Versión Estenográfica de la presentación del Anuario Estadístico de Cine Mexicano 2016, Instituto Mexicano de Cinematografía, en el Senado de la República.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Quiero darle la más cordial bienvenida a todas y a todos.

Antes que nada, les ofrezco una sincera disculpa por la demora, ya nos habíamos saludado aquí hace rato, a las 12, y una más de las muchas crisis parlamentarias que hemos tenido estos días, que no son ni responsabilidad ni justificación, pero tuvimos que irla a atender.

Muchas gracias, de verdad, a todos por estar hoy aquí con nosotros, a esta presentación del Anuario del Cine Mexicano.

Agradezco a Jorge Sánchez Sosa, director general del IMCINE, que nos acompañe el día de hoy aquí.

A Agustín Torres, de CANACINE.

Al senador Blásquez, a la senadora Sylvia Leticia. Muchas gracias, senadores, por acompañarnos el día de hoy aquí.

También quiero agradecer a Marco Polo Constandse, director y productor de cine mexicano.

A Rodrigo Herranz, de la Academia. Muchas gracias, Rodrigo.

Y a todas y a todos quienes nos acompañan el día de hoy aquí.

Creo que esta presentación reviste un momento muy particular sobre el que está viviendo el país y su sociedad. En varios sentidos: por un lado, los datos que ya hemos podido ver sobre una conducta y un hábito que se ha convertido la asistencia a salas de cine; un hábito tan arraigado en nuestro país.

Por el otro lado, la producción mexicana, que no solamente crece; sino que además, cada vez es más premiada, más reconocida; que de por sí ya lo era, pero hoy creo que con mucha, con una gigantesca calidad que de la misma manera sigue creciendo.

Y también los retos que esto implica, no solamente para la industria, sino también el cine como una expresión artística y el cine como un medio de comunicación que arraiga identidad y que también es uno de nuestros mejores embajadores ante el mundo, sobre lo que somos realmente los mexicanos, lo que aspiramos ser, nuestros miedos, nuestros sueños, nuestros desafíos, nuestro horizonte de futuro conjunto como nación.

Sin duda, como chiapaneco que soy, muchas cosas siempre nos llegan tarde. No así el caso del gusto por el cine, desde hace muchos años en Chiapas ha habido salas de cine; algunas de ellas hace muchos años musicalizadas con marimba, por cierto, cuando el cine era mudo.

Y hoy de verdad me da mucho gusto estar con ustedes. Y en ese sentido iniciar este evento, primero, con la presentación del Anuario Estadístico, por parte del maestro Jorge Sánchez Sosa, director del IMCINE.

Licenciado, bienvenido al Senado. Tiene usted la palabra.

MAESTRO JORGE SÁNCHEZ SOSA: Muchas gracias, senador. Gracias por la invitación a la Comisión y a los senadores aquí presentes, especialmente a usted, que la preside.

Y mencionarles lo siguiente:

Están aquí con nosotros y me siento muy orgulloso de su presencia, los colegas y compañeros que han desarrollado este Anuario Estadístico; algunos de ellos desde hace siete años. Es decir, es un anuario bastante joven, pero que se ha ido perfeccionando a lo largo del tiempo y nos dan una visión muy concreta a través de esos datos duros y ciertas apreciaciones del estado del cine mexicano, que como bien decía el senador Robledo, goza de buena salud.

A veces nos cuesta reconocer, porque bueno, es una situación de país harto compleja; que también hemos sabido desarrollar industrias a medios de comunicación y relación entre sociedad y creadores de manera eficiente.

Creo que así lo ha sido en relación al cine mexicano, que hay muchos retos que tenemos que enfrentar; pero sin duda que hay una voluntad por todas las partes, de que esto sea una forma de sociabilizar, de restituir el tan mencionado tejido social y de llevar adelante este país.

Decirles que como IMCINE, nosotros tenemos la misión de procurar la diversidad en esta expresión artística e industrial, tratamos de hacerlo lo mejor posible. Hemos emprendido nuevos caminos, hemos encontrado entonces nuevos aciertos, nuevos errores; pero uno de los mayores retos que tenemos que enfrentar es el mundo digital.

Desde el inicio de esta gestión, nos propusimos crear plataformas digitales que estuvieran al servicio del ciudadano y de los creadores.

Posteriormente voy a regresar a esto y darles el ejemplo muy claro y concreto de lo que estamos haciendo.

Y creo que el otro gran reto es el reto de la organización de la sociedad civil. Nosotros quisiéramos tener un diálogo mucho más fluido con los creadores, con los productores, con los artistas, agrupados en sus correspondientes asociaciones u organizaciones; pero no es sólo defecto de este sector cinematográfico la carencia de esas organizaciones. Creo que se relaciona también con el estado del país y el estado de la sociedad.

De tal forma que cuando tenemos a nuestro lado tanto a la CANACINE como a la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas; nos da especial gusto. Pero no pensemos que esto se extiende a todos los sectores del quehacer cinematográfico.

Ojalá y fuera así. Llegamos al extremo, y ahora me centro en la presentación del Anuario, de que cuando hay una demanda específica, una sugerencia, una opinión, les digo: “tráiganme el documento firmado por cinco”. Con eso le damos cauce y analizamos la situación.

Pero es imposible, como institución, estar atendiendo una por una de las opiniones.

Decirles que el Anuario, como mencionaba, cumple su séptimo año. Este año agregamos un capítulo, que es el relativo a las comisiones fílmicas.

¿Qué son las comisiones fílmicas?

Ustedes lo podrán ver en detalle, pero son organizaciones dentro de las diversas instituciones de los estados o de los municipios, que procuran los servicios a producciones audiovisuales, sean en cine, sean en video o cualquier medio o formato.

Estas comisiones yo las admiro mucho, porque el esfuerzo por existir con medios tan limitados, realmente han dado una perspectiva muy clara de lo que puede representar generación de empleo y derrama económica en diversos estados de la República.

Así que decidimos incorporarlas y esperamos que tengan un proceso de institucionalización que posibilite mayor eficiencia en el servicio a los productores. Esencialmente una comisión fílmica, da servicios a los productores del audiovisual.

Es importante hacer notar que el PIB de la cultura en 2016 representó 2.8 por ciento del total nacional. Hay quien hace una apreciación diferente y en general hacia arriba de ese PIB de la cultura; pero nosotros nos quedamos con este, que es un dato o una interpretación estadística que va acorde con instituciones que tienen a su cargo la medición. De esto, el 8.2 por ciento es el PIB de la industria cinematográfica.

En ese sentido, decirles también que el comportamiento económico del cine es casi tres veces más dinámico que el conjunto de la economía mexicana. Eso es de especial importancia.

Creemos que en ese sentido lo que ha generado esta posibilidad tan dinámica de la industria cinematográfica son: la existencia de fideicomisos, que no me detendré en ellos, pero simplemente decirles que es el FIDECINE abocado al cine comercial, al fomento del cine comercial; y el FOPROCINE, abocado a un cine con intenciones más culturales.

Existe lo que conocemos como EFICINE y que en el ámbito legislativo bien se conoce, porque es un artículo específicamente o se rige por un artículo, el 229 de la Miscelánea Fiscal, que posibilita que 700 millones de pesos que los contribuyentes tendrían que pagar por concepto de Impuesto Sobre la Renta a Hacienda por año, en este caso específico, 2017, 700 millones de pesos pueden ser deducibles al cien por ciento en ese ejercicio fiscal o en los diez próximos.

Ese ha sido un motor muy importante de la industria cinematográfica y decirles que comparativamente este año, nosotros estamos hablando de 700 millones de pesos para el estímulo fiscal; contra 180, 185 de los fondos que son fideicomisos y que me referí a ellos como FOPROCINE y FIDECINE.

Tenemos un record histórico en la producción de películas mexicanas, son 162 películas que se produjeron en el año 2016. Y la buena noticia es que la producción no apoyada por el Estado, creció 32 por ciento con respecto a 2015.

Alguien me decía: “esto es una contradicción, porque el Estado debería ser más activo al respecto de las coproducciones y por qué enorgullecerse de que la iniciativa privada tenga crezca un 32 por ciento con respecto a 2015”. Y es muy simple: ojalá y el Estado no tuviera un papel más allá, sobre todo en el ámbito de la producción, que fomentar a través de esos instrumentos a los que nos hemos referido; y que al tener una industria sana, la industria privada tenga un papel mucho más activo al respecto.

Decirles también que tenemos el registro más alto de producción de cine documental. Hay quien opina que el cine documental es lo más destacado del cine mexicano en los últimos años.

Yo comparto esa opinión, ha habido un gran crecimiento del cine documental. Y se produjeron 66 y es la cifra más alta desde que se inició el registro, en 2010.

Estoy seguro, aunque no lo podemos comprobar, de que es la cifra más alta en la historia del cine mexicano.

Y nos enorgullece mucho que 52 por ciento de las películas mexicanas, mujeres participaron como guionistas, productoras o directoras. No tenemos una política específica en términos de equidad de género; pero sí una intención que debemos, yo creo, ir plasmando, proponiéndonos pequeñas metas pero muy cuantificables, para poder intensificar la participación de la mujer en todos los ámbitos de la industria cinematográfica.

También en términos de distribución y exhibición, decirles que tuvimos 90 estrenos de cine mexicano en 2016, que tuvimos 30 millones y medio de asistentes viendo cine mexicano, y es la cifra más alta en la historia reciente.

En ese sentido, decirles que la asistencia a ver películas nacionales, creció 74 por ciento respecto a 2015, algo que no es privativo del cine mexicano; es que la comedia fue el género que tuvo mayor asistencia y tuvo el 67 por ciento de esos 30.5 millones de mexicanos, fueron a ver comedia.

Esto es un tanto contradictorio, es una discusión perpetua, si debemos seguir haciendo comedias, promoviendo comedias o no. Creo que la comedia tiene una tradición en el cine mexicano maravillosa, quizá el ejemplo más claro es cómo una película como “Nosotros los nobles” se inspiró de alguna manera en una película que fue dirigida por don Luis Buñuel a principios de los años 50’s.

Entonces a lo mejor es un poco burdo el ejemplo, pero retoma y actualiza una situación de familia, con gran acierto en su ritmo, en su casting, en su dirección, en fin.

Decirles también que de esos estrenos nacionales, el 23 por ciento fueron documentales. Esto es muy significativo, no es fácil encontrar un promedio de esa naturaleza, una cifra de esa naturaleza en relación a lo que se estrena en un país y que 23 por ciento de esos estrenos sean del género documental.

Y algo que es muy importante para nosotros, es que 13 películas en 2016 superaron los 700 mil asistentes, ¿por qué digo esto?

Porque el año 2013, que fue un año en que tuvimos un alto índice de asistencia al cine mexicano, fueron básicamente dos películas, fueron: “Nosotros los nobles”, en segundo lugar; y en primer lugar “No se admiten devoluciones”. Entre las dos coparon prácticamente casi 90 por ciento de la asistencia.

Nosotros queremos diversidad, queremos sí, por supuesto, películas que sean unos verdaderos blockbuster, aquí se usa mucho estos anglicismos, por supuesto que las queremos; pero en este caso de 13 películas con más de 700 mil asistentes, nos resulta sumamente satisfactorio.

Tenemos que procurar el espacio para que la diversidad se manifieste en las mejores condiciones.

Decirles también que en infraestructura de exhibición, hemos crecido de una manera sustancial. Nosotros tenemos un dato de 6 mil 225 pantallas, 248 más que en 2015. Que los cineclubes también han crecido de manera sustancial y festivales también.

Tenemos 133 festivales de cine en el país, que es una cifra que nos lleva a un reflejo inmediato. Tenemos más de 2 festivales por semana en esta nación.

Un dato muy importante y que fue despreciado, digamos, ese aspecto o no le pusimos la suficiente atención anteriormente, y es el relativo a las películas mexicanas en la televisión.

Se ha dado un fenómeno, que es muy interesante: en los últimos 10, 12 años la presencia del cine mexicano contemporáneo en la televisión ha vuelto a ser significativa.

Si ustedes recuerdan, como todos somos muy jóvenes, durante nuestra infancia muy posiblemente lo que vimos de cine mexicano fueron las películas de la Época de Oro.

Las queremos, las apreciamos, es un pasado del cual nos enorgullecemos pero queremos tener cada vez más la presencia del cine contemporáneo en la televisión.

Se logra de una u otra manera decirles, lo verán a través de estos números pero de las películas transmitidas por televisión abierta, es decir Televisa, Televisión Azteca, ahora Imagen, etcétera, 35 por ciento fueron mexicanas, cinco por ciento más que en 2015.

Y de las películas mexicanas producidas desde el año 2000, tuvieron 52 millones de espectadores en televisión abierta privada y 4 millones 800 mil en la televisión pública.

Decirles también que ese aspecto que mencionábamos al principio sobre el cine mexicano y las plataformas digitales, que Netflix, Claro Video y Blim concentraron más del 90 por ciento de los suscriptores.

En ese sentido, decirles que nosotros creamos dos plataformas, una dirigida a entidades, sitios comunitarios y de la cual estamos muy orgullosos, se llama Cinema México Digital. Alcanzamos 300 mil espectadoras y está ubicada la posibilidad de recepción de la señal en 640 bibliotecas públicas, la mayoría de estas, pero engloba también comedores comunitarios, cineclubes, casas de cultura. Alcanzamos 300 mil espectadores.

Les doy un detalle porque luego nos da por manifestar unas cifras que son grandilocuentes por sí mismas. Esta tiene un funcionamiento muy especial, en cada uno de estos sitios se ven al menos tres funciones de cine mexicano, sea de largometrajes o cortometrajes empaquetados para los públicos de dichas entidades comunitarias. Es decir, 640 bibliotecas públicas con tres funciones por semana y hemos tenido 300 mil espectadores el año pasado.

Y para terminar, decirles que en el caso específico de Cinema México, sí ejemplifica una política pública del Estado mexicano a través del IMCINE, que es llegar a aquellos sectores que por diferentes razones no tienen acceso al cine mexicano. Hay un gran problema que ahí ha estado presente, que tenemos que ser conscientes de ello porque, como ustedes saben, los complejos cinematográficos se construyen donde hay poder adquisitivo.

Ha habido una apertura en ese sentido, porque obviamente las compañías de distribución y exhibición son entidades privadas que deben de buscar una operación que genere lucro y se va hacia donde está el poder adquisitivo.

En términos generales debo decirles también que podemos mencionar y que el boleto de cine mexicano es un boleto de bajo costo, pero no lo es cuando se compara con salarios mínimos. Hay que hacer esta operación de una manera muy concreta, muy clara y muy fiel a lo que es la realidad en relación a lo que puede devengar una familia promedio en México y lo que representa el acceso al cine comercial.

Finalmente, agradecer nuevamente. Decirles que ahí tenemos esos retos. El reto principal para nosotros en la vía tecnológica es el mundo digital. Si no entramos al mundo digital por el audiovisual, no alcanzaremos a hacerlo posteriormente.

Y decirles también que, bueno, ahí está la sociedad que tiene que organizar a sus principios, sus demandas y nosotros estamos dispuestos a ese diálogo de manera permanente.

Muchas gracias, senador.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchas gracias, maestro Jorge Sánchez Sosa, director de IMCINE.

Aprovecho para darle la bienvenida al senador Gerardo Flores, es que estoy pensando en el presidente de la Comisión de Cultura; el senador Gerardo Flores, también integrante de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía de aquí del Senado.

Ahora tenemos los comentarios del licenciado Agustín Torres Ibarrola, Director de CANACINE.

Por favor, Agustín.

LICENCIADO AGUSTÍN TORRES IBARROLA: Muchas gracias, senador.

Gracias a la Comisión, al senador Flores, a la senadora Martínez, al senador Blásquez y por supuesto a Jorge Sánchez de IMCINE y a Marco Polo Constansde que nos acompaña también como productor, Rodrigo de la Academia y por supuesto a Salomón por ayudarnos con toda la parte de Logística.

Decirles que también de parte de la industria estamos muy contentos por los resultados que ha tenido la industria en los últimos años, y que quisiera, además de los excelentes datos que nos ha compartido el Director del IMCINE, comentarles algunos otros que complementan el desempeño de por qué la industria está yendo también.

Él mencionaba que tiene mucho que ver con los fondos, lo cual es una parte muy importante, es una pieza fundamental en el crecimiento que ha tenido la industria, y hay otros elementos que consideramos que tienen impacto y que quisiera compartir con ustedes.

Tenemos aquí algunos datos. Aquí estamos viendo cómo el crecimiento que tuvo la industria, el número de boletos fue alrededor del 11 por ciento, muy superior al de la economía.

Aquí tenemos algunos datos distintos con IMCINE básicamente porque estamos incluyendo las funciones de eventos no de cine sino contenido alternativo como conciertos, eventos deportivos, opera, etcétera. Pasamos de 296 millones de boletos a 331. Es algo que si ustedes ven contra lo que estábamos en 2008, es un crecimiento muy importante.

Algo que está incidiendo de manera importante es el precio promedio del boleto. El precio promedio es un indicador que se obtiene de dividir los ingresos totales entre el número de entradas, que desde el 2010 viene a la baja, acumula más del 3 por ciento en términos nominales en este tiempo, y de un año a otro alrededor de 1 por ciento de caída en el precio promedio, lo cual está haciendo que el cine se vuelva muy competitivo frente a otras opciones de entretenimiento y que las familias mexicanas acudan con mucho mayor frecuencia al cine de lo que venían haciéndolo anteriormente.

Si pueden ver aquí, el fenómeno de cómo ha cambiado tanto la taquilla como la asistencia del cine mexicano, por ejemplo en el año 2009 fueron alrededor de 9 millones de boletos contra 31, 30.5 de este año y es un crecimiento del 300 por ciento en estos siete años.

Se estrenaron 85 películas mexicanas comercialmente, contra 202 americanas y 138 del resto del mundo, en total 425 películas.

Un punto que nos parece importante que es de estas 85 películas solamente 10 fueron estrenadas en Estados Unidos que es un mercado con gran potencial y que películas como “No se aceptan devoluciones”, por ejemplo, además de los 600 millones de pesos que hizo en México de taquilla, logró otros 50 millones de dólares en ese momento en los Estados Unidos duplicando los ingresos que había tenido en taquilla doméstica, y creemos que ahí hay un enorme potencial.

Luego son siete películas las que realmente hicieron una cantidad significativa en los Estados Unidos, encabezando la lista “No manches Frida” con 11 millones de dólares.

Creemos que aquí hay un enorme potencial para el cine mexicano, como en los años 50 que de cada peso que hacía el cine en México, hacía otro peso en la taquilla internacional, fuera del país. Creemos que es un área enorme de oportunidad y que debemos, como iniciativa privada, como Estado, como sociedad impulsarlo.

Yo quiero enfocarme ahora no tanto a la parte de producción del cine en México que lo ha dicho a gran detalle el director del IMCINE, sino un poco a ver cómo estamos como país frente al mundo en diferentes indicadores.

La taquilla global, es decir, el dinero que se vendió en todos los países del mundo, fueron 39 mil millones de dólares que, comparado con el 2015, de 38 mil millones de dólares, 38.6 mil millones de dólares tuvo un crecimiento del 1.6 por ciento.

Comparado con México en pesos, en el 2015 se vendieron 13 mil millones de pesos, casi 14 mil; el año pasado 15 mil millones de pesos. Esto quiere decir que tuvimos un crecimiento casi del 11 por ciento, 8 veces superior al crecimiento de la industria a nivel mundial.

Fuimos de los países, como vamos a ver más adelante, que más creció en el mundo.

Somos el cuarto país con más número de boletos vendidos, superados por India, China y Estados Unidos, que por supuesto son prácticamente imposibles de superar por la población que tienen estos países.

Y tenemos muchos más boletos que países con población mayor a la nuestra, como es el caso de Brasil, donde los superamos por una amplia ventaja, países como Reino Unido, incluso Rusia, que tienen una población mayor o muy parecida a la de México.

En cuanto al crecimiento en el número de boletos. Estos son los países que de 2015 a 2016 más incrementaron su taquilla. El que más creció fue Eslovaquia con el 23 por ciento, que es un crecimiento formidable, y México con esta parte de crecimiento en el séptimo lugar. China también viene empujando muy fuerte, Rusia, pero digamos que no solamente somos el cuarto en número de boletos sino que somos el séptimo en cuanto al crecimiento.

Otro tema importante es que somos el sexto país con el precio promedio más bajo del mundo. El más bajo es Venezuela que también tuvo un crecimiento importante en su taquilla, pero bueno, ha caído el precio de manera muy drástica.

La India tradicionalmente ha sido el país con el precio promedio más bajo con menos de un dólar, pero si ven, estamos en 2.6 dólares contra Colombia, que es el país similar al nuestro que más se acerca en precio, muy similar en 2.8 dólares promedio.

Estos son los precios de algunos otros países. Por ejemplo, Argentina prácticamente el doble del precio promedio del boleto; Chile, Canadá. Países parecidos a los nuestros, Brasil con 4 dólares contra 2.6; también esto explica por qué tenemos más asistencia que Brasil, porque en términos del costo del boleto de cine es más bajo.

Estos son los países con asistencia per cápita más alta del mundo. Esto es dividir el número de boletos entre el número de habitantes. Los ciudadanos que más van al cine en promedio son los coreanos, y después está esta larga lista. Estados Unidos con 3.6 veces al año, y nosotros estamos ya muy cerca de entrar a esta lista. Este año llegamos a 2.7 veces al año por habitante; está el último de esta lista del top ten es Canadá con 2.8, entonces realmente es destacable lo que se ha logrado como crecimiento por asistencia per cápita.

Somos también, que este es un punto de la infraestructura muy importante, el cuarto país con más salas de cine en el mundo; también difícil de superar a los tres primeros: China, Estados Unidos y la India. Que China rebasó a Estados Unidos este año en construcción de salas. China construyó más salas que todas las que tenemos en México en un solo año, y bueno, esto también explica gran parte del crecimiento que ha tenido la taquilla.

Somos el segundo país que más salas construyó en el mundo. China construyó seis mil salas; como les comentaba, prácticamente todas las salas de México en un solo año.

México 421, según los datos que tenemos de nuestros socios, y eso nos convierte en el segundo país que más salas construyó, lo cual es un dato muy interesante. Estamos llegando a ciudades que antes no tenían una sala de cine y acercando el entretenimiento a distintas poblaciones que ahora al tenerlo más cerca, a un precio accesible están yendo al cine y antes no iban.

Este es el nivel de penetración. Este es un indicador que se obtiene de dividir el número de habitantes entre el número de pantallas; es decir, entre menos habitantes más salas de cine, más penetración. Hay una pantalla de cine por cada siete mil habitantes.

En Islandia, que lo coloca en el primer sitio en la penetración de las salas de cine; Estados Unidos por ejemplo está en el segundo lugar alrededor de ocho mil habitantes por cada pantalla, y así vamos bajando. Estos son los países con mayor acceso. El décimo es Noruega con alrededor de 12 mil habitantes por pantalla.

México tiene 19 mil, más o menos la mitad de las pantallas que tiene Noruega, que es el décimo con más acceso, pero tenemos prácticamente el mismo nivel de penetración que países como Alemania. Tenemos casi el doble de penetración que Japón, más del doble que Chile; no se diga Argentina, Colombia, el triple de penetración que Brasil. Y eso explica también esta asistencia a las salas.

Esto es un poco cómo ha crecido la oferta de 2008 para acá con 4 mil 500 salas a 2016 con 6 mil 400. Ya nada más un resumen de los datos más importantes de esto.

La asistencia empezó alrededor del 10 por ciento, redondeando los números; el promedio acumula una reducción nominal de casi cuatro por ciento desde el 2010, que eso es algo que pocos productos y servicios han logrado generar en estos últimos siete años.

La asistencia per cápita simplemente el 10 por ciento y eso comentábamos que estamos a punto de ingresar al Top Ten de mayor asistencia por habitante.

Lo de siete películas mexicanas rebasaron la marca del millón de asistentes y bueno, alrededor de 14 se escucha ahora de más de 700 mil, entonces pues es algo muy sano esta diversificación de las películas que están haciendo el grueso de la taquilla.

“Qué culpa tiene el niño” rompió récord también como la tercera película más taquillera de los tiempos recientes del cine mexicano. Este dato como de reflexión, qué podemos hacer para que más películas se exporten comercialmente a los Estados Unidos.

Precio promedio más bajo y el segundo país que mata las construyó y creo que ya es la última, el séptimo con mayor crecimiento en número de boletos vendidos y, bueno, nuestra taquilla creció siete veces más de lo que creció la taquilla global.

Básicamente esa es nuestra información y pues agradecer nuevamente la cortesía, la amabilidad, la hospitalidad de la Comisión y del senador.

Gracias.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchísimas gracias Agustín Torres Ibarrola.

Toca turno de Marco Polo Constandse, director y productor cinematográfico, de hacer también ahí algunos comentarios, desde su aproximación sobre el mismo tema.

Por favor Marco y ojalá y haya dicho bien tu apellido.

MARCO POLO CONSTANDSE: Primero que nada muchas gracias senador por la invitación, Agustín y Jorge.

Lo mío es muy breve. Directamente como miembro de esta industria en este momento y la emoción y orgullo de ser parte de esa industria ahorita, cuando se está haciendo lo que se está haciendo, como lo mencionó Jorge y ahorita Agustín, no siempre suceden las dos cosas al mismo tiempo, no siempre sucede que están los fondos, los apoyos, pero al mismo tiempo la industria está creciendo.

Yo empecé a trabajar en cine cuando se estaban estrenando cuatro películas al año y se estaban produciendo yo creo que esas cuatro. El saber que tienes trabajo, el saber que ese trabajo tiene un público, es muy diferente a cuando yo empecé a trabajar.

Se veían las ganas, se veían las intenciones y ahorita para mí lo más importante es que se está dando que hay un diálogo con el público y ese público es nuestro país.

Están sucediendo cosas muy interesantes ahorita que son que en paralelo está funcionando nuestro cine en México y fuera del mundo. Esta tradición, que existe desde hace muchos años, del cine mexicano que tienen un espacio muy importante en los grandes festivales del mundo, sus grandes cineastas que ha habido durante nuestra historia, de los cuales estamos muy orgullosos, pero al mismo tiempo ahora estamos teniendo una industria sana y un diálogo con el público, que para muchos de los cineastas es muy importante tener ese diálogo.

El cine y las ideas y los cuentos y las historias de las que estamos platicando, las está yendo a ver el público y estamos usando esos incentivos, esos fideicomisos y devolviéndole de alguna manera al público, al país, a través de historias, cuentos y yo creo que cultura.

Los invito a compartir este entusiasmo de ser parte de lo que se está haciendo ahorita desde cada quien su trinchera. Creo que es muy emotivo ver el crecimiento que tiene en todos los ámbitos, yo creo mucho que el cine es una industrial, al igual que una parte cultural.

He tenido oportunidad de participar en ambas como productor en una película que ganó el premio de “Una cierta mirada” en el Festival de Cannes y haber dirigido una película que tuvo más de 4 millones cien mil espectadores y es muy difícil imaginar que esto se pudiera hacer si no estuviera la industria como está ahorita y el crecimiento que ha habido.

Hay una cosa muy interesante que, a pesar de que la película “Después de Lucía” no tuvo los fondos, sí tiene que ver con esto fondos, porque es lo que ha permitido un crecimiento en las compañías productoras, en la inversión privada.

Hay un subsidio no directo de los fondos a otros proyectos y por eso es lo que mencionaba Jorge del crecimiento de la inversión privada, porque es más real ahora en nuestra industria, nos permite abordar los dos tipos de proyectos, deja de haber esa seguridad profesional y seguridad económica al abordar los proyectos y creo que esto, que estamos ante uno de los momentos más importantes, más interesantes en mucho tiempo para esta industria.

Creo que hay que estar muy atentos, creo que el tema digital, el tema de las plataformas es algo que hay que estar muy conscientes, abordarlos, ser prontos en esto, se mueve más rápido que nosotros, pero quiero felicitarlos, quiero agradecerles muchísimo.

Jorge, quiero agradecer muchísimo todo el trabajo que se ha hecho atrás del Instituto y senadores, otra vez muchísimas gracias por la invitación.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchas gracias Marco Polo.

Para cerrar esta parte de la reunión, tendremos también comentarios de Rodrigo Herrán, que viene en representación de la Academia ya demás decirles que hay una conciencia, también somos del ITAM, igual que el senador Flores, nada más que él tomo el camino correcto, el camino de la luz, nosotros tomamos otro.

Por favor Rodrigo.

RODRIGO HERRÁN: Muchas gracias senador, gracias a la Comisión de Radio y televisión y Cinematografía por la invitación y al IMCINE por tener el anuario, el séptimo año que se hace el anuario, el equipo que lo hace es un trabajal.

Me tocó alguna vez presentar en el especial de Guadalajara, no me acuerdo si fue en 2013 ó 14 y creo que es un esfuerzo que hay que aplaudir.

Nos abre la venta un poco, los números, decía ahora Marco Polo, el cine tiene esta dualidad, es industria y es arte, es una cosa muy rara, es un  híbrido, es un bien híbrido.

Entonces, todos estos números nos abren un poco la ventana de lo objetivo, de lo rudo, de la realidad del cine. Si bien hay toda una parte que viene detrás, que es la cuestión cultural, la artística y de sensibilización.

Como bien dijo el senador, soy itamista y los números me vienen muy naturalmente y me encantan y la estadística me gusta y me atrae demasiado.

Yo voy a empezar con algo que no es probablemente tan bueno y que nos preocupa un poquito a la academia, al sistema de artes y ciencias cinematográficas y es un poco la polarización que hay, que ha habido por la forma y consumo, creo que es la globalización y la aceleración de cómo la demanda, la masificación, el cómo accedemos a los bienes tanto culturales como (…)

La red de internet y el multimedia ha explotado, hay miles de maneras de consumir audiovisual que ha polarizado un poco y a veces se nos olvida y toda esta masificación no nos permite poder digerir y disfrutar una obra, porque hay una inmediatez por ser el primero en hacer algo o por tener o por haber visto o por haber hecho.

A veces nos falta hacer una pausa y reflexionar qué es lo que acabamos de ver y ahcer una obra de arte o una escultura, una pintura o una película.

Es gacho que muchas películas tengan una vida mucho más corta de lo que esperaríamos, no todas las plataformas son para todos. Si bien nuestro consumo promedio es de 2.8 películas por habitante, pues sabemos que son 8 ó 10 millones los que van más de seis o siete veces al cine, en nuestro país sabemos que está muy polarizada la pobreza, no sé cómo están los número ahorita, pero por el 40 ó 50 por ciento de la población no tiene acceso al cine y supongo que tampoco tiene internet y un montón de acceso a estas plataforma nuevas de multimedia.

Celebramos que el cine sigue creciendo, el cine mexicano se consume más, pero vemos, sacamos nuestros números, que el 10 por ciento de esas 9o películas estrenadas, 9 películas se llevan el 75 por ciento de la taquilla de los asistentes; 81 películas tienen sólo el 25 por ciento de la asistencia a la taquilla.

Entonces, el reto que tenemos creo para el cine, creo que punta de lanza ahí, es generar más audiencias, que la gente consuma su cine nacional, ya sea en salas, gracias a Cine Latino, las plataformas del IMCINE u otras y bueno, no todo es negativo.

Entonces, yo quiero destacar que una nueva sección me pareció importantísima que es la aportación que el cine y los medios audiovisuales hacen a la cultura de la economía nacional.

Entonces, bueno, los que tengan acceso al anuario verán el trabajal que es esto, pero es el INEGI que toma una serie de factores como el tipo de trabajo, gastos y remuneraciones, para presentar un panorama general de las contribuciones de la industria cinematográfica y los medios audiovisuales a la economía nacional.

Se puede equiparar a la industria cinematográfica con la de fabricación de plástico o por ejemplo, el valor total de los bienes y servicios producidos un poco por debajo de la fabricación de prendas de vestir, por ejemplo, es una industria que está creciendo y que se puede comparar con la fabricación de plásticos o las prendas de vestir.

Tengo que rescatar y retomar la discusión de la importancia de la cultura y las industrias culturales en la aportación a la democracia y la identidad nacional, lo más importante de cultura, es lo que se decía hace rato, es que no se puede medir o sí se puede medir, pero hay ciertas partes que no se pueden medir, como la parte de la sensibilización, lo que el arte y la cultura le dan al ser humano.

Sólo es positivo para su bienestar, es el efecto positivo que la cultura genera en el individuo es fundamental en el desarrollo de una sociedad moderna y pacífica.

Tengo que aplaudir la dinámica de generar y crear nuevas salas, hay miles, cientos de comunidades pequeñas que alguna vez tuvieron cine, tal vez hace 30, 40 años y ahora no tienen cine y hay un esfuerzo muy importante de dar apoyo al cine, de llevar salas, pequeñas salas a un montón de comunidades, además de iniciativas como la semana de Cine en Sociedad y otras funciones itinerantes en un montón de comunidades, estados y ciudades.

Y bueno, creo que es un momento muy importante para la industria, la industria crece, se producen muchas más películas, se estrenan más películas y se está consumiendo más cine nacional.

Ojalá sigamos en ese camino y queremos, desde la academia siempre nos sentimos promotores y queremos respaldar la iniciativa del senador Robledo de llevar la cultura a tener un carácter estratégico, creemos que elevar y proteger la cultura sólo generará un círculo virtuoso de paz y progreso en estos tiempos negros que vivimos.

Gracias.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchísimas gracias Rodrigo.

Te agradezco los comentarios y a todos, a todos quienes ya han participado.

Abriríamos un espacio para comentarios de los senadores integrantes de la Comisión, si quisieran hacer algún comentario.

Senador Gerardo Flores.

SENADOR GERARDO FLORES: Mucha gracias presidente.

Yo en primer lugar quiero celebrar que tengamos esta reunión, porque muchas veces el ámbito de discusión de esta comisión o de otras que pudieran estar relacionadas, generalmente se enfoca a otros temas.

Me parece que la industria del cine, no es criticar, simplemente es un reconocimiento, creo que merece un poco más de atención de nuestra parte y yo celebro que el senador Zoé Robledo así lo haga y esta reunión es una muestra de ello.

Felicito en primer lugar al maestro Jorge Sánchez, Agustín Torres también por la información que nos han proporcionado y los comentarios de Mario Constandse y Rodrigo Herrán.

Yo lo que quisiera comentar: llegué un poco tarde a la presentación de la parte del Anuario Estadístico.

Yo tuve el honor de presidir la Comisión de Radio y Televisión en la Cámara de Diputados, de 2009 a 2012, y con mucho gusto veía yo cómo la industria cinematográfica iba evolucionando, desde mi punto de vista de manera muy favorable.

Después de algunos años complicados se veía un punto de quiebre, quizá un despegue, un número creciente en número de producciones, en número de asistencia a las salas, en número de salas.

Y veo que eso es algo que se ha consolidado, veo con agrado que en lo que pacta tiene que ver con el desempeño estadístico, creo que vamos muy bien, lo que narraba Agustín en cuanto a comparación con otros países.

Lo que bien reportaron al Anuario me parece que da cuenta de ello también.

El Anuario, me parece que en sí mismo es un documento que hay que destacar mucho, yo creo que las comisiones correspondientes de la Cámara de Senadores y de la Cámara de Diputados deberían de hacer un esfuerzo, en este caso la senadora lo está haciendo, de que tenga mayor difusión.

Yo sé que ustedes lo hacen pero creo que nosotros podemos contribuir a que esto se multiplique, porque este es un tipo de información que hay que celebrar.

Primero, el hecho mismo, como decía Rodrigo –perdón porque tuve que correr a votar y estoy hasta sudando-; el hecho de que se esté haciendo este esfuerzo para registrar esta información para reportarla anualmente, me parece que es de celebrarse porque efectivamente, antes de 2010 era más complicado conseguir información sobre el desempeño de la Industria Cinematográfica Nacional.

Yo celebro que este Anuario ya sea un reporte consolidado y estoy seguro que con algunos años más será un reporte muy esperado.

Y creo, lamentablemente ahorita que salí a votar, cuando regresé, escuché que hablabas ya de la parte del cine itinerante, no alcancé a oír bien.

Pero creo que sería una oportunidad de mejora porque eso no estoy seguro si viene reportado aquí, por ejemplo cuántos mexicanos tienen acceso a ese tipo de oferta.

Creo que podría complementar; no es una crítica, es simplemente un comentario de una oportunidad de mejora en este tipo de reportes y yo sólo retomo algunos datos que vi de la presentación de Agustín Torres.

Me da mucho gusto ver que estamos teniendo un crecimiento casi siete veces que reporta el cine a nivel internacional, eso habla de que hay una dinámica bastante virtuosa en nuestro país y que eso seguramente se traducirá en mayor inversión en más salas, en mayor inversión en producción de películas, y en mayor inversión en servicios colaterales, que hacen que la población se sienta interesada en ir al cine.

Entonces me parece que toda la información que se nos ha proveído el día de hoy, es información muy positiva que debemos celebrar aquí en el Senado.

Es cuánto.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchas gracias.

Senador Blásquez: ¿desea hacer un comentario?

SENADOR MARCO ANTONIO BLÁSQUEZ SALINAS: Muchas gracias.

Quiero agradecerles que tengan el comedimiento de acudir a nuestra Cámara, a esta Comisión que preside el compañero Zoé Robledo.

Creo que la industria, y así lo comentamos cuando recuerdo en el 2012 instalamos esta Comisión, es una industria pujante, que promueve valores, que promueve cultura, y sobre todo que es una empresa que es de dinero, que genera riqueza directa o indirecta a millones de mexicanos.

Quiero decirles que, cuando nosotros contemplamos el cine, pues es una industria ciertamente análoga, pero cuando observamos un Anuario como este, es rudamente, crudamente digital.

Por eso lo quiero felicitar señor Director, porque nosotros, de la concepción del cineasta, del académico, del actor, pues llegamos a ver muchísimos talentos, máxime de un país como el nuestro que nos ha obsequiado grandes actores y actrices.

Pero cuando además de ese talento histriónico que tienen de por sí los que se dedican a esta empresa, nos dan un Anuario crudo, digital, con pelos y señales de lo que es la industria, bueno, pues entonces nos explicamos por qué están como están, que están muy bien.

Modestamente los felicito; soy como todos los mexicanos, seguidor del cine de la época de oro.

No sé, Director Sánchez Sosa, a qué película se refería usted, si aquella de Joaquín Pardavé, cuando se los llevan allá a un rancho a hacerse pasar por pobres. ¿A eso se refiere? ¡Uh! Muy buena comparación.

Es que estaba comparando una película en analogía, de Nosotros los Nobles, y recordaba una película de Emilio Tuero, era el jefe de la familia, don Fernando Soler y Joaquín Pardavé.

Entonces los llevan a un pueblo allá al sur, creo que era Yucatán, porque hay unos bailes ahí tradicionales, y al novio, a Emilio Tuero, lo hacen pasar por pobre y venía la novia con una familia pseudoaristocrática.

Es una película, de veras, de lo mejor que le he visto a don Fernando y a doña Sara, que en ese momento hace el papel de la esposa de Fernando Soler. Los felicito.

Y quiero decirles que cuando viene esa decadencia, que ciertamente lo fue, de los años 60, que empezamos con las películas de la juventud rebelde, que no son malas pero sí como que nos salimos de la ruta del oro, del resplandor del oro.

Y luego fuimos a los 70, ya muy famosas películas de la señora Lyn May, que no opinaré.

Pero hay una película que para mí marca el renacimiento del cine, porque es un parteaguas, nos entrega una producción muy ágil, nos entrega actores contemporáneos, y me voy a acordar del nombre. Se llama “Sólo con tu pareja”.

Cuando yo vi esa película, porque ya la actuación de estos jóvenes, creo que una de ellas era aeromoza y se peleó porque el novio la había cambiado por una azafata, pero creo que de “Mexicana de Aviación”, y luego los japonesitos estos que a todo le tomaban foto.

Entonces cuando yo vi esa película como espectador y como comunicador que soy, dije aquí viene algo bueno. Y no me equivoqué porque después siguieron películas de un corte, de un entretenido, de un corte de, qué podemos decir, si sabemos lo que somos en este momento en cine.

Y una cosa que hay que reconocer, que se cuidan mucho las imágenes, las escenas, que muchas veces vender escenas eróticas es relativamente sencillo.

Y al menos en las películas que a mí me ha tocado ver, yo veo que con mucho respeto se cuidan esas imágenes, que también fue consigna en Hollywood en algún momento porque ya había ciertamente algunos excesos.

Entonces más que una reunión, yo quiero decir que esto es una celebración.

Me siento muy orgulloso de ser parte de esta Comisión, de recibirlos, soy un aplaudidor sincero, sincero de nuestro cine.

Y me llevo esto como muestra porque de veras, ojalá muchas industrias del país tuvieran esta información digital.

Es cuánto señor Presidente.

SENADOR ZOÉ ROBLEDO ABURTO: Muchas gracias senador Blásquez.

Quiero agradecer y aprovechar para agradecer a todos quienes hoy nos han acompañado.

Permítanme mencionarlos:

Al señor Alfredo del Valle, Eduardo Mora, Víctor Goch, Alejandro Aca, y Araceli Hernández Fox, Óscar Ramos Juárez, Gabriel Amores, Claudia Garibaldi, Luisa Valdés Alvarado, Flor del Rosario Lara Gómez, Ernesto Román Pérez, Geovani Urquiza Jaimes, Diego Murillo Alvarado, y Juan Carlos Domingo.

Y los menciono porque todos vienen de diferentes lados y tienen alguna vinculación. Perdón: Mayahuel del Monte, Socorro Albarrán y Javier Zaragoza, también. Qué bueno que lo hicieron notar aquí.

Gracias a ustedes porque creo que esta reunión es un reflejo de una actividad, un hábito, reitero, una expresión cultural, un medio de comunicación, una industria, una bella arte.

En fin, tantas cosas que significa el cine y tantas cosas que significa para el país.

Era importante para los integrantes de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía tener esta reunión, en principio porque este Anuario sin duda es un documento valioso, es un documento que debe de reconocerse y que debe de conocerse.

Me comentaba el maestro Jorge que el Anuario está disponible en forma digital en la página del IMCINE, lo cual es algo muy positivo.

Nosotros haremos un esfuerzo para que en el micrositio del Senado, en esa pequeña contribución, tengamos también una Liga para el Anuario, si nos lo permiten.

El segundo asunto es que efectivamente hay una serie de desafíos que se están viviendo, desafíos que van desde temas tan relevantes y globales como la renegociación, o la posible renegociación del Tratado de Libre Comercio, tema en el que el asunto del cine no está exento.

Asuntos como las nuevas plataformas digitales que existen en el país y cuál es el comportamiento que tienen, esta adición a la cadena de difusión de la cadena del cine y que ojalá, obviamente ya ocurre y siga creciendo la oferta ahí de contenido realizado en nuestro país.

Y por supuesto por un asunto de coyuntura que es muy relevante, que es la discusión en estos momentos de la Ley de Derechos Culturales, o la Ley General de Cultura y de Derechos Culturales, es todavía un asunto de denominación que no se ha determinado pero que estamos en donde estamos avanzando.

Y que además nos tocará, como integrantes de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, por lo que corresponde justamente a la cinematografía, dictaminar esa Iniciativa.

Como bien comentaba Rodrigo, hay una Iniciativa adicional para que la cultura, así como ya lo es el turismo, tenga un rango constitucional de actividad estratégica del Estado Mexicano, porque lo es.

Y escuchar estos datos en donde, por un lado, efectivamente tenemos un comportamiento frente a la economía, que es totalmente diferente a otras industrias que se están contrayendo, emociona pues, nos permite pensar que el cine mexicano goza de una buena salud pero que puede tener todavía un crecimiento mayor en algo que también se ha mencionado aquí:

En que esa distribución del número de boletos empiece a ser más igualitaria, porque efectivamente no significa que si hay 120 millones de personas en nuestro país y más o menos el doble de boletos vendidos, no significa que cada mexicano en promedio haya ido dos veces al cine.

Es como aquel chiste que dice: en promedio, si promediamos el ingreso del señor Slim y el mío, pues ambos somos millonarios. Cosa que de esa forma no es así.

Entonces efectivamente, ojalá, ojalá esa distribución empiece a ser más equitativa.

Sé que es un reto en el cual tanto la Cámara, como el Instituto, como la Academia, como los productores, como todos los que estamos vinculados a este tema tenemos en mente para que los derechos culturales sean derechos efectivos y en ese sentido sean para todos.

Yo soy un convencido de una máxima de Geovanni Sartori, que por cierto acaba de fallecer, que decía.

“El único modo de resolver un problema, es conociéndolo, es saber que existe, porque el simplismo simplemente los cancela y en ese momento los agrava”.

Hay muy buenos datos sobre el cine mexicano, por supuesto que hay desafíos, por supuesto que hay problemas aún que tenemos que resolver, ojalá los sigamos resolviendo en un diálogo democrático, franco y abierto como el que tuvimos esta mañana.

Muchísimas gracias a todos y que tengan muy buen día.