el beneficio económico del país y la autosuficiencia energética.

El papel relevante, aseguró, lo tendrá la Secretaría de Hacienda, quien determinará a quién se les asignan los contratos y a quién no y los solicitantes se irán a formar, apuntó.

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