SÍNTESIS INFORMATIVA

16 Opinión Martes27deoctubrede2020 DIARIO IMAGEN El populismo no es malo en sí. Es un atributo de los sistemas políticos de todo género. Sólo es malo cuando el apodo de populista se suma a una serie de incongruencias y desfacha- teces y a la distracción de las masas para lograr objetivos conservadores y retardatarios de todo tipo. Es muy sencillo de identificar. El populismo para fines de la de- recha ha sido un gran aliado para disfrazar los intentos de pretender engañar, bajo el cobijo del pueblo, el verdadero ADN de quienes lo aplican. Enardecer, exaltar a las ma- sas, siempre es mejor que someterse a las pruebas de los programas, a la honestidad y a la transparencia exi- gibles en todo momento. Espantar con el petate del muerto es un viejo truco. Vociferar que se lucha por reivindicaciones poster- gadas -más echarle la culpa al pasado de lo que falla en el presente- es me- jor que afrontar la realidad. Proponer imposibles en su nombre es tan des- cabellado como abstenerse en aras de la cautela para no hacer nada. N OS DEJAMOS ENGAÑAR POR LAS APARIENCIAS Flavio Josefo, el gran historiador de la antigüedad, mencionó en sus cró- nicas a Julio César, a Catilina y a Druso como los grandes propulsores del populismo en Roma. Lo hacía por la cercanía sentimental que tu- vieron con la base popular, con la plebe del viejo Imperio. Dejarse en- gañar por las apariencias siempre fue el caldo de cultivo para preten- der el progreso. También, el término populista, de origen ruso, ha sido utilizado por autores de avanzada para caracteri- zar a gobiernos elegidos democrá- ticamente o para adjetivar movi- mientos de tipo socialista con el fin de atribuirles todas las características negativas. Hasta ha llegado a decirse que es un modelo de Estado. P OPULISMO DE DERECHA , SIEMPRE AJENO A LO INDISPENSABLE El populismo de derecha en Lati- noamérica ha prometido todo a to- dos. Perón en Argentina, Getulio Vargas en Brasil, CarlosAndrés Pé- rez en Venezuela, Somoza y Ortega en Nicaragua, Pinochet, Frondizi y Piñera en Chile, Fujimori en Perú, forman una legión de impostores.Un tema demasiado extenso. El populismo de derecha no tiene límites cuando de apelar a los senti- mientos patrióticos se trata. Ha sido usado para un barrido y un trapeado. El populismo siempre ha sido la con- tracara del elitismo, aunque en el fon- do se identifiquen como dos gotas de agua. No existe “el pueblo”, sino que existenmúltiples pueblos en cada país. Aalguno de ellos se tiene que servir. El populismo de derecha siempre es ajeno a lo indispensable. No tiene una visión sobre el desarrollo regio- nal equilibrado, ni sobre la distribu- ción del ingreso, ni sobre el ejercicio republicano del poder, sobre los de- beres esenciales del Estado o sobre la finalización de las dinastías, los cenáculos o la desaparición de pi- rrurirs ignorantes y bien servidos. Evade pronunciarse sobre los de- rechos y libertades fundamentales, la lucha por el sindicalismo autén- tico, los derechos reproductivos, la libre expresión, la manifestación de las ideas, el impulso a la comunidad científica o a las actividades que propugnan por definir con mayores atributos la lucha contra la miseria. E L PODER PRESIDENCIAL OMNÍMODO LO ES TODO Todo eso es ajeno al populismo de derecha.Afalta de una idea clara so- bre el gobierno de una Nación, sobre el respeto a sus principios fundadores, el populismo tira hacia los montes de Úbeda, y siempre saca raja de lo baladí, de lo insustancial, de lo chis- toso. Hace befa de todo aquello que en realidad envidia o desconoce. Los presidentes de la República crean a placer a los populistas su- balternos, proponen los poderes sub- sidiarios, los de los militares entor- chados, los de los bufos represen- tantes populares, los virreyes esta- tales, los lorocutores de moda, los líderes de organizaciones sociales, los partidos y los interlocutores fun- cionales del régimen, entre muchos otros especímenes de estas sectas. El poder presidencial omnímodo lo es todo. El define los términos del populismo de derecha. En todo el mundo sólo queda cuando mucho una docena de países con esta ca- racterística disfuncional. Los demás se fueron para nunca volver. Han si- do sustituidos por congresos y me- canismos horizontales de control y de opinión pública. N UESTRO PRESIDENCIALISMO , VULGAR REPRESENTACIÓN DE FEUDALISMO La terca realidad del sistema político mexicano supera incluso muchas fantasías de la ciencia política. Los grupos de poder que existen fuera de nuestras fronteras son producto, entre otras cosas, de la competitivi- dad histórica por el mercado, de las invenciones científicas, del éxito empresarial. Aquí no. La única competencia real es por el favor del dedo presidencial. Po- derosos y adinerados, surgidos de la miseria ancestral del campo y de las ciudades, compiten todos los días por el favor del dedo unipersonal que los protege. Mientras más cerca, mejor, y más fortuna. Pero no tan cerca, porque quema siempre. La demasía de presidencialismo que nos caracteriza convierte en ca- cicazgos a todos los poderes subal- ternos. Es una vulgar representación de feudalismo que se resiste al pro- greso y a cualquier manifestación de modernidad. El que convierte los terrenos productivos en fosas co- munes para depositar los cadáveres de los indefensos. T ODO VALE Y ES BIEN VISTO EN EL CIRCO DE LA DISTRACCIÓN POPULISTA El populismo de derecha es bastante atrevido. Lomismo puede osar a pre- sumir un sistema de salud novedoso que arroja que ocho de cada diezmu- jeres que padecen cáncer demama ha visto interrumpido su tratamiento por la desaparición de losmedicamentos o por causa de la recurrente pandemia que le vino “como anillo al dedo”. Produce especímenes empode- rados que relatan que Oscar Wilde nació en Estados Unidos, que Ma- mado Nervo fue uruguayo, que Pi- nochet fue un general que dio el gol- pe de Estado en Italia, o que usa el escudo nacional como el logotipo de un abarrote chocolatero. Todo eso, aplaudido por los fanáticos del chairopopulismo. Todovaleyes bienvistoenel circo de la distracción, en este chiquero de inmundicias. El presidente se queja en las “mañaneras” de que esmuy di- fícil vender el avión. ¿Qué no lo había rifado? Sigue pensando que México se fundó hacer diez mil años... y no hay nadie entre sus colaboradores cer- canos que le pare sus atrevimientos. Y TODO SIRVE PARA CONTRIBUIR A LA REELECCIÓN ANTICIPADA La parte noble de lo que queda, las redes digitales, por naturaleza inde- pendientes, caen sobre él como ca- taratas: ¿Para qué adelantamos el reloj una hora? Mejor vamos ade- lantándolo tres años más para que ya acabe el sexenio. Esto ya se ha vuelto insoportable. El populismo de derecha siempre es ajeno a lo indispensable. Yse usa para un barrido o para un trapeado. Todo sirve, piensan en Palacio Nacional para contribuir a la reelec- ción anticipada, o para dejar en el poder a un vástago. La monarquía de huarache. Las dinastías del an- durrial. El populismo de derecha al servicio de la ambición despótica. ¿No cree usted? Índice Flamígero : El populismo en el poder envalentona a la antes di- minuta extrema derecha marginal. Numerosos líderes de extrema dere- cha parecen asociarse con los extre- mistas: el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, elogia al gobiernomilitar; Trump retuitea contenido de los trolls de la derecha alternativa; y el Partido Popular Indio hindú-nativista que go- bierna India tiene una buena relación con el violento grupo paramilitar RSS. Con el populismo, los perio- distas le dan inusual publicidad a la extrema derecha. Eso ayuda a que las ideas de la ultraderecha seanmás comúnmente aceptadas. Después de todo, “el pueblo” debe defenderse o desaparecer. Y la extrema derecha atemoriza a los liberales y a los in- migrantes con los mítines violentos, amenazas de muerte, tiroteos en Christchurch y en El Paso y asesina- tos políticos (como el de Jo Cox, el británico anti Brexit y el de Walter Lübcke, el demócrata cristiano ale- mán). Los tabúes se desmoronan mientras el lenguaje populista se nor- maliza. Cuando Trump se refirió a los “violadores mexicanos” en 2015, fue impactante. Hoy la gente apenas prestaría atención. Los populistas tie- nen que seguir radicalizando su idio- ma para seguir recibiendo atención. http://www.indicepolitico.com [email protected] @IndicePolitico @pacorodriguez Í NDICE POLÍTICO Por Francisco Rodríguez El populismo de derecha, al servicio de la ambición despótica El populismo siempre ha sido la contracara del elitismo, aunque en el fondo se identifiquen como dos gotas de agua. No existe “el pueblo”, sino que existen múltiples pueblos en cada

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