Versión estenográfica del mensaje de Manuel Camacho Velasco, hijo del fallecido senador Manuel Camacho Solís, durante el Homenaje Luctuoso de cuerpo presente en el Senado de la República.
Hoy en la mañana, la verdad no sabíamos que esto iba a ser algo tan importante. Siempre nosotros, mis hermanos, Mónica, la familia, los hermanos de mi papá quisimos y admiramos mucho a mi papá.
Y ahora estaba platicando con mi hermano, que si hay algo que a mi papá le hubiera dado gusto es que hubiera representantes de todas las fuerzas políticas aquí acompañándolo con él. Creo que no hay algo que le hubiera llenado más de alegría, porque desde distintas trincheras siempre fue lo que buscó.
Y a manera de darles las gracias, yo creo que ustedes conocieron a mi papá como político; entonces quisiéramos compartir quién era él en lo personal. Y para ello, si me lo permiten, les quiero leer una carta que cuando estamos ciertas instrucciones que mi papá nos dejó, limpiando algunos documentos, encontramos una carta que nos escribió mi papá hace unos años y que coincidentemente nunca nos la dio pero siempre supimos que estaba ahí; y creo que hoy en día la carta no sólo aplica a nosotros, sus hijos, sino que también puede ser que ahí haya algunas lecciones para algunos de ustedes que crean en mi padre.
Y su manuscrita no era tan buena, entonces si de repente no se lee una palabra, les ofrezco una disculpa:
“Mis queridos hijitos:
Como lo hizo tantas veces mi papá conmigo, quisiera desde este sitio tan lejano y hermoso, decirles qué pienso sea mejor para mis adorados hijos.
1. Que sean buenos y nunca se arrepientan de ello. Cuando la vida les ofrezca los caminos fáciles, tómenlos si coinciden con sus valores y creencias; pero si están en contra del bien, de lo que debe ser, tengan la fuerza suficiente para no caer en lo fácil.
No se dejen confundir ni se engañen a sí mismos, es preferible perder que hacer mal las cosas en la vida.
2. Que sean valientes. Con frecuencia en nuestras vidas llegan momentos difíciles, ustedes los han vivido; cuando eso pase, ármense de valor, miren hacia adelante o si es necesario, deténganse y descansen; pero nunca desesperen, no corran, no huyan.
Si no se dan por vencidos, lo que hoy no es posible lo será mañana. Lo que hoy les angustie, una vez que lo superen los llenará de júbilo y tranquilidad.
3. Manténganse unidos. Somos el club y ustedes están de testigos, mis lindos tigres. Que nunca pase nada que los separe, cualquier cosa que lleve a separarlos o desconfiar, es de principio un error, algo malo.
4. Busquen siempre la felicidad. Busquen lo bueno en la vida, corrijan lo que esté en sus manos cambiar; no se desesperen por lo que ustedes no puedan cambiar, no guarden rencores contra nadie, sean agradecidos.
5. Siempre que puedan tengan un gesto amable, cariñoso con los pobres, los enfermos, con quienes sufran.
6. Quieran mucho a México, es nuestro país, el único al que pertenecemos, el único que nos pertenece. Conozcan su historia, sus paisajes, su cocina, el arte, amen a su patria.
Los quiero mucho, mis lindos hijos. Que tengan lindos sueños”.
Muchas gracias a todos.
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