Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

Mensaje del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, senador Ernesto Cordero Arroyo, durante el informe de actividades de la Comisión de Protección Civil, presentado en la Antigua sede de la Cámara de Senadores.

Muy buenas tardes a todos. Les damos la bienvenida al Senado de la República, a nombre de mis compañeros que me antecedieron en el uso de la palabra.

Quiero saludar a los alcaldes del estado de Yucatán, bienvenidos.

Y quiero saludar también a los representantes de la Policía Federal, de la Marina y del Ejército que nos acompañan; sean ustedes bienvenidos, esta es su casa. Estamos muy orgullosos del trabajo que día a día desempeñan.

Quiero saludar también al director general de la Coordinación de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, que nos acompañe el día de hoy, quien es la máxima autoridad en temas de protección civil del Estado Mexicano. Muchas gracias, Ricardo, por estar con nosotros.

Este es un tema de la mayor relevancia, un tema que pareciera que no se le presta atención, un tema que pareciera que no está en el centro de nuestras vidas.

A mí me tocó ser secretario de Desarrollo Social y me tocó enfrentar muchos desastres naturales y no tan naturales, desastres de todas maneras. Y me tocó desde Mexicali; Parral, en Chihuahua; Tamaulipas; San Luis Potosí; Baja California Sur; Tlaltenango, en Zacatecas; aquí, pasando el Periférico, en Valle Dorado, en el Estado de México; en Quintana Roo; en Villahermosa. En fin, no hay un estado de la República en donde no nos haya tocado algún desastre natural.

Y nos tocaba llegar desde antes de que llegara el huracán o si era una inundación no prevista, había que estar ahí con las familias, solidariamente. Y te das cuenta de que hay mucha de la pérdida material y humana, que podía haberse prevenido si se hubieran hecho las cosas adecuadas con antelación.

Y también, muchas vidas humanas que se pueden salvar, si se llega con oportunidad al lugar del siniestro o del desastre.

Y también, que muchas familias pueden reconstruir su vida y su familia si se les apoya de manera solidaria en las horas posteriores al desastre y en las semanas posteriores; para poder apoyarles a reconstruir su patrimonio.

También es un tema de protección civil no nada más los desastres naturales; también accidentes y siniestros que tienen responsables humanos, se atienden con la Ley General de Protección Civil. Y es ahí donde pareciera que absolutamente todo lo que pasa en términos de accidentes y de desastres, es responsabilidad del Poder Ejecutivo, del Presidente de la República; y no nos damos cuenta de que hay muchas responsabilidades, facultades, atribuciones en la Ley General de Protección Civil a los gobiernos de los estados y a los gobiernos municipales.

Entonces, esto es una responsabilidad compartida de todos, que tenemos que entender y tenemos que abocarnos a que funcione mejor.

Los sismos del 7 y 19 de septiembre, de nuevo nos enseñaron lo frágiles y lo vulnerables que somos ante un desastre natural. Pero también nos enseñaron que como Estado, estamos mejor preparados y más fuertes de lo que estábamos en el pasado.

Yo, al igual que en el 85, visité y traté de ayudar en muchas de las zonas donde había afectaciones, en los edificios. Y de manera anónima, tampoco se trataba de irse a tomar la foto, sino al revés, el tratar de ayudar.

Y me di cuenta de lo mismo que había visto en 85, cuando tenía 16 años: que en cada uno de los edificios que se habían colapsado, al frente estaba o un soldado o un marino o un policía; lo cual me llenó de gusto y de satisfacción, el ver que el Estado Mexicano tiene capacidad de respuesta ante una situación como esta.

Ya después, y de manera organizada, llegó la sociedad civil. Llegamos todos los que quisimos ayudar, los que traíamos el agua, los que ayudaron a remover escombros y los que andaban consiguiendo la motosierra, pero eso fue gracias a que había una organización y que, repito, estaban las fuerzas policiacas y estaban las fuerzas armadas ahí ayudando a sus paisanos, a sus hermanos, en una situación muy complicada.

Eso, la verdad, sí me llena de esperanza en este país. México tiene futuro; México tiene rumbo; México tiene destino.

Y también, hay que decirlo, tenemos mucha suerte, porque gracias a que pudimos ensayar dos horas antes en un simulacro, es que se salvaron muchas vidas el 19 de septiembre. La gente sabía qué hacer, dónde resguardarse, si valía la pena ir por las escaleras o mejor quedarse en una parte segura en los edificios; gracias a eso es que se salvaron muchas vidas.

Si ustedes ven las pérdidas humanas, muy lamentables, en cada uno de los edificios que se colapsaron, son mucho menos de la totalidad de los habitantes de ese edificio. Hubo gente que pudo salir, hubo gente que se pudo resguardar, y eso fue gracias a los simulacros y gracias a la coordinación de Protección Civil de nuestro país, que también ha hecho su trabajo, como ya lo mencionó Ricardo, no de ayer, no de la semana pasada sino desde hace 32 años.

Este tema de la protección civil, sin duda, tiene muchos retos que enfrentar. Y reconocer también, que como lamentablemente muchos de los grupos o de las personas que más sufren o más vulnerables son, también son los adultos mayores, los niños, las niñas, personas con discapacidad, y tenemos mucho qué hacer para que esa fragilidad y esa vulnerabilidad que tenemos en grupos específicos de nuestra sociedad, también se vayan mitigando y vayamos saliendo adelante.

El tema de la protección civil en México llegó para quedarse. Mencionaba Ricardo, que en el último mes ningún otro país sufrió tantos desastres naturales como México, eso es correcto, pero yo me atrevería a decir que eso se sigue cumpliendo en los últimos diez años.

Yo creo que en los últimos diez años, como consecuencia del cambio climático, ningún país ha sufrido como ha sufrido México, las consecuencias del cambio climático.

Y, por supuesto, tristemente hay países, islas en el Caribe, en el Pacífico, que o están desapareciendo o van a desaparecer como consecuencia del cambio climático; pero México tiene costas en el Océano Atlántico, en el Océano Pacífico.

En México, cada año entran dos huracanes al menos, la pregunta es qué categoría y por dónde, pero de que en México llegan los huracanes, tiembla y estamos sujetos a desastres naturales, de eso no hay duda, por lo cual hay que prepararnos y hay que celebrar que todos como Estado, en esta ocasión el Senado de la República, esté contribuyendo con su granito de arena, con su esfuerzo.

Quiero felicitar a la senadora Angélica Araujo, presidenta de la Comisión de Protección Civil, que haya hecho este esfuerzo, que siga trabajando incansablemente, y que haya hecho de la Protección Civil en el Senado un modo cotidiano de vida.

Muchas gracias, senadora, la felicito, ha hecho usted un buen trabajo. Muchas gracias.

No queda más que pedirles que se pongan de pie para inaugurar esta Semana de Protección Civil en el Senado de la República, el lunes 6 de noviembre, siendo las 12 horas con 12 minutos, se declara formalmente inaugurada la Semana de Protección Civil en el Senado de la República.

Enhorabuena, felicidades y bienvenidos.

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