Versión de las palabras del presidente de la Junta de Coordinación Política, Jorge Luis Preciado Rodríguez, en la entrega-recepción de la Presidencia de la Comisión de Administración del Senado de la República
Yo estaba aquí haciendo un dibujito, pensando en qué iba a decir si me daban la palabra y la verdad estaba recordando ahorita que dijeron Comisión de Administración, estaba recordando la primera vez que yo fue diputado hace ya 17 años.
Entonces, cuando llegamos al Congreso ―sin dar mucho detalle, porque me dieron un minuto y ya me quedan 30 segundos― yo quise visitar al Comité de Administración del Congreso local y me di cuenta que no existía, y luego buscamos, si no había Comité de Administración, pues a quien administraba los recursos del Congreso local y pues tampoco existía, y dije, bueno, algún contador o alguien aquí pues que sea el que hace los pagos y todo eso, y para mi sorpresa tampoco existía.
Entonces, dije: “Bueno, entonces cómo funciona el Congreso pues para pagar sueldos y teléfonos y todo ―iba a decir celulares pero creo que no existían todavía―”, y resulta que había una figura que era el presidente de la Gran Comisión que era el diputado que por sí solo tenía más de la mayoría absoluta de la Cámara.
Entonces el gobierno del estado mandaba la subvención, el dinero al presidente de la Gran Comisión pero se lo mandaba en efectivo, en una cajita y entonces cada empleado del Congreso pasaba y le daban su sobrecito y luego seguían los diputados. Me acuerdo que eran sueldos diferenciados: si eras de un partido te daban un poquito más y si eras de otro te daban un poquito menos, pero era el sobrecito.
Y entonces era algo muy curioso; yo me desempeñé en áreas financieras cuando inicié mi carrera política y era algo curioso ver cómo en el Congreso una sola persona pues decía: “Oye, pues necesito gasolina”, y ya sacaba de la bolsa y “Órale, ahí va para la gasolina y para las casetas, para el hotel”, y ahí te daba para que gastes.
Así funcionaba hace pues ya 17 años el Congreso de Colima y entonces, bueno, lo curioso es que yo fue el último presidente de la Gran Comisión y entonces nos llegaba la cajita aquella pesadita y pues hacíamos lo mismo, hasta que creamos el primer Comité de Régimen Interno y a partir de ahí generamos un Comité de Administración.
Por supuesto, al último presidente de la Gran Comisión antes de su servidor, pues lo inhabilitamos por varios años porque se le olvidó una cajita debajo de la escalera y ahí nos pudimos dar cuenta que esa caja que llegaba ahí pues no siempre salía completa para los legisladores, sino que una partecita pues quedaba por ahí olvidada, digamos lo menos, y, bueno, lo tuvimos que inhabilitar.
Y como no había control de vehículos porque nadie llevaba registros de nada, pues en cada Legislatura se perdían un montón de carros; entonces, finalmente pudimos recuperar dos Suburbans en la casa de este último legislador y pues las incorporamos al patrimonio del Congreso.
Así era más o menos cómo funcionaba en Colima y lo pueden llevar a cualquier estado de la República y por supuesto lo pueden llevar al Congreso federal, porque era la misma figura del presidente de la Gran Comisión, con su gran administración que era él mismo.
Entonces, creo que ahora cuando, 16 años después que estamos aquí en el Senado y nos damos cuenta que hay una Comisión de Administración, que todos los sistemas de transparencia ya no sólo piden sino exigen y nos tienen obligados a mandarles la información, que los grupos parlamentarios tienen a su interior comités de administración que les permiten decirle a los ciudadanos que los recursos están siendo bien manejados, que están siendo bien ejercidos, que hay un resultado y que se ha llevado una administración totalmente profesional, como lo podemos decir aquí en el Senado de la República, a mí no me queda otra cosa que felicitar al presidente que termina, al senador Jorge Luis Lavalle por este año de trabajo y por todo ese esfuerzo que hicieron junto con los demás integrantes de esta Comisión de Administración del Senado de la República, y desearle todo el éxito al senador Raúl Aarón Pozos Lanz en esta nueva Presidencia que él asume y que obviamente esperamos todos los senadores y todos los grupos parlamentarios que se continúe con el buen trabajo y aún más, se pueda mejorar en esta nueva etapa.
Desde la Junta de Coordinación Política, reciban nuestra felicitación y todo el apoyo que sea necesario para que desarrollen un gran trabajo y que esa cajita que yo recuerdo hace 17 años, pues no se vaya a quedar olvidada por ahí.
Muchas gracias.