Versión estenográfica del mensaje de la senadora Mónica Fernández Balboa, Presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República, en la inauguración del Foro Virtual “La Publicidad de las Sentencias: Una nueva obligación de Transparencia”, que organiza el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, INAI. 

 

Gracias.

 

Muy buenos días tengan todas y todos ustedes. Mucho gusto de saludar a todo el auditorio.

 

Por supuesto, permítanme saludar y darle las gracias de una manera muy especial y muy afectuosa, a la comisionada Blanca Lilia Ibarra Cadena, que ha sido quien me invitó y ha sido, además, la promotora de este importante evento que, como lo acaba de decir el Ministro, yo creo que va a ser muy importante escuchar todas las reflexiones y toda la materia de este tema que hoy nos reúne aquí. Muchas gracias, Blanca Lilia.

 

Señor Ministro, me da mucho gusto saludarlo, al ministro Juan Luis González Alcántara, es un placer.

 

Al magistrado José Luis Vargas Valdez. No lo alcanzo a ver en mi pantalla, pero un saludo afectuoso.

 

Y, por supuesto, también con mucho afecto y con mucho aprecio, a nuestro querido amigo, el comisionado presidente Javier Acuña Llamas, porque es un promotor, es un promotor: hace y deja hacer, y coadyuva con todas las propuestas y todos los programas que el resto del Instituto, de las comisionadas, de los comisionados, con todas sus iniciativas él siempre está listo para apoyar y para ayudar. Muchas gracias, Francisco.

 

A todos los demás invitados a este Foro, me da mucho gusto saludarlos.

 

Como lo dije hace un momento, agradezco la invitación para participar en este tema que es “La publicidad de las sentencias, una nueva obligación de transparencia”, organizado por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, a propósito de la nueva obligación señalada en la fracción segunda del artículo 73º de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública, publicada el pasado 13 de agosto en el Diario Oficial de la Federación, una vez que concluyó el proceso legislativo en las Cámaras del Congreso.

 

Esta reforma, recién publicada, se convierte en una nueva manifestación de ejercicio público, que va en el refuerzo del Estado de Derecho.

 

El Estado y el derecho, mantienen una relación de interdependencia recíproca. Si por derecho se entiende el conjunto de normas u orden normativo, en el que se desenvuelve la vida de un grupo organizado; la política tiene que ver con el derecho bajo dos puntos de vista: en cuanto acción política, se lleva a efecto a través del derecho; y en cuanto el derecho, delimita y disciplina la acción política.

 

Esta es la idea que defiende el politólogo Norberto Bobbio, en una de sus obras más importantes, “El Filósofo y la política”, lo traigo a cuenta para poder explicar que la reforma que obliga a la publicación de todas las sentencias que emita el Poder Judicial, tiene plena justificación para seguir avanzando en la consolidación de un gobierno democrático.

 

Desde la óptica de dicho concepto, un gobierno democrático debe de rendir cuentas para reportar o explicar sus acciones, y debe transparentarse para demostrar su funcionamiento y ser sujeto del escrutinio público.

 

Esta caracterización es defendida también por otros politólogos, como Eduardo Guerrero, y su uso lo traigo también a cuenta a este Foro.

 

Igualmente, la rendición de cuentas es un principio esencial de la democracia. Abarca de manera genérica, tres maneras diferentes para prevenir y corregir abusos de poder; obliga al poder a abrirse a la inspección pública, lo fuerza a explicar y justificar sus actos y lo supedita a la amenaza de sanciones, en su caso.

 

De tal suerte, que se puede reconocer en la rendición de cuentas, un mecanismo de los ciudadanos para controlar el ejercicio del poder que aplican en cualquier escala los servidores públicos de todas las esferas del Estado.

 

Permítanme referirme a la rendición de cuentas, en conjunción con dos elementos que le son indispensables: la transparencia y la publicidad.

 

La transparencia puede ser representada como una ventana abierta, para dejar que el ciudadano conozca y vigile el estado de los ramos y las actividades que realizan los responsables del ejercicio legítimo del poder –Ejecutivo, Legislativo y Judicial- como uno de los principios de la democracia por el que se reconoce el derecho de los ciudadanos a la información y a la libertad de expresión, de forma que la sociedad puede tener a la vista el examen de datos, registros y todo tipo de informaciones en poder de los agentes del Estado.

 

La rendición de cuentas y la transparencia se han convertido en valores fundamentales en las democracias de nuestra época. Actualmente, ningún régimen que se precie de calificarse como transparente, no puede calificarse así si no tiene una garantía de control ciudadano sobre la acción de sus instituciones.

 

Y, finalmente me refiero al principio de publicidad.

 

Se trata de un principio importante, que sirve de complemento para dar validez a la transparencia: el principio de publicidad, entendida como la condición para que las acciones y decisiones de los agentes políticos, se muestren a la luz pública y con ello se hagan asequibles al conocimiento de los ciudadanos, a fin de saber si existe sustento legal, legitimidad y justicia en su trabajo.

 

La obligación de la publicidad de los actos gubernamentales es importante no sólo, como se dice, para permitir al ciudadano conocer las acciones de quien detenta el poder, y en consecuencia para poder controlarlas; sino también porque la publicidad en sí misma es una forma de control, es un expediente que permite distinguir lo que es lícito de lo que es ilícito.

 

Cuando la sociedad pide transparencia, está solicitando que las organizaciones del Estado mexicano hagan del dominio público la información con la cual diseñan y ponen en práctica las acciones que están bajo su responsabilidad. El acceso a la información y a la transparencia, con su vínculo a la rendición de cuentas, vuelven más eficaces a las instituciones.

 

En mi responsabilidad de senadora, resulta de forma especialmente gratificante presenciar de manera directa, cómo las diferentes manifestaciones del ejercicio democrático que proponemos, alcanzan su culminación y se incorporan al orden jurídico.

 

Doy la bienvenida a la implementación de la nueva disposición que deberá asumir el Poder Judicial, y poner a disposición del público actualizando las versiones públicas de todas las sentencias emitidas.

 

Muchas felicidades, muchas gracias al INAI, felicidades y mucho éxito al Poder Judicial por esta nueva encomienda y este nuevo trabajo que tienen.

 

¡Felicidades! Gracias.