Versión estenográfica de la conferencia de prensa de las senadoras Mariana Gómez del Campo Gurza, Layda Sansores San Román, Gabriela Cuevas Barrón y Zoé Robledo Aburto
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Buen día tengan todas y todos ustedes. Agradecemos que nos acompañen en esta conferencia de prensa.
Primero, destacar que el próximo sábado se celebra el Día del Niño, y en el marco de la celebración estamos presentando una iniciativa de ley con la que queremos contribuir a la consolidación de los derechos de la infancia, no solamente de aquellas niñas y niños mexicanos; sino que también se vean respetados los derechos de miles de niños y adolescentes migrantes que se encuentran en nuestro país.
Queremos compartirles una iniciativa que se integra al paquete de reformas a la Ley de Migración, que hemos presentado en los últimos meses, que nos comprometimos a impulsar, particularmente los senadores Layda Sansores, el senador Zoé Robledo, el senador Humberto Mayans; desde el mes de octubre de 2013, durante la Semana del Migrante.
A partir de entonces, hemos presentado tres iniciativas de reforma en los siguientes rubros:
Primero, fortalecimiento al Instituto Nacional de Migración, en abril de 2014.
Segundo, acceso a la justicia y debido proceso, presentada en julio de 2014.
Regularización administrativa y alternativas a la detención, presentada en diciembre de 2014.
Estas propuestas han sido trabajadas, elaboradas de la mano con la sociedad civil.
Quiero compartirles que existe un grupo de trabajo sobre política migratoria, agradecemos el apoyo y colaboración del Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, A.C.; del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez; FUNDAR; Centro de Análisis e Investigación, A.C.; y IMUMI, Instituto para las Mujeres en la Migración; INEDIM, Instituto de Estudios y Divulgación sobre Migración; INSIDE, Instituto para la Seguridad y la Democracia; M3, Movimiento migrante mesoamericano; NALAC, Alianza Nacional de Comunidades Caribeñas y Latinoamericanas; REDIM, Red por los Derechos de la Infancia en México; Servicio Jesuita a Migrantes México; Misión para Migrantes y Refugiados, SMR; Sin Fronteras; así como también expertos en el tema migratorio, como Leticia Calderón, Elba Coria, Gisele Lisa Bonnici, José Antonio Guevara, Karina Áreas, Karina Franco, Gabriela Morales y Rodolfo Córdova, de FUNDAR.
Agradezco a los compañeros del PRD, al senador Armando Ríos Piter, al senador Zoé Robledo, a la senadora Layda Sansores, porque siempre hemos trabajado, insisto, este tema de la mano.
A cada una de mis compañeras y compañeros del Partido Acción Nacional. Nuestra presidenta de esa Comisión tan importante, que es la Comisión de Nuestros Niños, donde afortunadamente se aprobó esta ley para proteger los derechos de nuestra niñez; y ahora les comparto un poco los contenidos.
La senadora Layda Sansores, quien preside en este momento la Comisión de Migración, que más adelante ella también podrá compartirles que esta mañana nos reunimos con el comisionado del Instituto Nacional de Migración. Me parece importante que les comparta algunos de los puntos que se trataron en esta reunión.
Y por supuesto, también la senadora Gabriela Cuevas, quien preside la Comisión de Relaciones Exteriores, y también ha insistido muchísimo en el apoyo, en ver de qué manera desde este Senado de la República podemos seguir abanderando la causa de la niñez migrante.
Con la propuesta que estamos presentando el día de hoy en este Senado, estamos buscando que la determinación del interés superior de la niñez verdaderamente se convierta en una prioridad. Que logremos que la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes sea la que determine los ejes rectores para cumplir esta meta.
Una acción particular es que sea la Procuraduría Federal de Protección a la Niñez o de las procuradurías de las entidades federativas, las instancias que realicen esta determinación; tal y como lo establece la Ley General de la materia.
Queremos eliminar la discrecionalidad con la que muchas veces el Instituto Nacional de Migración actúa, de una forma con respecto a niños migrantes acompañados; y de forma distinta con los niños que viajan solos.
Buscamos también que el INAMI deje de ser juez y parte en los procedimientos que lleva a cabo con la niñez migrante, que no sea su función principal la de deportar de manera indiscriminada a la niñez migrante; sin que se lleve a cabo un procedimiento administrativo de por medio, cumpliendo con ello con una de las virtudes de la Ley General y también de su reglamento.
Basta comparar el incremento en la detención de niñas, niños y adolescentes, que han sido presentados ante la autoridad migratoria, y que terminan siendo devueltos a su país de origen por parte del INAMI.
Los datos son contundentes: la detención y devolución de niños pasó de 7 mil 31 en 2013; a 16 mil 644 en 2014. Es un incremento del 136 por ciento de detenciones y devoluciones; sin que se respetara el debido proceso, falta de claridad e incluso incongruencia entre normas; y lo único que propicia es que se viole la ley por un lado y por otro lado, que se estén violando los derechos humanos.
Se ha perdido también el sentido humano que debe guiar la actuación de la autoridad. Muchos de los niños se han visto obligados a abandonar sus países y comunidades por la violencia, por la inseguridad, por la falta de oportunidades para desarrollarse; y la respuesta del Gobierno mexicano debería ser acogerlos, protegerlos empleando en los casos que amerite, la figura del asilo.
Lo que ocurre hoy con esta política persecutoria, es condenar a esos niños a situaciones de enorme riesgo.
México se ha caracterizado siempre por ser un país de brazos abiertos. Tenemos que ser un factor clave para superar esta crisis humanitaria que se vive en América Latina.
Hablar de niños que viajan solos, es hablar de los más vulnerables, de acuerdo al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
El número de casos de niñas, niños y adolescentes que emigran sin compañía de un adulto, aumentó 333 por ciento de los años 2013 a 2015, y solamente los casos que fueron registrados por autoridades mexicanas pasaron de 5 mil 596 a 18 mil 650 en esos dos años.
Les voy a compartir también cifras de lo que ocurre en Honduras, en Guatemala, en El Salvador, con todos aquellos niños que quieren atravesar por México y llegar hacia los Estados Unidos.
Lo que nosotros queremos con esta iniciativa es que haya una verdadera coordinación operativa y presupuestal entre el Instituto de Migración, el DIF nacional y los sistemas de DIF de las entidades federativas, porque hoy hemos llegado al extremo de que el Instituto que debería poner a disposición del DIF a los niños no lo hace porque no cuenta con el personal, con las instalaciones o el presupuesto necesario ni en los DIFS ni en las Procuradurías de Protección a la Infancia.
Que ese es uno de los temas que tratamos el día de hoy con el Comisionado Nacional. No hay recursos para atender a nuestra niñez migrante.
Es muy difícil implementar las leyes que hemos aprobado en este Senado, si el Ejecutivo Federal no se sensibiliza con respecto a que debe haber un presupuesto específico, y por eso queremos armonizar la legislación para que sea atendido de fondo, y sin recursos va a ser muy complicado.
En 2015, el Instituto de Migración recibió el presupuesto más alto en toda su historia: 12 mil 760 millones de pesos. Es decir, 111 por ciento más que el del Ejercicio Fiscal 2014, pero que una proporción muy alta de estos recursos se destinen a gasto, en comunicación y gasto corriente, hace que no ocurra nada con respecto a nuestros niños migrantes.
¿Nosotros qué estamos proponiendo? Pues que se distribuya entre instancias, que se destine a programas que son urgentes, como lo es este programa.
En los tres años que lleva esta administración, ha ejercido un total de 22 mil 138 millones de pesos; cifra casi igual a lo ejercido de 2004 a 2012, y eso no puede seguir igual porque la cifra de niños solos que han sido retenidos indebidamente va en aumento, y a ello se suma la creciente cantidad de niños que son retornados hacia los Estados Unidos.
Para cerrar y darle el uso de la palabra a las senadoras y senadores y a las organizaciones que nos acompañan, quien quiera hacer uso de la palabra, así puede hacerlo en este espacio.
Concretamente estamos buscando a través de esta iniciativa armonizar la Ley de Migración con las disposiciones que este Senado de la República aprobó en la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes para eliminar incongruencias, tener una verdadera coordinación operativa entre las instancias de gobierno para que se privilegie el interés superior de la niñez, y que se cuente con el presupuesto preciso para que se cumpla la ley.
No queremos tener leyes de avanzada que quedan en letra muerta, porque no se pueden ejecutar porque no hay un solo centavo para ejecutarlas.
Que no haya más distinciones entre los niños y los adolescentes que viajan solos, acompañados, o aquellos que son separados. No más discriminación ni violaciones a sus derechos humanos.
En el marco del Día del Niño, estamos presentando esta iniciativa, y yo espero que se sigan sumando más senadores y senadoras de todos los partidos políticos, porque es un tema sensible.
No es una reforma constitucional como las que se han hecho en este Senado, pero debiera ser un tema prioritario para todos los grupos parlamentarios.
Yo cedería el uso de la voz a la senadora Layda Sansores, presidenta de la Comisión de Migración de este Senado.
SENADORA LAYDA SANSORES SAN ROMÁN: Muy breve, nada más para subrayar lo que dijo mi compañera Mariana.
Ha sido un encuentro entre compañeros de diversas fracciones. Va a ser muy plural el origen de esta iniciativa, porque creo que la niñez lo vemos como de un interés superior, y estoy segura que va a tener éxito.
Ya estamos trabajando intensamente sobre ella, y una de las propuestas centrales, porque ya existe una ley que dice que los niños no deben quedar presos, ellos no le llaman “presos” sino albergados en las estaciones migratorias que, aunque “la jaula sea de oro”, pero que ya las hemos ido a visitar y son cárceles, sino que deben pasar a los albergues del DIF que no existen. Y el único que hemos visto que existe, precioso, que está en Chiapas, tiene un personal de 30 personas muy capacitadas, pero solamente tienen tres niños porque Migración no se los manda porque no vayan a huir.
Faltan incluso protocolos y coordinación.
Pero de lo que se trata es que haya una Procuraduría Federal de Protección a las Niñas, a los Niños y a los Adolescentes acompañados, no acompañados o separados, porque no deben de ir directamente al Instituto de Migración, debe de ir a una procuraduría que considere si deben de ir incluso a luchar por su calidad de refugiado, que yo creo que eso también sería muy importante, acompañados de un abogado.
Cada niño debería de tener un debido proceso, y esto creo que también va a ser fundamental.
Es una ley prometedora.
El problema de la migración es muy duro, muy doloroso en nuestro país. Genocidio, dicen los sacerdotes que están en los albergues, y si es doloroso para ellos, es más doloroso para la niñez migrante.
Creo que esto hoy nos une a todos. Es un arcoíris hoy esta presentación de partidos políticos que nos da muchísimo gusto y nos parece muy alentador.
Y gracias a todas las organizaciones civiles porque realmente se ha hecho comunicación con ellos y hoy ya involucramos también a la autoridad, porque queremos ir todos juntos en equipo.
Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA; Senadora Gabriela Cuevas.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRÓN: Muchas gracias senadora Mariana Gómez del Campo, muchas gracias compañeras y compañeros y también agradecer a las organizaciones que son además los héroes de estas historias de migración.
Muchas gracias por todo el trabajo que realizan.
Pensar que la migración es un gusto o es un placer o que simplemente es producto de que alguien desea, por una causa fortuita dejar su comunidad, dejar su casa, su familia, dejar incluso el lugar donde han enterrado a sus muertos, es parte de una premisa equivocada.
Quien migra lo hace por necesidad; lo hace porque puede morir por la violencia, como sucede en los casos de Honduras, del Salvador, de Guatemala, o como bien lo sabemos en México, porque morir de hambre también es morir.
La falta de oportunidades laborales, la falta de un desarrollo institucional, la falta de oportunidades de justicia también ocasionan fuertes migraciones y es la migración el desafío más importante que va a tener el mundo durante todo el Siglo XXI.
Hoy lo vemos en Europa en una crisis humanitaria, pero no es menor la crisis humanitaria que se vive en Centroamérica y que se empieza a vivir también en nuestro país.
Siendo México un país que ha expulsado a millones de connacionales, lo mínimo que debiéramos ser es solidarios y empáticos con este tema.
Sin embargo, a pesar de que ya están establecidos los temas más importantes de la agenda migratoria, tanto en la Constitución, en la Ley de Migración y en la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, la realidad es que hoy es letra muerta.
Hemos hecho muchas de las y los senadores aquí presentantes, importantes esfuerzos legislativos para lograr que por fin se cumpla esta legislación, incluso demos pasos adelante, como sucede con la iniciativa que hoy estamos anunciando.
Sin embargo, también hay que decirlo, hay un problema real en la aplicación en materia de políticas públicas, porque primero, los niños, niñas y adolescentes que deciden migrar no acompañados o que son separados, primero no cuentan con las instalaciones adecuadas en las estaciones migratorias.
En muchos de los casos tampoco se cuenta con personal capacitado para poder tener siquiera una mínima confianza con estos niños. Las instalaciones, lejos de lo que se establece en la legislación, son espacios que se encuentran dentro de las estaciones migratorias y aunque a veces digan que los maneja el DIF, la realidad es que siguen siendo espacios dentro de enormes rejas, mucho más custodiadas que muchos reclusorios.
Si eso se llama detención administrativa, bueno, estamos teniendo serios problemas de lenguaje.
Por otro lado, también muy importante, México dejó a un lado su tradición humanitaria. Si revisamos las cifras de los últimos dos años, mientras en México nos quejamos de Donald Trump y nos quejamos de las grandes deportaciones que ha hecho Barack Obama, en los últimos dos años México ha deportado a más centroamericanos que toda la Unión Americana.
De ese tamaño es el problema de México y su compromiso o más bien su falta de compromiso humanitario. Mientras hacia el norte decimos que hay que construir puentes y ay que construir fronteras del Siglo XXI, donde prevalezcan los derechos humanos, hacia el sur damos la espalda y si bien no construimos muros, sí los llenamos de policías y ese trato es el mismo trato que reciben los niños, niñas y adolescentes.
Si revisamos también datos de algunas ONG’s alrededor de un 80 por ciento de las niñas, jóvenes o mujeres que cruzan por nuestro país están sufriendo violaciones o ataques sexuales.
Sí, también revisamos lo que está sucediendo específicamente con los adolescentes, es todavía una realidad más grave, porque los niños y niñas pueden contar con algunos espacios en ciertos albergues de la sociedad civil, pero con los adolescentes es mucho más complicado.
A los adolescentes hoy se les ve como potenciales criminales. Yo celebro la presentación de esta iniciativa, celebro el esfuerzo plural que se está llevando a cabo y por supuesto pondremos el mejor de nuestros esfuerzos para que México deje de ser el país del doble discurso, el país de la hipocresía migratoria.
Muchas gracias, gracias senadora.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Le damos el uso de la palabra al senador Zoé Robledo y después pasaremos también a escuchar a doña Gabriela Morales del Grupo de Trabajo sobre Política Migratoria.
SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchas gracias senadoras, senadores, a los amigos de las organizaciones.
Yo creo que este es uno de los grandes desafíos de nosotros como generación de políticos, ante la posibilidad de hacer algo, de adecuar políticas públicas, de adecuar marcos regulatorios o dejar que el tema pase y el Senado se vuelva una institución más de la que no escuchan, no ven y no sienten el problema migratorio.
Basta estar ahí, basta estar en el “Albergue del Buen pastor”, de Olguita, en Tapachula, y que te diga aquí me vienen a echar los del ISSSTE y los del IMSS a todos los que se cayeron de “la Bestia” y que no los atienden los servicios de salud de México, porque dicen, son basura.
Basta ir a la 72, a Tenosique, y estar ahí y que te diga Rubén Figueroa, a ver si nos ayudan con unas pastillas anticonceptivas porque es lo que más nos ´piden las chavas que llegan al albergue, porque saben que las van a violar y ya su única aspiración es no embarazarse.
Basta ir a Arriaga con Hainan y ver que de las poquitas patrullas que hay en Arriaga, una se dedica de manera sistemática a estar hostigando a la gente del albergue. Entonces, algo estamos haciendo mal y tenemos que modificarlo.
Es muy simple: las políticas públicas, las leyes, los marcos regulatorios están hechos para transformarse, para adaptarse a nuevas realidades, no para que los defendamos en la lógica de que estuvieron bien diseñados en su momento.
Ya lo han dicho aquí: fuimos un gran país de refugio. En 1982 de la noche a la mañana 25 mil guatemaltecos aparecieron en Chiapas y convivimos con ellos, aprendimos a convertir la miseria, partimos la tortilla a la mitad.
Y de esa historia se construyeron lazos de amistad que hoy no se olvidan. Chiapas y Guatemala, pluma de la misma ala, decíamos por allá.
¿Y hoy qué estamos haciendo con el problema y la crisis humanitaria que significa menores no acompañados? Nada, obedeciendo lo que nos dicen los gringos, así de sencillo.
Porque ellos quieren que el problema se establezca acá. Migrar es un derecho humano y el Estado Mexicano debe de protegerlo. Punto. Es todo lo que deberíamos de hacer.
Hacer que de ese viacrucis que significa cruzar por nuestro país sea un viacrucis menos violento, en donde no nos golpeen, en donde no los roben, en donde no los violen y en donde no los maten.
El reto es enorme, yo no digo que sea pecata minuta; es gigantesco. Pero es justamente de las razones por las cuales quisimos ser representantes populares.
Esos centroamericanos, en su mayoría, son objeto también de protección de derechos humanos por parte de las autoridades mexicanas.
Si los queremos ver o no quedará en nosotros y quedará en nuestra conciencia, y quedará también como parte de lo que nos pregunten dentro de 20 años: tú qué estabas haciendo cuando se estaban muriendo, cuando las estaban matando, cuando las estaban violando. Tú qué estabas haciendo. Estabas en una posición de poder, pudiste hacer algo.
Nosotros desde hace ya 3 años que de manera muy plural decidimos hacer algo y empezamos por entender el problema desde el origen, desde ahí, desde esas heroínas y héroes que son la gente que dirige los albergues.
Entonces en esto cada paso es fundamental. Cada reacción, cada milímetro que avancemos es fundamental.
Qué bueno, y yo celebro y seguiré celebrando que el tema esté en el Senado de la República.
Que este no sea un Senado insensible al dolor humano, que no seamos nada más pragmáticos respecto a las coyunturas y veamos la gran película y la gran oportunidad de servir y de hacer algo para detener esta terrible crisis humanitaria que vive nuestro país.
Felicidades a todos y bienvenidas al Senado.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Ahora le damos el uso de la palabra a Gabriela Morales, del grupo de trabajo Sobre Política Migratoria. Adelante.
C. GABRIELA MORALES: Buenas tardes.
Desde el grupo de trabajo sobre Política Migratoria, agradecemos la oportunidad de estar el día de hoy presentes en esta propuesta de iniciativa de Reforma de la Ley de Migración con la Ley General de derechos de niñas, niños y adolescentes.
Valoramos que esta propuesta de armonización entre ambas leyes van a introducir lo que ya se está construyendo en materia de un Sistema Nacional de Protección Integral para los derechos de niñas, niños y adolescentes y queremos solamente presentar algunos mensajes de por qué es importante el apoyar esta Iniciativa y que se llegue a concretar la armonización.
En primer lugar, es una oportunidad porque la niñez migrante por primera vez es tomada en cuenta primero como niñez, antes que la etiqueta o la calidad migratoria.
En segundo lugar, porque estamos ante el rompimiento de un paradigma en donde se deja de ver como algo transitorio o algo que es un objeto de colocación en diferentes países cuando son sujetos de derechos los niños, niñas y adolescentes y esto cambia al tratarse de velar por sus derechos de forma integral, romper con el discurso de que la deportación es una forma de protección y que se hace en base a la determinación del interés superior, pero sobre todo porque aparece la figura de la Procuraduría Federal de Protección a la Infancia en donde el Instituto Nacional de Migración ocupa otro lugar ya no en esencial ni el principal para determinar cuáles son las medidas o las mejores acciones a tomar en cuenta para estos niños, niñas y adolescentes.
Es importante que vayamos transformando nuestro discurso y nuestras acciones y una parte de ello pasa por dejar de situar al Instituto Nacional de Migración como el principal actor en materia de infancia migrante.
Con esta armonización se permitirá lo que ya mandata la Ley General de derechos de Niñas, Niños y Adolescentes en el sentido de que no deberán de permanecer en las estaciones migratorias privados de su libertad esta población, que no solamente corresponde a este estándar nacional.
Ya en el 2014 la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en su opinión consultiva 21, establecía que bajo ningún concepto los niños, niñas y adolescentes deberían de permanecer detenidos, asegurados, alojados con el término o eufemismo que se quiere utilizar, pero esa no es una medida de protección.
En segundo lugar, se incluye a la infancia migrante dentro de las diversas políticas públicas que atañen a la infancia.
Esto es muy importante porque regularmente se suele ver a la infancia migrante meramente como en el tránsito, pero la realidad es que en nuestro país levamos décadas donde hay niñas, niños y adolescentes que residen no solamente en la frontera sur sino en el largo del país porque México es su nuevo hogar o es su opción de vida frente a los contextos de violencia que se viven no solamente en el triángulo del norte sino en otros países.
Finalmente, para las organizaciones que integramos el grupo de trabajo sobre política migratoria, es importante acentuar que parte de este cambio de paradigma pasa por ver estas medidas transitorias como son los albergues y empezar a trabajar por iniciativas como serían las medidas alternativas de cuidado que son las opciones de vida, modelos de residencia e incluso esperamos que a mediano y largo plazos se hable de otros tipos de medidas a través de los cuales los niños, niñas y adolescentes puedan integrarse plenamente a nuestra sociedad.
La protección de los derechos humanos de esta población es responsabilidad, primero, del Gobierno, pero también de la sociedad y sobre todo no puede ser posible que el discurso aún siga siendo que no hay recursos que alcancen.
Y es muy sencillo: podemos mirar que este discurso de la seguridad y del control que se aplica a la política migratoria, si de verdad se quiere hacer una protección integral de los derechos humanos, de la población y de la infancia migrante en particular, se pueden reconducir estos derechos porque en materia de seguridad nacional hay bastantes recursos y si hablamos de protección integral va por otra lógica: Va por la lógica de desarrollo social y humano, va por la lógica de seguridad humana y va por la lógica de una protección integral.
Eso sería todo. Gracias.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA. Muchísimas gracias.
¿Algún senador o senadora que quiera hacer uso de la palabra?
Pues muchísimas gracias a todos y muy buenas tardes.