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Discurso del Presidente del Instituto Belisario Domínguez, Carlos Navarrete Ruiz, durante el Foro Fortalecimiento de los de Institutos y Organismos de Investigaciones Legislativas.

Carlos Navarrete Ruiz (CNR). Muy buenos días a todos ustedes, saludo con mucho afecto a los diputados y diputadas de los congresos de los estados de nuestra República y a nombre del Instituto Belisario Domínguez les doy una muy cordial bienvenida al Senado, a la sede de la Cámara Alta, a la representación federal y que ahora, a través del Instituto Belisario Domínguez, ha convocado a este encuentro.

Saludo desde luego a los Presidentes de las Cámaras de Diputados y Senadores, al senador José González Morfín y al diputado Guadalupe Acosta Naranjo, valoramos que hayan abierto un espacio en su agenda para acompañarnos en este acto inaugural e interactuar con los diputados aquí presentes.

Es también un enorme gusto que estén con nosotros la senadora Josefina Cota y el senador Fernando Castro Trenti, integrantes de la Mesa Directiva del Instituto Belisario Domínguez y desde luego a nuestro compañero Luis Mendoza, quien fue el conducto que los congresos locales propusieron para convocar a este importante foro.

La presencia de ustedes para el Senado es de la mayor importancia, sé que muchos congresos están en sesión todavía, que por esa razón no pudieron asistir, otros más hicieron un esfuerzo para acudir al Senado y es algo  que lo valoramos profundamente, sin duda alguna.

Este encuentro señores diputados, señoras diputadas, es un diálogo entre pares, hay que decirlo con claridad, reafirma al Senado como garante del pacto federal y quisimos hacerlo aquí en el salón de sesiones de la Comisión Permanente para que nuestros compañeros y compañeras diputados locales, pudiesen, en primer lugar conocer la sede del Senado, la nueva sede del Senado, espero que antes de culminar nuestra sesión el día de hoy podamos mostrarles incluso la sede del Senado, porque pese a fallas hemos tenido a la construcción, hemos venido corrigiendo y pese a una visión que a veces generaliza de que la sede del Senado es una sede defectuosa pronto podremos demostrarles que estamos en una sede digna para el Senado de la República.

Y por supuesto, esperamos en el futuro a más de alguno de ustedes y a alguna de ustedes verlos en los escaños del Senado como senadores de sus estados respectivos.

Se trata éste de un foro que tratará sobre el fortalecimiento de las investigaciones legislativas, déjeme decir estimadas diputadas, diputados, que todos sabemos que el Poder Legislativo en los estados de la República y el Congreso de la Unión tiene una vida reciente como Poder Legislativo independiente, hubo tiempos en nuestro país, no hablo del siglo XIX, sino particularmente del siglo XX en el que el régimen político mexicano por sus propias características impidió el pleno florecimiento del equilibrio de poderes y por lo tanto la existencia real permanente de los congresos locales, como representantes de los ciudadanos y por lo tanto como poder legislativo con facultades constitucionales expresas de lo que en la realidad no podía ejercerlos a plenitud.

Es el caso del Senado de la República, es el caso de la Cámara de Diputados, y es el caso de los congresos locales también, en un país en donde la pluralidad no afloraba aún con congresos monocolores o con una presencia pequeña de otras fuerzas políticas diversas al partido hegemónico era difícil que los congresos pudieran desarrollar todas sus capacidades.

Y durante muchas décadas funcionamos de esa manera, el país lo permitía así estaban las condiciones, en los últimos lustros del siglo XX irrumpió la pluralidad en el país, impulsaron competencias electorales más reñidas y eso se reflejo en la composición de los congresos, tanto en las Cámaras del Congreso como los congresos locales, sin duda alguna.

Fue también tiempo en el que en los congresos irrumpió el debate político, irrumpieron reformas importantes, se ejercieron plenamente facultades constitucionales de vigilancia del Ejecutivo, de sus cuentas públicas, de su nombramiento, de su actuación. Y los congresos, sobre todo los congresos de los estados se convirtieron, como debe serlo por cierto, en las escuelas de política para representar desde diversas fuerzas partidarias y, por lo tanto, surgió la necesidad de profesionalizar el quehacer legislativo.

En el Senado de la República y en la Cámara ocurrió un fenómeno semejante también, en ambas cámaras hasta hace unas décadas parecía poco importante contar con instituciones, con institutos de investigación legislativa, esas tareas estaban reservadas a un pequeño núcleo de asesores que ayudaban a legisladores a evaluar los dictámenes, a preparar puntos de acuerdo o a estudiar las iniciativas de Ejecutivo.

Pero la vertiginosa vida parlamentaria llevó a que cada día más senadores, diputados  federales y locales tuviésemos necesidad de hacer investigación legislativa precisa, estudios comparativos, estudios de iniciativas, impactos de las reformas que estábamos generando, evidentemente, y por lo tanto se requería profesionalizar la tarea de los legisladores.

Hoy el Senado no es ni con mucho lo que era hace 25 años, hoy el Senado tiene cuerpos especializados, tiene grupos de asesores, tiene investigadores especializados en temas específicos, tiene comisiones de estudios legislativos y tiene un instituto de investigaciones legislativas, el Belisario Domínguez, que en los últimos, en las últimas legislaturas se ha venido transformando de ser una comisión más del Senado a ser un instituto, primero un centro, luego un instituto y en las dos últimas legislaturas, en las que el senador Beltrones, el senador González Morfín, el senador Castro Trenti, la senadora Cota hemos participado, le hemos dado al Instituto Belisario Domínguez el carácter de uno de los pilares del Senado mismo. Profesionalizándolo,  dándole facultades mayores, dotándolo de recursos, de materiales para que ahí haya investigadores de tiempo completo, haya apoyo a los trabajos de la Mesa Directiva, de la Junta de Coordinación Política y de las Comisiones de estudio.

Hemos interactuado con la Cámara de Diputados que también tiene su centro especializado, que ha venido fortaleciendo y ampliando y hoy las dos Cámaras del Congreso de la Unión, parte de su éxito como cámaras legislativas que ejercen plenamente sus facultades está el que tienen un respaldo fundamental de personal especializado para sus tareas.

Pero al ver la panorámica de los congresos locales nos encontramos con una diversidad de situaciones, hay congresos en algunos estados de la República que han avanzado a constituir sus institutos de investigación como centros de respaldo fundamental para su actividad, tienen directores, tienen asesores, tienen instalaciones dignas, tienen instrumentos para soportar y ayudar a los congresos en sus actividades.

Otros más apenas han iniciado esta tarea, son instancias en menos nivel y de importancia que se refleja en el poco presupuesto que se les asigna en instalaciones poco convenientes y en el poco respaldo se les da a esta tarea.

Todavía tenemos congreso locales en donde no se alcanza a vislumbrar la importancia de contar con esos institutos o centros de apoyo. Por eso, hace unas semanas cuando se reunieron nuestros representantes en el Congreso Nacional de la Asociación de Institutos y Organismos de Estudios de Investigaciones Legislativas, que se llevó a cabo en Aguascalientes el 8 y 9 de mayo, a través del doctor Luis Mendoza nos hicieron llegar la inquietud de que en la parte última de esta legislatura desde el Senado hiciésemos un esfuerzo para convocarlos, para convocarnos y para entrar en esta materia.

Por eso, los quiero convocar a que esta mañana una vez concluida la sesión de instalación entremos en materia, abramos esta tribuna para escuchar a los diputados locales, las diputadas, sus inquietudes, sus realidades de cada congreso, las circunstancias que cada quien vive en la diversidad que tenemos de carácter local, como presidentes a veces por un mes que preside los congresos o a veces por un año.

En este calendario tan dispar que tenemos en el que no todos los congresos inician en la mismas fechas sus actividades y las culminan como legislatura, eso es explicable, pero en donde es totalmente posible que el Senado de la República y que la Cámara de Diputados y los congresos estatales podamos sentar las bases de una comunicación permanente en esta materia.

Nosotros terminamos las labores en agosto de este año, en septiembre iniciará una nueva legislatura federal, pero estoy seguro que el Instituto Belisario Domínguez podrá darle continuidad a partir de septiembre a lo que hoy podamos sentar las bases e iniciar.

Termino diciendo que hace unos minutos, en el encuentro previo que tuvimos en la sala de protocolo de la Presidencia del Senado, con varios de ustedes iniciamos una reflexión que los convoco y los invito a que la continuemos aquí en la sesión formal.

Se trata de aprovechar la presencia de ustedes también y aprovechar que hemos podido reunirnos para dialogar sobre la conveniencia de impulsar o de rescatar nuevamente la convocatoria al encuentro nacional de legisladores locales, que en algún tiempo funcionó, convocó a los congresos de los estados, cada año se reunía en una sede diferente, convocaba a órganos de gobierno, convocaba a coordinadores parlamentarios, a delegaciones plurales, se preparaban los temas para discutir, se preparaban declaraciones conjuntas y era una excelente oportunidad de intercambio de experiencias de lo que los congresos iban haciendo, alimentaba la iniciativa de algunos en beneficio de otros y desde luego el Senado estará siempre dispuesto a ser invitado también y poder contribuir con ustedes en las comisiones legislativas del Poder Legislativo federal.

Por lo tanto, me parece que este encuentro hay que saludarlo, sin duda alguna. Es un encuentro que enorgullece al Senado de la República, que le causa una profunda satisfacción al Instituto Belisario Domínguez y que me parece que de aquí a las tres de la tarde que trabajaremos podremos aprovechar bien en éste y otros temas.

Y ojalá que en este encuentro surjan consensos que permitan que en los congresos de los estados se incremente el respaldo a los institutos locales, a sus órganos de investigación legislativa, a sus estancias de respaldo al trabajo legislativo, no es un gasto superfluo el dedicarle una parte del presupuesto de gasto ordinario de cada congreso a tener cuerpo de asesores profesionales, instalaciones dignas, equipo de cómputo que permita que podamos estar permanentemente interactuando con las reformas que hacemos en las Cámaras del Congreso, con la Suprema Corte de Justicia de la Nación, con el propio Ejecutivo federal, a través de la Secretaría de Gobernación, en un sistema de información legislativa, no es ocioso.

Hoy los congresos tienen que ser más profesionales y el hecho de que nosotros tengamos más responsabilidades en las reformas que realizamos en nuestras cámaras nos obligan a tener respaldo profesional y estudios formales, elementos sustanciales para hacer una mejor tarea legislativa.

Muchas gracias por su esfuerzo de acudir a este foro, muchas gracias por su presencia, muchas gracias presidente González Morfín, presidente… Manlio Fabio Beltrones, presidente Acosta Naranjo, por su presencia en este evento. Y espero que la mañana sea una mañana de exposición, de debate, de aportación de propuestas y de conclusiones fructíferas.

La tribuna del Senado de la República está abierta para los congresos locales y para sus diputados y diputadas.

Muchas gracias