Versión Estenográfica de la reunión de trabajo de comisiones unidas de Relaciones Exteriores y de Relaciones Exteriores Organismos Internacionales, a la que convocan las senadoras Gabriela Cuevas Barron y Laura Angélica Rojas Hernández, con el objetivo de dictaminar el nombramiento de la representante permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRON: Le damos la más cordial bienvenida a embajadora Martha Elena Federica Bárcena Coqui, quien hoy nos acompaña como designada representante permanente en México ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, el Programa Mundial de Alimentos, así como Gobernadora de México ante el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola, con sede en Roma, Italia.
Le pedimos, por favor, embajadora, si puede ponerse de pie.
Ciudadana Martha Elena Federica Bárcena Coqui: ¿Protesta usted decir verdad en la información que exponga a estas comisiones y también ante las preguntas y, en su caso, las réplicas que le formulen las señoras senadoras y los señores senadores?
MARTHA ELENA FEDERICA BÁRCENA COQUI: Sí protesto.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRON: Muchas gracias, ciudadana Martha Elena Federica Bárcena Coqui, se deja constancia de lo anterior, si gusta tomar asiento. Muchas gracias, compañeras y compañeros.
Para seguir con nuestro Orden del Día, le pediría a la senadora Laura Rojas, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores Organismos Internacionales, si puede por favor dar lectura al currículum de nuestra compareciente.
SENADORA LAURA ANGÉLICA ROJAS HERNÁNDEZ: Con mucho gusto.
La embajadora Martha Elena Federica Bárcena Coqui nació en la ciudad de Veracruz el 2 de marzo de 1957. Realizó las licenciaturas en Ciencias de la Comunicación en la Universidad Iberoamericana y en Filosofía por la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma y la maestría en Estudios Internacionales por la Escuela Diplomática de la Universidad de Madrid.
Es diplomática de carrera, habiendo ingresado al Servicio Exterior Mexicano en 1979. En 2005, ascendió al rango de embajadora.
Desde diciembre del 2013, se desempeña como embajadora de México en Turquía.
En el exterior, fungió como embajadora de México en Dinamarca del año 2004 al 2013.
Como encargada de las secciones consular, protección y cultural en el Consulado General de México en Barcelona de 1989 a 1990.
En la Cancillería ha ocupado los cargos de: asesora en la Unidad de Relaciones Económicas y Cooperación Internacional; Secretaria Técnico de la Tercera Reunión de los Jefes de Estado en la Dirección General para Europa.
Asesora en la Subsecretaría para África, Asia-Pacífico, Europa y Naciones Unidas; asesora en la Dirección General del Programa de Investigación y Prospectiva Internacional; asesora en el Instituto Mexicano de Cooperación Internacional; asesora en la Dirección General de Asuntos Culturales; asesora en la Dirección General para el Sistema de la ONU; asesora en la Dirección General de Archivo, Biblioteca y Publicaciones.
Subdirectora General en la Dirección General de Organismos Especializados de la ONU; asesora en la Dirección General de Asuntos Multilaterales.
La embajadora Bárcena Coqui tiene dominio del inglés e italiano; amplio conocimiento del francés y básico de alemán.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRON: Muchas gracias, senadora presidenta.
Le damos ahora el uso de la palabra a nuestra compareciente, la embajadora Martha Elena Federica Bárcena Coqui. Una vez más, embajadora, bienvenida. Tiene usted el uso de la palabra hasta por 10 minutos.
MARTHA ELENA FEDERICA BÁRCENA COQUI: Muchas gracias, señora senadora.
Es un placer para mí y un honor comparecer ante las comisiones unidas de Relaciones Exteriores y de Relaciones Exteriores Organismos Internacionales, y reencontrarme con varios de ustedes, que los considero aparte de honorables representantes del pueblo mexicano, senadores, mis amigos, porque he coincidido con ustedes en varios foros internacionales o en varias ciudades, como en Hong Kong con el senador Cavazos Lerma; comparto el interés del senador Romero Hicks con todas las cuestiones de educación particularmente, y bueno, con mis queridas amigas aquí presentes.
La participación de México en organismos internaciones, constituye uno de los ejes centrales de la política exterior de México.
El multilateralismo ha sido central en todo el desarrollo de las prioridades de México en el exterior y México emite en los organismos internacionales posicionamientos, votos y despliega estrategias de negociación sobre temas centrales de la agenda global, así como los vincula con los objetivos nacionales y busca la defensa del interés nacional en todo momento.
Saludo en este contexto la iniciativa de la Comisión de relaciones Exteriores Organismos Internacionales de solicitar y recibir informes periódicos de todos los representantes permanentes en los organismos internacionales, sobre la gestión de las representaciones de México en dichos organismos y procuraré cumplirlos en tiempo y forma.
La reapertura de la misión permanente de México ante los organismos internacionales del llamado Sistema Roma, que son los organismos que se dedican a la agricultura y la alimentación, significa un gran honor y una oportunidad para fortalecer la presencia multilateral de México, que tanto brillo y prestigio ha dado a la diplomacia mexicana.
En un entorno global de incertidumbre, de crisis humanitaria sin precedentes, que me ha tocad testificar de primera mano en Turquía, en donde están más de 3 millones de refugiados sirios, de reconfiguraciones geopolíticas, México debe hacer uso de todos los instrumentos a su alcance, para apoyar el desarrollo nacional y contribuir a un entorno global más predecible, de cooperación para el desarrollo, donde el ser humano esté al centro de las preocupaciones, tal como lo ha venido subrayando las Naciones Unidas, a través de sus informes de desarrollo humano.
Tenemos también ante nosotros en los años futuros una nueva agenda de desarrollo, que ha sido negociada justamente en el marco de los organismos internacionales y que nos corresponderá aplicar de aquí al año 2030.
Regreso al área multilateral de la Cancillería con gran entusiasmo. Ahí pasé mis primeros años. Después serví, sobre todo, en el área bilateral, alentando inversiones extranjeras en México, promoviendo el comercio, difundiendo el gran tesoro que es la cultura mexicana.
Pero tuve en mi juventud el privilegio de formarme con varios de los mejores multilateralistas de México: Jorge Castañeda y Álvarez de la Rosa, Antonio González de León, Sergio González Gálvez, Jorge Montaño y Porfirio Muñoz Ledo, como representante permanente ante Naciones Unidas.
Fui subdirectora general de Organismos Especializados de la ONU y he dado clases de organismos internacionales en la Universidad Iberoamericana desde 1981, siempre que estoy en México.
Por ello no sólo conozco la importancia de los organismos, sino que estoy convencida que son fundamentales en la construcción e regímenes internacionales que nos dan predictibilidad en la organización internacional, proveedores de cooperación técnica y centrales para la democratización del sistema internacional.
Los organismos con sede en Roma son tres, tal como lo mencionó la senadora Rojas, la FAO, el organismo para la agricultura y la alimentación, fundado en 1945, con el mandato de mejorar la nutrición, aumentar la productividad agrícola y elevar el nivel de la población rural, entre otros.
El Programa Mundial de Alimentos creado en 10961 por la FAO y la Asamblea General de las Naciones Unidas, para asegurar que las personas que padecen hambre en el mundo alcancen y conserven la seguridad alimentaria; el FIDA, establecido en 1977, después de la gran sequía de África y Medio Oriente, con el fin de erradicar la pobreza rural en los países en desarrollo.
México fue fundador de los tres organismos y participa en sus actividades en una doble vertiente: la vertiente interna que los vincula con las prioridades nacionales, en particular de las políticas de desarrollo agrícola y desarrollo social de los gobiernos de México y en particular del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, para lograr la seguridad alimentaria del país y sobre todo, en el caso de la FAO, contribuir en este momento al éxito de la Cruzada Nacional contra el Hambre.
En segundo lugar, la vertiente internacional que, como decía yo al inicio, hemos tenido en los últimos años la negociación de un nuevo paradigma de desarrollo o una agenda de desarrollo que se integra básicamente por la Agenda 2030, que contiene 17 objetivos de desarrollo sostenible, varios de los cuales impactan o tienen relación directa con la función y las actividades de los organismos del Sistema Roma, pero sobre todo el objetivo número uno y dos, que el primero es erradicar la pobreza y el segundo justamente erradicar el hambre.
Las llamadas convenciones de Río, que es la Convención sobre Cambio Climático y el Acuerdo de París, la Convención sobre Diversidad Biológico, Biodiversidad, que en estos momentos se está llevando a cabo, la COP en Cancún y justamente la aprobación reciente de la Declaración de Cancún que vincula la biodiversidad a las áreas de agricultura, silvicultura y pesca.
Y la Convención sobre Desertificación así como también un aspecto en el que México ha sido muy activo, que es la Alianza Global para la Cooperación Eficaz para el Desarrollo, dado que los tres organismos de Roma son fundamentales en todo el entramado de cooperación internacional para el desarrollo.
Tal como lo he dicho, México tiene varios objetivos estratégicos que es reforzar las políticas públicas nacionales en materia de seguridad alimentaria, nutrición, desarrollo agrícola, reafirmar el compromiso de México con la seguridad alimentaria y nutricional, lograr la alineación y sinergias de las acciones de los organismos internacionales del Sistema Roma con el resto del sistema de Naciones Unidas y con los organismos regionales para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible, así como alinear las prioridades de esta agenda con el desarrollo nacional, que eso va a ser el gran reto para el país en los próximos años, en los años venideros justamente.
E impulsar la cooperación de la FAO, el Programa Mundial de Alimentos y el FIDA con los organismos regionales, en particular la CELAC, la ALADI y la CEPAL, para lograr la completa erradicación del hambre en América Latina en 2025 de conformidad con el plan de Seguridad Alimentaria, Nutrición y Erradicación del Hambre del CELAC, así como compartir con los países de la Región las lecciones aprendidas de las políticas sociales a través de la Iniciativa Mesoamérica sin Hambre y el Corredor Seco Centroamericano.
La FAO ha sido un socio privilegiado de México en la lucha contra el hambre y la promoción de la seguridad alimentaria y la nutrición y en los próximos años la FAO tendrá el rol central en la consecución de los objetivos de desarrollo sostenibles uno y dos.
Desde la puesta en marcha de la Cruzada Nacional contra el Hambre, la FAO ha apoyado firmemente los esfuerzos desplegados por el gobierno de México y así desde el 18 de junio de 2014 signó un convenio de colaboración con el gobierno de México con cuatro objetivos fundamentales:
El apoyo a la Cruzada Nacional contra el Hambre, el Programa Nacional México sin Hambre, la cooperación en la formulación y evaluación de políticas y programas públicos para hacer más productivo el campo mexicano.
Tenemos un grave problema de estancamiento de la productividad en el campo mexicano, sobre todo en las parcelas que son iguales o menores a cinco hectáreas y donde no hemos logrado disminuir la pobreza rural al ritmo en que lo hemos hecho digamos en las zonas urbanas y en donde realmente el tema de la falta de productividad en el campo es el gran reto en el que la FAO puede colaborar de manera muy específica en los años venideros.
El apoyo a la sustentabilidad ambiental, resiliencia y economía verde como herramientas frente al cambio climático tanto en el aspecto de adaptación como de mitigación y el fortalecimiento de la presencia de México en el mundo, particularmente en América Latina y apoyando la FAO a los esquemas de cooperación sur-sur, que lleva a cabo México.
Dentro de los principales proyectos que la FAO lleva a cabo en México y que me tocará estar en contacto permanente con el secretariado de la FAO para lograr su máxima optimización, es el proyecto estratégico de seguridad alimentaria que apenas hace dos días en la Expo Alimentaria se presentaban los casos de éxito justamente.
Es un proyecto que está trabajando con 24 a 26 entidades federativas, con más de 400 agencias de desarrollo rural y en donde la FAO está acompañando al gobierno de México para su éxito.
La FAO también nos acompaña, ya como lo dije, en cooperación sur-sur y en cooperación triangular con el proyecto Mesoamérica sin Hambre, que involucra a los gobiernos de Belice, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y la República Dominicana.
México ha suscrito con la FAO y con estos países un plan de acción regional para lograr la consecución de una Mesoamérica sin hambre porque desgraciadamente los niveles de pobreza rural y de hambre en Mesoamérica son un porcentaje mayor al resto de América Latina y por supuesto de otras partes del mundo.
También tenemos el corredor seco en Centroamérica, Centroamérica ha tenido graves problemas de sequía, sobre todo en Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua; y México ha hecho un esfuerzo por llamar la atención de la FAO a los retos que representa la sequía en esta zona para también movilizar a la comunidad internacional para apoyar los esfuerzos emprendidos por estos gobiernos.
En el caso del programa mundial de alimentos, no tiene membresía como tal, todos los miembros de Naciones Unidas pueden colaborar en el programa mundial de alimentos. Y hay básicamente dos tipos de países en el programa mundial de alimentos:
Los receptores de cooperación y los donantes de cooperación, que puede ser cooperación en moneda o puede ser en especie. México afortunadamente nunca ha requerido la cooperación del programa mundial de alimentos como receptor; pero sí hemos tenido alguna cooperación en calidad de donante.
De hecho, en los últimos años el Gobierno de México ha comprometido una donación de 6 millones de dólares a diferentes organismos, entre ellos el programa mundial de alimentos, para apoyar justamente las necesidades alimenticias de los refugiados sirios en países como Turquía, Líbano, Jordania y Egipto. Pero también hemos apoyado al programa mundial de alimentos en Haití y en Centroamérica.
El reto que tenemos para el futuro con el programa mundial de alimentos, es seguir con esta cooperación, quizá incrementarla, institucionalizándola para que el programa mundial de alimentos tenga una presencia constante en Centroamérica y también para que logremos esquemas innovadores.
Hay que recordar simplemente que dos de las grandes empresas mexicanas, Gruma y Bimbo, son empresas que pueden contribuir con el programa mundial de alimentos con donaciones en especie; y justamente apoyando las acciones del programa mundial de alimentos en diversas partes del mundo.
En el fondo internacional de desarrollo agrícola, es una institución financiera internacional, por eso es que iré de gobernadora y no de representante permanente; es un fondo sumamente interesante al estar dedicado justamente a la promoción del desarrollo rural y la elevación de la productividad agrícola.
A México se le presenta ahora un reto sin precedentes, puesto que hemos presentado la candidatura de la directora ejecutiva de la Agencia Mexicana para la Cooperación Internacional para el Desarrollo, AMEXCID, la maestra Gina Casar, para ser la próxima presidenta del FIDA en las elecciones que se llevarán a cabo en febrero de 2017.
Claro, hay muchos candidatos, pero pensamos que el curriculum de la directora ejecutiva de AMEXCID cumple con todos los perfiles que requiere el FIDA para realizar un gran trabajo. Su elección significaría, sin duda, un gran reconocimiento no sólo a ella en lo personal; sino al trabajo de México en las áreas de cooperación al desarrollo y de desarrollo agrícola.
No me extenderé más, nada más diré que estos organismos tienen una agenda muy activa a lo largo del año. El FIDA, la junta ejecutiva de la que México forma parte, se reúne tres veces al año; el programa mundial de alimentos lo mismo; también el consejo de la FAO se reúne también dos veces al año, del que México forma parte y buscaremos seguir formando parte de estos órganos rectores de los tres organismos especializados del Sistema Roma.
Y el año próximo tenemos también la cuadragésima conferencia general de la FAO o Conferencia de la FAO. Y esta conferencia será muy importante porque será la primera conferencia de la FAO que se lleva a cabo después de la adopción de la Agenda 2030 y por lo tanto, tendrá que definir su programa a mediano plazo y sus acciones, conforme a esta Agenda 2030.
Y se estará también estrenando el nuevo secretario general de Naciones Unidas, para vincularse con la FAO.
También el programa mundial de alimentos es factible que pueda cambiar su directora ejecutiva el próximo año y estaremos también cambiando al presidente del FIDA.
Entonces, será un año muy movido en lo que es toda la reconfiguración de las cabezas de los organismos, y al mismo tiempo de la definición de sus programas o de la adaptación de los programas que ya tienen a la Agenda 2030.
La reapertura de la misión permanente, el tener una misión dedicada exclusivamente a las reuniones y a la relación con los objetivos con los organismos del sistema Roma, sin duda alguna nos permitirá cumplir mucho mejor los objetivos nacionales, alcanzar a coadyuvar todavía más al éxito de los programas nacionales, como es la seguridad alimentaria, la Cruzada Nacional contra el Hambre y el incremento de la productividad agrícola, sobre todo en las parcelas más pequeñas y la eliminación de la pobreza rural.
Y sobre todo nos permitirá ejercer, creo yo, y eso es lo que espero, una posición de liderazgo en todo lo que es el cumplimiento de la Agenda 2030, haciendo honor a la política multilateral de México siempre tan prestigiosa.
Creo que con esto cerraría yo mi presentación, y estoy a su disposición, señoras senadoras, senadores, para sus preguntas.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRON: Muchas gracias, senadora.
Le pediré a la senadora Laura Rojas si puede moderar la ronda de preguntas y respuestas, por favor.
SENADORA LAURA ANGÉLICA ROJAS HERNÁNDEZ: Sí, con gusto. Si quieren hacemos la lista, igualmente para que hablemos todos y al final la embajadora pueda responder.
¿Quién quiere hacer uso de la palabra?
Senadora Araujo, la senadora Lisbeth, bueno yo, una servidora, y la senadora Cuevas al final.
Tiene el uso de la palabra, senadora Araujo.
SENADORA ANGÉLICA ARAUJO LARA: Gracias, senadora presidenta de la Comisión.
Muchas gracias. Bienvenida de verdad, nuevamente, Martha Elena Bárcena. Tuvimos la oportunidad de coincidir en eventos anteriormente y me da muchísimo gusto darte la bienvenida a esta, tu casa, que es el Senado de la República. Y me da muchísimo gusto que venga esta propuesta ante este mecanismo, este sistema Roma, tan importante y tan relevante.
Coincido, me da mucho gusto que hayas presentado en tu exposición como eje fundamental los objetivos ODS 2030, una agenda en la que México tuvo una gran participación; una agenda en la que México pudo posicionar temas muy relevantes y muy trascendentes, que tenemos un reconocimiento. Nosotros estamos haciendo todo el sistema de seguimiento a través del INEGI con el reconocimiento hacia nuestro país, para no solamente tener la meta de cumplir sino dar puntual seguimiento a estos cumplimientos y ver que durante la marcha se vaya desarrollando.
Realmente me da mucho gusto que hayas mencionado en tu exposición nuestros retos tan importantes, nada más y nada menos que el objetivo uno y dos. En ese sentido coincido contigo y hacia ahí quisiera tal vez poner especial énfasis, que me pudieras ahondar un poco más sobre cuáles serían desde tu punto de vista esos objetivos estratégicos para lograr el cumplimiento desde el objetivo uno, que es la erradicación de la pobreza, y que sin duda es el reto más importante que tenemos en el mundo. Y dos, por supuesto el logro de Hambre Cero.
Reflexionar y comentarte que me da mucho gusto que señales también al principio que vas a estar cumpliendo con esta propuesta que hicimos en el seno de la Comisión de presentarnos los informes, porque más allá de recibir un informe lo que tal vez quisiéramos es esta retroalimentación.
Nosotros aquí conformamos, y como seguramente lo podrá ratificar la senadora Laura un equipo, a solicitud de ella, muy valioso de diferentes comisiones que estaremos dando seguimiento puntual al cumplimiento de los 17 objetivos y 169 metas de los ODS. En ese sentido, va a ser muy valioso ese intercambio de información a través de los informes que ustedes nos pudieran hacer llegar y también por supuesto del trabajo que nosotros estaremos desarrollando. Para nosotros es algo trascendental y en esta arquitectura de seguimiento a la política exterior que le compete al Senado, sin duda este grupo multidisciplinario que conformamos aquí en el Senado con más de 30 comisiones, si mal no recuerdo, será muy valioso.
Tu servidora preside también la Comisión de Protección Civil. El próximo año tenemos un reto muy importante en Cancún. Por primera ocasión la plataforma en materia de prevención de desastres estará en nuestro país en el mes de mayo y también uno de los aspectos más relevantes es cómo vincular los diferentes objetivos, los ODS, en particular los que tienen que ver con los organismos multilaterales para los cuales está tu propuesta, pero también por supuesto esa interrelación con los otros objetivos.
Dejar mi felicitación, mi reconocimiento, por supuesto, sin duda por eso es la propuesta tuya y nuevamente darte la bienvenida a esta tu casa, que es el Senado.
Muchas gracias.
SENADORA LAURA ANGÉLICA ROJAS HERNÁNDEZ: Muchas gracias senadora.
La senadora Lisbeth Hernández, por favor.
SENADORA LISBETH HERNÁNDEZ LECONA: Gracias presidenta.
Embajadora Martha Elena Bárcena, bienvenida. Quiero comentarle que en el Senado hemos hecho un gran esfuerzo y hemos asumido un papel de liderazgo en el tema del combate al hambre.
Formamos parte del Frente Parlamentario contar el Hambre, Capítulo México y la senadora Luisa María Calderón es la presidente de ese organismo internacional.
Le comento que el pasado mes de noviembre fuimos sede del Séptimo Foro, donde contamos con la presencia de más de 80 legisladores de América Latina, el Caribe, de África y de Europa.
Traemos una agenda muy intensa que es importante que por favor nos ligue y nos coordine con sus esfuerzos y que podamos sobre todo hacer un trabajo coordinado a nivel internacional, con el tema de seguridad alimentaria.
Nosotros hemos aprobado una ley alimentaria en el Senado, está ahorita en proceso de dictamen en la Comisión de Estudios Legislativos y esperemos que México ha dado gran pie y muestra con la Cruzada Nacional Contra el Hambre, en AMEXID con el Programa de Mesoamérica sin Hambre.
Entonces, creo que hay un gran esfuerzo del gobierno mexicano, de la Cancillería a través de nuestra secretaria, Claudia Ruiz, que ha estado muy pendiente y cercana de este trabajo del Frente Parlamentario Contra el Hambre y entonces pedirle que sigamos coordinando esfuerzos.
Muchas gracias.
SENADORA LISBETH HERNÁNDEZ LECONA: Muchas gracias senadora Lisbeth.
Muy bienvenida embajadora al Senado de la República y a esta comparecencia.
Yo quisiera preguntarle sobre la adecuación de las prioridades de México en la FAO, en relación al nuevo paradigma de desarrollo, es decir, a la Agenda 2030, que ya lo comentó la senadora Araujo y específicamente sobre el objetivo número dos, que revela la empatía que existe entre la Agenda 2030 y la misión de la FAO.
Por lo que hace al cambio climático, también se considera la necesidad de aumentar la capacidad de adaptación a los efectos adversos del cambio climático y fomentar la resiliencia ente los impactos climatológicos de una manera que no amenace la producción alimentaria.
Este nuevo paradigma de desarrollo, así como el Acuerdo de París y la Agenda de Acción Addis Abeba sobre el financiamiento para el desarrollo, plantea retos importantes para los países y se complementan entre sí en el tema de seguridad alimentaria y demás.
Entonces, yo quisiera preguntarle en ese sentido, embajadora, ¿cuáles son los retos más importantes para México a la luz de este nuevo paradigma y cómo se plantearán ante el Sistema de Roma?
Ya más o menos lo perfiló en su presentación, pero quizá podríamos ser como un poco más concretos en tanto a la Agenda 2030 en lo particular.
El otro tema que yo quisiera preguntarle de manera muy particular, ¿cuáles serían los objetivos de México hacia la Conferencia General del CIDE en julio de 2017, que será precisamente la primera conferencia del Fondo tras la aprobación de la Agenda 2030?
Finalmente quisiera aprovechar, reconocerle y agradecerle que haya mencionada nuestro punto de acuerdo sobre los informes de los representantes de México ante los organismos internacionales, pues nos da mucho gusto que los embajadores se enteren del trabajo que hacemos en el Senado, eso en primer lugar,
Y sí agradecerle la disposición a cumplir con este que es un exhorto y yo quisiera aprovechar porque aquí está también el director de, bueno, aquí estaba, el director de Coordinación Política de la Cancillería, pero atrás está Sergio Valdivia, para pedirle de favor que pudiéramos dar cumplimiento a este exhorto.
Porque justamente a raíz de que la embajadora Bárcena lo recordó, este punto de acuerdo se aprobó en abril del año pasado y es un punto de acuerdo, que lo podemos decir abiertamente, se negoció con la Cancillería, para que pudiéramos recibir en el senado, no sólo en la Comisión, los informes de los representantes ante organismos internacionales.
Yo quisiera aprovechar para pedirle al área de coordinación política sus valiosas gestiones, como siempre, para que pudieran darse cumplimiento a este exhorto.
Ya pasaron ocho meses, no hemos recibido hasta el momento ningún informe y creo que vale mucho la pena retomar la disposición de la Embajadora porque además todos los embajadores que ha pasado por estas comisiones, cuando hemos tratado este tema todos han dicho: encantados de mandar los informes porque si no pues un poco lo que decíamos antes, vienen, comparecen, la mayoría son buenos perfiles, los votamos a favor pero luego no volvemos a saber nada de ellos hasta el siguiente cargo, que regresan
Entonces sí quisiera yo pedir que pudiéramos tener, a lo mejor en enero, los primeros informes de los representantes de organismos internacionales de acuerdo a lo que se acordó.
Esas serían mis preguntas y de nuevo muchísimas gracias Embajadora.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRÓN: Por mi parte tendría tres preguntas Embajadora y primero reiterarle que, como siempre, bienvenida al Senado de la República.
La primera es: en su carpeta, trabajo describe a México como un referente de la política de seguridad alimentaria, ejemplar en el cumplimiento del objetivo de desarrollo del milenio para erradicar el hambre y en su exitosa estrategia Cruzada Nacional contra el Hambre.
Sin embargo, si revisamos los datos del CONEVAL, 27 millones de mexicanos viven en pobreza alimentaria y el 12.5 por ciento del total de la población sufre desnutrición crónica.
En zonas rurales, el 80.8 por ciento está clasificado bajo algún nivel de inseguridad alimentaria, en datos de 2012.
Y entre 2008 y 2014, la carencia por acceso a la alimentación aumentó de 21.7 a 23.4 por ciento en la población.
En ese sentido, ¿cuáles son las estrategias que debe desarrollar México para que pues el liderazgo que decimos tener a nivel internacional pues tenga sentido con la política nacional?
O sea, al final yo estoy convencida, lo hemos discutido usted y yo, la política interior no es suficiente para tener una buena política exterior pero sí es necesaria.
Y si bien yo estoy de acuerdo y siempre lo aplaudo en que México tenga esquemas de cooperación y sea un importante donatario a los organismos internacionales, pues también es una realidad que hablar de 27 millones de mexicanos en pobreza alimentaria, pues no es como para ser ejemplo de absolutamente nada.
En segundo lugar, usted describe que uno de los ejes del FIDA para aumentar la productividad agrícola es el desarrollo rural.
¿Cuáles son las deficiencias que México enfrenta en materia de desarrollo rural y cómo es que deberían ser abordadas para atacar las causas estructurales que hasta ahora la han obstaculizado, a partir de las experiencias internacionales que usted haya identificado?
Y, por último: ¿cuáles serán las políticas para promover la mitigación frente a fenómenos meteorológicos como el Niño, en el marco de la Iniciativa Corredor Seco Centroamericano que México ha impulsado como algo prioritario para la Región de América Latina y el Caribe?
Al final, pues mucho se habla de los temas migratorios pero poco de las causas y una de las causas más importantes que se prevén para el Siglo XXI tendrán que ver con el cambio climático.
Así que: qué podemos hacer o qué podríamos hacer, desde su muy posible cargo para apoyar a Centroamérica en esta difícil coyuntura.
Creo que serían todas las participaciones. Así que, Embajadora, tiene usted el uso de la palabra.
EMBAJADORA MARTHA BÁRCENA COQUI: Muchas gracias senadora. Trataré de dar respuesta a todas las preguntas porque son muchas, largas y muy técnicas.
Pero primero quisiera agradecer a la senadora Angélica Araujo, justamente recordar la importancia de la Agenda 20-30 y de los mecanismos de seguimiento que se están instrumentando en México, no sólo en el INEGI sino en una oficina especial en la Presidencia de la República. Ya desde el sexenio pasado se ha continuado desde los objetivos del desarrollo del milenio hasta pasar ahora a la Agenda 20-30.
Sin duda alguna uno de los retos más grandes que tenemos es justamente la articulación de las acciones de las diferentes entidades que conforman el gobierno de México y no sólo la parte ejecutiva.
En el Poder Ejecutivo las diferentes secretarías de Estado, porque para el cumplimiento de la Agenda 20-30, si cada Secretaría hace lo suyo pero no se coordina con los demás, puede haber una gran dispersión de esfuerzos y una gran dispersión de recursos.
Entonces uno de los grandes retos que tenemos justamente es la coordinación y lo que yo pediría también como representante permanente ante la FAO, es justamente que se nos mantenga informados de esos esfuerzos de coordinación, de dónde detectan que hay necesidad de hacer alguna vinculación específica con los organismos que están en Roma, en particular con la FAO; con el FIDA o en dónde detectan que podemos avanzar alguna propuesta específica para el logro de esos organismos.
En la carpeta, efectivamente, mencionaba yo también senadora, a los parlamentarios contra el hambre y sin duda alguna es fundamental la acción que están haciendo los parlamentarios contra el hambre para lograr la erradicación del hambre y la pobreza rural.
¿Cómo lo podemos hacer?
Creo que los parlamentarios contra el hambre y se vinculan en esto con los retos que planteaba la senadora Araujo, 1 y 2 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, es articular lo que está haciendo parlamentarios contra el hambre con lo que haga Naciones Unidas con los esfuerzos nacionales.
Aquí en el reto contra el hambre, creo que está viéndose también una nueva discusión o si no, no tan nueva, pero una discusión interesante en los organismos como FAO y que acaba de salir un artículo en la revista, me parece que era Science o Nature, la semana pasada, y es el tema no sólo del acceso a los alimentos en sí; sino a qué tipo de alimentos.
Porque puede haber muchos alimentos, pero que tengan un valor nutricional muy bajo, y entonces aunque las personas tengan acceso a esos alimentos; esos alimentos no los nutren y por lo tanto no están contribuyendo ni a erradicar el hambre ni están contribuyendo a erradicar la pobreza alimentaria.
Entonces, tenemos no sólo el reto de producir los suficientes alimentos, sino producir los alimentos de calidad, que realmente contribuyan a la nutrición; y producirlos de manera sustentable.
Decía justamente el representante de la FAO en esta expo alimentaria: ya cada vez va a importar no sólo la cantidad, sino la calidad, y a eso ligado los sistemas de distribución, porque nosotros tenemos un gran reto en México, lo sabemos, no sólo para la alimentación, para la educación, para la comunicación, de las comunidades más pobres; las comunidades más pobres son comunidades muy pequeñas muchas veces establecidas en la sierra, muy dispersas, en donde es difícil acceder.
Entonces es difícil acceder a ellos con educación, es difícil acceder a ellos con comunicación, es también difícil transportar los alimentos; entonces cómo ayudar a que tengan una sostenibilidad en la producción de alimentos; alimentos de calidad que les permitan combatir la malnutrición y justamente que nos permita bajar esas cifras tan alarmantes, y si no alarmantes, tan tristes que nos da todavía CONEVAL de que a pesar de que hemos hecho esfuerzos considerables, no han sido suficientes para reducir la pobreza alimentaria y el desarrollo rural.
Creo que esta manera de coordinarnos todos, de mantener esta información fluyendo, constante y a la vez de avanzar siempre en las propuestas, porque el hecho de que tengamos rezagos en México no nos debe de impedir tampoco proponer ideas nuevas o conceptos o políticas nuevas que justamente puedan contribuir al logro de los objetivos.
Lo que yo también quisiera señalar es que efectivamente, en prevención de desastres quizá el organismo en que nos vincularemos más es FAO, sí, por todas las cuestiones de mitigación, pero el programa mundial de alimentos; porque el programa mundial de alimentos entra en casos de desastres: ya sea desastres naturales, desastres hechos por el propio hombre, desastres antropocéntricos, si se les puede llamar así. Sino también se le está pidiendo al programa mundial de alimentos que diseñe políticas que impidan la repetición de esos desastres.
Y ahí es donde se tiene que articular el programa mundial de alimentos con la FAO, con todo lo que es el combate a los temas como sequía, como distribución de alimentos y también con los esfuerzos regionales y nacionales.
Entonces, creo que la presencia del programa mundial de alimentos en la reunión que vamos a tener en la plataforma en mayo en Cancún, va a ser fundamental porque las experiencias del Programa Mundial de Alimentos pueden ser interesantes, y a la vez la plataforma le puede dar un mandato también o unas sugerencias al Programa Mundial de Alimentos para impedir la repetición de hambrunas, de sequías, etcétera.
Voy a tratar de responder también a cuáles son los retos más importantes para México en la FAO-MA Y FIDA.
En la lectura de todos los documentos que tiene la FAO, tiene muchos proyectos de cooperación técnica con México, tanto como donante como con la creación de fideicomisos que administra los recursos de diferentes secretarías de Estado para poner en práctica varios proyectos. No sólo colabora con SAGARPA, colabora con CONAFOR, colabora con SEDATU, colabora con SEDESOL, con el propio INEGI, etcétera.
¿Pero qué es el reconocimiento constante de FAO y de FIDA sobre México?
México es un país con instituciones fuertes. México es un país con recursos. México es un país con presupuestos y México es un país con políticas públicas bien diseñadas.
Lo marco en México está bien, reconocen los organismos; en donde viene el fallo es en lo micro.
¿Qué dice el FIDA?
Por ejemplo, recursos hay para financiamiento del campo, pero el grueso del financiamiento del campo se va a parcelas de 20 hectáreas; y los mayores beneficiarios del financiamiento para el campo, así como de los subsidios para el campo, son siete estados del norte que son los mayores productores de exportación.
En cambio, los estados del sur-sureste tienen muy poco acceso al financiamiento agrícola, y los productores de parcelas menores a cinco hectáreas tienen virtualmente acceso cero al financiamiento.
¿Qué es lo que ofrece el FIDA? El FIDA ofrece la experiencia que ellos tienen de trabajo con otros países justamente para este perfil de pequeños productores para decir: ¿Yo le voy a contribuir a México con recursos? Sí, porque tengo recursos. ¿Pero México necesita muchos recursos financieros? No, lo que México necesita es el modelo para enfrentar los problemas específicos que tiene para la necesidad que tiene de combatir la pobreza rural en ciertas áreas muy específicas con parcelas pequeñas con poco acceso al financiamiento y también con poco acceso a la tecnología y a los canales de distribución.
En ese sentido, ¿cuáles son los retos para México? Creo que la misión permanente es sentarse a trabajar con el secretariado, mantener un diálogo constante con todas las secretarías de Estado involucradas en México, con el Senado, con la Cámara de Diputados, con la Comisión de Seguridad Alimentaria del Senado, para decir: A ver, este caso, esta buena práctica funcionó en este país, vamos a probar si funciona en este estado e ir haciendo círculos concéntricos de éxito, hasta que hagamos círculos no viciosos sino círculos virtuosos de éxito.
Los objetivos de México en la Conferencia General serán justamente el ver cómo va a alinear la FAO su programa a mediano plazo y su programa inmediato a la nueva agenda de desarrollo, en particular a la Agenda 2030.
Y los informes, ya lo vimos, creo de alguna manera, senadora Cuevas, que las estrategias que debe desarrollar México para compadecer el liderazgo internacional con los retos internos, creo que ya los mencioné con estos temas de los ejemplos que nos propone el FIDA, el tipo de cooperación que nos propone el FIDA.
Y justamente el FIDA nos dice que quiere trabajar con México y que así lo está haciendo para ver los temas de por qué la productividad en México en el campo se ha estancado.
Hay un informe muy interesante que sacó el FIDA hace un mes, que se llama: El Informe Mundial sobre Desarrollo Rural y el capítulo en América Latina dice que si bien América Latina es la región que más ha progresado en materia de desarrollo rural y de combate a la pobreza rural, que el desarrollo ha sido diferente y algunos países, curiosamente como Bolivia, siendo mucho más pobre, han tenido mucho más éxito y un desarrollo más acelerado en el combate a la pobreza alimentaria.
Identifica a México como un país en donde se nos ha estancado la productividad agrícola, sobre todo en las zonas de pequeños y medianos productores, no en las grandes empresas, que son absolutamente no sólo muy reconocidas sino muy exitosas.
Y en el tema de la mitigación y el corredor seco, creo que justamente vamos a trabajar muy en contacto con la FAO para ver cómo va a instrumentar cada una de las prioridades que ha dado y cómo vamos a estar trabajando con la Agencia Mexicana de Cooperación y con las representaciones de los países americanos en la FAO, para vincular el trabajo de la FAO con los efectos también del cambio climático.
Tengo también la fortuna y creo que buscaré trabajar de manera muy estrecha con la embajadora Patricia Espinoza, que está ahora al frente de la Convención sobre Cambio Climático, para poder articular.
Creo que el gran reto no sólo de México sino de todos los países en esta era de la globalización, aunque la globalización está siendo ahorita puesta en tela de juicio, y ¿por qué está siendo puesta en tela de juicio? Porque nada más enfatizamos sus éxitos y sus logros y no nos dimos cuenta de sus debilidades.
Y una de sus debilidades es la ausencia de coordinación y de consenso. Para ser exitosos en la globalización, tenemos que tener consensos internos, tenemos que tener coordinación de posiciones, tenemos que saber actuar gobierno, sociedad civil, universidades.
Una de las cosas que también quiero dar a conocer en FAO, en Roma, es la gran fortaleza que tenemos en centros de investigación en universidades en México.
CEMIT es un centro que a veces se reconoce más en otros países que en propio México. El Colegio de Postgraduados, el CINVESTAV y la Unidad de Biotecnología del Poli en Irapuato.
Eso es algo que debemos de aprovechar mucho más, porque esos centros también pueden ser y reproducir las grandes experiencias de éxito en los organismos internacionales en México.
Y a veces nos manejamos sin reconocer esas grandes fortalezas que tiene México y el efecto reproductor que pueden tener esas instituciones de excelencia para alcanzar las metas de desarrollo sostenible y al mismo tiempo enfrentar los grandes retos que tenemos en México.
Yo me sentiré muy satisfecha si la misión permanente de México en Roma puede contribuir y las entidades del gobierno y el Poder Legislativo sienten en dos años que la misión permanente de México en Roma contribuyó a avanzar en los objetivos de disminución de la pobreza rural, de la pobreza alimentaria y en la disminución del hambre en México.
Creo que no tenemos mayor tarea, porque tenemos esa deuda con los mexicanos que menos tienen y ojalá que podamos trabajar en conjunto.
SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRÓN: Muchas gracias embajadora Martha Bárcena, nos da mucho gusto tenerla aquí, tener esta puntualísima exposición y respuestas.
Espero, hoy como verán, no tenemos quórum suficiente para votar los nombramientos, pero espero que el día de mañana sí lo tengamos y podamos ya dar paso puntual de todo el proceso legislativo que implican los nombramientos.
Muchas gracias además y quisiera resaltar, así como lo hizo la presidenta Laura Rojas, por iniciar su intervención hablando de la rendición de cuentas.
Hacemos votos por que eso suceda y además por se contagie.
Muchas gracias embajadora y muchas gracias también a todas y a todos mis compañeros por su presencia.
Les pido por favor que antes de que se vayan dejemos firmados los dictámenes y las listas de asistencia. Todavía hay uno a circularles, así que por favor todavía no se retiren.
Muchas gracias a todas y a todos, se levanta nuestra reunión de trabajo.
